CUENTOS CORTOS DE VALORES

Las flores presumidas

Había una vez una cueva muy grande y bonita en la que había unas plantas muy bonitas que solo florecían en la noche. Estas plantitas eran muy presumidas y cuando llegaba un animalito a vivir ahí ellas les decían cosas feas para correrlos porque decían que las hacían ver feas.

Una noche llego una familia de murciélagos viajeros que iban ya muy cansados y las plantas rápido empezaron a decir:

-mira que animales tan feos.

-parecen ratas.

-qué asco.

-guacala.

Los murcielaguitos se empezaron a sentir mal pero ya estaban muy cansados para salir de nuevo así que decidieron quedarse.

Esa misma noche unos niños traviesos entraron a la cueva y comenzaron a romper las flores presumidas. Las flores empezaron a gritar y despertaron a los murciélagos y los murciélagos corretearon a los niños y los sacaron de la cueva.

Las flores presumidas después de eso pidieron disculpas y se dieron cuenta que todos los animalitos pueden ser muy buenos y que se equivocaron al pensar mal de ellos por su apariencia.

Fin.

El perrito feo

Había una vez una granja cerca de las montañas en la que un día apareció un perro muy peludo, flaco y negro que llego buscando un lugar para vivir, parecía ser un cachorro.

Se acercó a las vacas primero por algo de leche y las vacas lo ahuyentaron, después fue con las gallinas, pero el gallo lo picoteo, se dirigió a los cerdos y ellos lo tiraron al lodo.

Fue entonces que una perrita lo adopto y lo junto con el resto de la manada, al principio sus hermanitos tampoco lo querían porque decían que era feo, su mamá los enseño a quererlo y aceptarlo.

Pasaron los años y aquel perro fue creciendo, pero los demás animales seguían sin quererlo. Un día el perrito se fue de la granja por unos meses porque quería explorar alrededor del mundo.

Cuando el perro decidió regresar escucho a lo lejos el alboroto de los animales y corrió rápidamente a la granja, al llegar vio que un enorme gato montés quería comerse a las gallinas. El perro entro y corrió al gato montés salvando a las gallinas. En ese momento todos vieron sorprendidos que ese perro que ellos veían feo ahora era un enorme, fuerte y hermoso lobo que había llegado a la granja cuando era un cachorro porque se había perdido.

Fin.

Blanca Nieves y los 7 enanos especiales.

En un reino muy lejano vivía una joven princesa la cual vivía en el bosque en una cabaña con 7 enanos los cuales tenían capacidades diferentes y esto los hacia estar tristes y no querer salir de su casa.

Estos enanos eran muy especiales pues tenían habilidades diferentes que los hacia únicos y diferentes de los demás, pero debido a estas habilidades los enanitos se avergonzaban de ir al pueblo por que las personas los veían raro, murmuraban cuando ellos pasaban y eso los hacía sentir mal.

Blanca Nieves siempre los animaba cantando mientras limpiaba la cabaña y ellos a pesar de ser diferentes la ayudaban en las labores domésticas y la querían mucho.

Cierto día Blanca Nieves quiso ayudar aún más a sus amigos enanitos y fue al pueblo a hablar y enseñar a las personas para que aprendieran lengua de señas y escritura braile, pidió que adecuaran las banquetas para sillas de ruedas, que fueran más tolerantes con las personas diferentes, que no permitieran que se discriminara a nadie.

Para su sorpresa todas las personas del pueblo reaccionaron de muy buena manera y la apoyaron totalmente, hicieron grupos para aprender entre todos y ayudarse, otros más adecuaban las calles y señalamientos e incluso organizaron una fiesta sorpresa para los enanitos.

El día de la fiesta Blanca nieves convenció a los enanitos de ir al pueblo y la sorpresa que les prepararon les conmovió tanto que algunos lloraron de emoción. Todos les dieron un abrazo y les dijeron que jamás permitirían que alguien los hiciera sentir mal.

Carlos y Guadalupe.

Había una vez un niño llamado Carlos quien conoció a una niña llamada Lupita en la escuela, al principio la niña siempre andaba sola y a Carlos esto le parecía muy extraño ya que lupita era muy bonita.

Un día Carlos se animó a hablarle, pero se puso triste cuando lupita ni siquiera lo volteo a ver. Ese día Carlos llego a contarle a su mama lo que había pasado y su mama le dijo que lo que pasaba es que lupita no escuchaba.

Ese mismo día Carlos busco en la noche en internet el lenguaje de señas y aprendió a decirle -hola, como estas, me llamo Carlos, eres muy bonita-.

Al día siguiente Carlos le dijo en lenguaje de señas lo que había aprendido y lupita se puso muy feliz y desde ese día comenzaron una bonita amistad.

Pedrito el valiente

Había una vez en un pueblito un niño que no podía ver, estaba ciego y se llamaba Pedrito.

Los niños no querían jugar con él porque no podía ver y eso ponía triste a Pedrito.

Aunque Pedrito era ciego el conocía todo el pueblo y podía moverse para donde él quisiera solo con ayuda de su bastón.

Una noche mientras los niños jugaban a las escondidas, Pedrito escucho que alguien se cayó y en ese rato se fue la luz.

La gente no tenía lámparas ni nada para aluzar y Pedrito muy valiente salió a buscar a quien fuera que se había caído y descubrió que Juan estaba adentro de un pequeño pozo y le estaba saliendo sangre de la frente.

Pedrito lo ayudo a salir y le dijo

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