Pregunta 4 Platon

La piedra angular del pensamiento actual la podemos hallar en Platón. Su teoría política planteaba un sistema de gobierno fundamentado en una monarquía encabezada por un filósofo-rey que tenía que representar los ideales de bondad, justicia y sabiduría. Se trataba de un educador de la ciudadanía que enseñaba a los ciudadanos a ser críticos con la realidad en la que vivían, sacándolos de la ignorancia en la que se encontraban, de la caverna oscura que les impedía ver la auténtica realidad conociendo solo la apariencia de las cosas, las sombras de las mismas.

Este ideal de figura política, formado y con un gran conocimiento que intenta hacer llegar al resto, que no gobierna con el fin de adquirir poder y dinero, sino al contrario, con el propósito de ayudar a los ciudadanos, debería ser el gobernante de nuestros días. Sin embargo, si observamos a los diferentes políticos que existen en la actualidad nos damos cuenta de que más que realizar su trabajo por amor al mismo y con el propósito de ayudar a la mejora de la sociedad, lo hacen para su propio enriquecimiento y fama. Parece casi inevitable que a diario veamos políticos corruptos por el poder y que olvidan fácilmente sus promesas iniciales, dirigiendo sus esfuerzos en la búsqueda del propio beneficio.

Tal vez por todo esto, y la situación política de la Atenas de su época, Platón plantease un político no con ansias de gobernar sino más bien tendente a alejarse del gobierno, dirigido al conocimiento más que al ejercicio del poder. Un político sin bienes materiales con una clara función de formador del pueblo, pues en la formación del sujeto radica el éxito del Estado. Si observamos el planteamiento de Platón nos damos cuenta de que para él la política es tan importante que es imposible que la lleve a cabo cualquiera, se trata de alguien que ha sido formado para ello y que vivirá para poner en práctica todo ese conocimiento. Queda claramente reflejado el valor de la solidaridad en Platón, tan en falta en nuestro tiempo donde apenas conocemos al que tenemos al lado cuanto menos al político que dirige nuestras vidas en una sociedad cada vez más caótica.

A Platón se le suele criticar por su creencia en la existencia de una realidad distinta de las apariencias, de un conocimiento racional distinto del conocimiento sensible, pero ¿han sido adquiridos todos nuestros conocimientos a través de la realidad de las cosas? Si es así. cómo es posible que hablemos sobre cosas que nunca hemos visto. Vivimos una realidad que se transforma al ritmo de los medios de comunicación, parecemos marionetas cuyas cuerdas nos impiden movernos a nuestro antojo. Creemos en la guerra, en el hambre, en la miseria, en la destrucción del planeta, etc., en la medida que aparezcan o no en la televisión o en la radio. Hemos creído que la ignorancia nos hace felices, y lo que consigue es impedir nuestro crecimiento como personas críticas en favor del beneficio de unos pocos situados en el poder, para los que las voces de algunos resultan molestas. Nos contentamos con comer cada día y tener ciertos entretenimientos que cubran nuestro escaso tiempo libre, ni siquiera

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