La intención

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Centro Regional de Educación Normal de Aguascalientes

La intención

Docente: Ma. Angélica Núñez Bernal

Alumna: Saraí Llamas Saucedo

Lic. Educación Primaria

Fecha: 16/10/2015

EVALUACIÓN

En el cuarto semestre cuando se presenció el curso de evaluación para el aprendizaje me surgieron grandes dudas respecto al tema de la evaluación, ya que si bien tuve la oportunidad de diseñar los diferentes instrumentos de evaluación, no tuve el conocimiento aplicado dentro del aula escolar, me refiero a ¿Cómo se registra la información? ¿Qué se debe considerar? ¿Cómo se realizan las devoluciones? ¿Cómo evaluar durante el proceso de aprendizaje?, entre algunos otros cuestionamientos.

Lo anterior dio pauta para iniciar con la incertidumbre sobre el tema evaluación. Fue en el mismo semestre cuando ejercía mi práctica docente atendiendo un grupo de primer grado, recuerdo claramente cuando la maestra titular me pidió la evaluación de la asignatura de educación artística la cual la  había impartido un par de días anteriores, fue en ese instante que se hizo notorio un gran nerviosismo; pues me preguntaba  ¿Qué evalué?, ¿Cómo le doy un número a un alumno si no tengo los elementos para ponérselo? ¿Y si le pongo 10 y no lo merece? ¿Y si le pongo 5 y no lo merece? ¿Qué hago?... la maestra titular insistía que necesitaba las calificaciones de los alumnos… ¿Qué hago? Nuevamente me cuestionaba, al ver la situación no me quedó otra alternativa que realizar lo que en mi vida me hubiese gustado que realizaran conmigo,  evaluar al alumno con lo que yo creía lograría.

Pasaron los días y aún seguía con aquella inquietud, las preguntas que pasaban por mi mente continuaban ¿me gustaría que a mí me hubieran hecho lo mismo? ¿Si llega un padre de familia y me pregunta por esa evaluación de su hijo que le voy a decir?, ¿soy una maestra ética? Esas y muchas otras preguntas me realizaba en aquel período...

Así pues; en el desarrollo de mis prácticas profesionales la actividad de evaluar a los alumnos se me ha dificultado por varios motivos; uno de ellos es no saber establecer  y aplicar los instrumentos propios de cada aprendizaje esperado, otro es no contar con el tiempo requerido tanto para preparar una propuesta como para corregir y revisar los trabajos de los alumnos y por tanto no realizar las devoluciones pertinentes en su momento, además considero que esta etapa educacional tiene un gran peso específico dentro del proceso de enseñanza y aprendizaje pues como docentes estamos enfrentados a una tensión entre la responsabilidad de garantizar públicamente que el alumno ha logrado ciertos aprendizajes y el riesgo de obstaculizar las posibilidades de desarrollo de un individuo, por tanto, considero que merece la mejor de las preparaciones en dicha actividad  ya que si bien es un proceso, y no solo un acto aislado.

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