Etica Profesional Docente

/ La ética profesional es uno de los pilares más importantes en nuestro desarrollo como educadores, en los últimos años este tema ha quedado de lado y por consiguiente nuestra sociedad se ve afectada. La educación se ve fuertemente golpeada y en la actualidad se notan los rasgos una sociedad donde ser corrupto no es motivo de vergüenza, todos los males que aquejan a los ciudadanos vienen desde abajo desde que estamos en el kínder desde las actitudes que muestren los profesores somos formadores de ciudadanos y que nuestros principios de una manera indirecta serán transmitidos a los jóvenes, con esto no quiero decir que debemos ser los mejores ciudadanos pero sí que tengamos claro que tenemos la gran responsabilidad de formar personas educadas y que nada mejor que hablar con el ejemplo.

“Desde la Modernidad, se está intentado excluir la ética -esencial para la persona- de la realidad social. Con el paso del tiempo es la estética la que sustituye a la ética. El sujeto carece de identidad personal. La consecuencia directa más lamentable de este intento es la desintegración de la humanidad de la persona. La razón cuantificadora toma el timón del humano conocer. La realidad se cuantifica, se cuenta, se mide. Viene el frenesí de la información. El saber humano se convierte en empresa económica, casi siempre en manos de la política, como poder coercitivo del Estado que administra las cosas en vez de ocuparse del gobierno de las personas. El hombre queda absorbido por sus necesidades materiales: las reales y las que origina el proceso económico producción-consumo.

El quehacer educativo de hoy está en el planteamiento ético de la tarea y del objetivo del educador. Se trata de ayudar a los profesores para que no pierdan de vista su meta, que no es otra que la de formar hombres íntegros, personas: por tanto restituir a la norma ética su primacía. La actitud ética es la primera condición requerida para el buen conocedor y en consecuencia para quien en posesión de ese conocimiento tiene que transmitirlo, tiene que educar, suscitando en sus alumnos esa actitud hacia el buen saber. Se trata de ayudar al nítido discernimiento entre el bien y el mal, y la adecuada comprensión de la libertad de la persona. Lo primero que debe hacer el educador como profesional de la enseñanza, es conseguir que su propia tarea sea un acto ético, actuando éticamente, como persona que se dirige a personas, ha de ser un acto personal bueno, en sí y en sus consecuencias. Ha de ser un buen profesor, siendo un profesor bueno/ Al anotar tres claves del éxito profesional en el campo de la docencia, pienso serán que solo tres pueden resultar importantes?, o con practicar excelentemente solo tres ya seremos mejores educadores, es difícil elegir solo tres pero al tener que escoger las tres que elegiría son:

• Equilibrio emocional, estabilidad, manejo objetivo y racional de las situaciones; esto deberíamos tomarlo como una virtud que debe tener todo educador sabemos que no siempre es fácil mantener una estabilidad emocional al 100%, muchos educadores llevan sus problemas personales al aula y dejan que estos afecten de manera directa en el buen desarrollo de la clase un buen educador debe poder separar su aspecto personal con lo laboral es un tema difícil pero cuando todos los educadores puedan separar esto estaremos con un buen comienzo en la formación de excelentes personas.

• Interés por la actualización de sus conocimientos y de sus procedimientos educativos: si bien es cierto algunos métodos que utilizan los educadores son excelentes debemos abrir paso a las nuevas técnicas y métodos que nos ofrece esta sociedad tecnológica en la que nos estamos introduciendo estar al tanto de nuevos métodos y estrategias que nos faciliten el desarrollo educativo.

• Cordialidad, sentido del humor, amabilidad y respeto para con toda persona: Siempre que nos preguntan valores decimos respeto, puntualidad y está bien que los mencionemos pero porque no decimos cordialidad, es tan poco importante para nosotros o no sabemos su significado, debemos tratar a los estudiantes como personas y respetarlos como tal no presentarnos ante ellos como un ser superior que todo lo sabemos y que quien nos corrija nos ofende, si bien hay tener una línea de respeto podemos desempeñarnos como educadores siendo ambles o con un poco de humor somos al fin más cercanos con nuestros estudiantes que con nuestra propia familia los vemos más seguidos a ellos que a cualquier otro familiar, por ello trabajar en un ambiente lleno de cordialidad sería una de las llaves al éxito.

/ El docente del siglo XXI tiene una responsabilidad gigantesca, ya que su deber no se basa sólo en ofrecer tradicionalmente las clases, el docente tiene una faena enorme por llevar a cabo. Dicha tarea es la de transformar completamente a esta sociedad, transformarla significativamente, orientando al estudiante no sólo en ámbito académico, sino en los valores fundamentales de la vida, esos valores que son la esencia de todo ser humano y que determinarán su coexistencia en esta sociedad.

Indudablemente, el nuevo docente debe ser un verdadero transformador social, pero también debe ser un líder que lleve las riendas en todo momento, que le de significado a lo que enseña para así cautivar la atención del niño y niña y de esa manera lograr plenamente un verdadero aprendizaje significativo. Pero no sólo la cuestión académica debe

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