La Paradoja De La Elección

La paradoja de la elección

El dogma oficial de las sociedades industriales modernas trata de que las personas siempre se encuentran en la búsqueda de la “felicidad”, la mayoría de ellas tienden a buscarla al tratar de lograr maximizar el bienestar individual de cada uno, y la manera de que los individuos logran esta es maximizando la libertad de elección de las personas, ya que al tener esta libertad de decisión por ellos mismos y que no tomen otros las decisiones por ellos, deberían lograr el máximo bienestar personal de cada uno.

El problema está en la decisión, cada vez tenemos más opciones de elección en cada área que podemos desenvolvernos. Con las sociedades y tecnologías cada día mas desarrolladas, crean cada vez más servicios/productos nuevos o mejorados respecto a los anteriores, que nos hacen crear cada vez nuevas necesidades. La dificultad de la toma de estas decisiones a creado un nuevo problema, llamado la “parálisis”. Dicho término se refiere a la consecuencia de tener demasiadas elecciones y al tomar una de estas, terminamos menos satisfechos con los resultados de haber tomado esa decisión, de lo que tal vez estaríamos si hubiésemos tenido menores opciones de elección.

Las principales razones que ocurren parálisis debido a la libertad en la toma de decisiones son:

• Al tener muchas libertades de elección, los costos de oportunidad de estas, nos quitan parte de la satisfacción que nos otorga la elección que efectivamente realizamos, aun cuando creemos que hemos realizado la mejor decisión.

• Al existir demasiadas variedades o un alto rango de elección, nos “confunden” al hacernos dudar cual es efectivamente la mejor decisión.

• Se crean expectativas en las elecciones que realizamos, a veces demasiado altas, y cuando las obtenemos se pueden volver decepcionantes al no obtener todo lo que uno contemplaba. La publicidad es un gran impulsor de estas expectativas en las personas ya que logran que la gente cree mayores expectativas o nuevas necesidades, en cosas que no las tenían.

Cuando solo existe una sola opción de decisión, y al no estar conforme con esta decisión tomada, se tiende a culpar al que provee esta elección.

Cuando existen demasiadas opciones de elección, se tiende a culpar a uno mismo, por no haber tomado una mejor decisión. Y aun así cuando uno piensa que tomaste la mejor elección, no obtienes todo el sentimiento de máximo beneficio, ya que ante las expectativas que se crean dado la gran gama de elecciones que existen, tiendes a creer que tal vez pudiste tomar una decisión distinta.

El mercado, cada vez nos ofrece más opciones, cada vez mas banales, caras y complicadas en cosas que realmente la gente tal vez no necesita, esta gran gama de opciones que tenemos a la hora de elegir, no solo no sirven, sino que realmente lastiman, ya que

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