Sujeto Y Educacion

Ensayo sobre la dimensión corporal.

Desde el vientre y el momento mismo en el que ser humano nace, entra relación consigo mismo y con los demás y por lo tanto, el niño y la niña están preparados para interactuar, jugar, aprender y afrontar las adversidades, y de hecho lo hace a un cuando nadie se lo ha enseñado “intencionalmente “, ya que viene habilitado e innato para ello; por lo tanto podrá extraer de sus experiencias, aprendizajes posteriores, positivos o negativos para su formación. De ahí la gran importancia de tener buenas y sanas relaciones, de crear y mantener un ambiente propicio, inclusive antes del nacimiento, para poder suplir todas las necesidades básicas, tanto físicas como mentales del menor, protegiendo y garantizando así todos sus derechos, si queremos una sociedad bien conformada en un mañana.

Siendo la infancia esa etapa donde el juego lúdico es indispensable para el desarrollo integral, donde la interacción con los demás y con la cultura tiene su mayor influencia en la estructuración gradual de la personalidad. Donde cada menor es un ser único y con un temperamento definido por lo cual hace que su infancia sea igualmente única, teniendo sus propias caracteristicas en la estructura corporal, lo que implica una buena alimentación, aseo, arreglo personal, y vestuario propio para la edad. Tienen también sus propios lenguajes, sus juegos, su música, sus diversiones y sus propias organizaciones sociales, tiene su propia didáctica, esto quiere decir que cada temperamento infantil requiere un tratamiento adecuado.

Abordar en si la dimensión corporal dentro del desarrollo humano tiene como propósito presentar elementos que se puedan fundamentar con su conceptualización y sus relaciones con las otras dimensiones, así como posibilitar en la comunidad educativa la investigación, el estudio y el interés que deben tener las prácticas educativas. En cualquier actividad lúdica el ser humana debe ser visto como totalidad, como una unidad como tal, que no es posible afectar una de sus dimensiones sin que se afecten las demás, superando así, la tradición cultural y disciplinaria que lo ha venido abordando de manera parcial, particular y aislada.

En el nivel preescolar se tienen en cuenta todas las dimensiones del desarrollo para la formación integral del niño y la niña, las cuales hacen un aporte al logro de los objetivos comunes a todos los niveles.

El aporte que realiza el preescolar para lograr dichos objetivos, están orientados a rescatar todo lo lúdico de los juegos, las retahílas, las rondas, trabalenguas, adivinanzas y canciones tradicionales de cualquier región, propiciando el desarrollo corporal, socioafectivo y psicomotor del menor, de modo que pueda alternar la escuela y la vida, la práctica y la teoría, el conocimiento y el trabajo, basados en todas las facetas de la personalidad; social, intelectual, espiritual, físico y emotivo,

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