Capitulo 4 Hobsbaun

CAPITULO 4 1848--1875 Conflictos y guerra

El gran auge de la década de 1850 señala la fundación de una economía industrial europea. Esteesplendor supuso para los gobernantes un respiro luego del agobio sufrido durante lasrevoluciones del 48. Ahora, los problemas planteados por los movimientos revolucionarios, podrían ser mitigados gracias a la época de prosperidad económica que se extendería hasta lacrisis de 1870. Así pues, los problemas sociales encontrarían una válvula de escape, sinembargo las dificultades políticas continuarían y se harían evidentes hacía fines de la década de1850. Los asuntos internos de las naciones demostrarían estar íntimamente entrelazados con losinternacionales. En Alemania e Italia, en el imperio de los Habsburgo, en el otomano y en elruso, el liberalismo y la democracia radical, o al menos la demanda de derechos y larepresentación no podían separarse de las demandas de autonomía, independencia o unificaciónnacional. Y a su vez y en el caso de Alemania, Italia, y el imperio de los Habsburgo dichasituación podía producir conflictos internacionales. (Por ejemplo la unificación Italianaimplicaba la expulsión del Imperio de los Habsburgo al que pertenecía gran parte del norte deItalia. Con Alemania lo mismo. Ambas unificaciones implicaban la guerra con el ImperioAustrohúngaro)Desde el final de 1850 los gobernantes se vieron enfrentados con problemas -reclamos- internos que tenían su base en una clase media liberal y demócratas radicales, ademásde algunas manifestaciones obreras. Sin embargo ninguna poseía carácter revolucionario. Locaracterístico del período sin embargo no son las agitaciones sino el modo en que los gobiernoshicieron eco de algunas de los reclamos, concediendo demandas. Fue una época de reforma, deliberalización política, incluso de concesión a las “fuerzas de la democracia”. En GB, países bajos y otros se amplió la base de sufragio, permitiendo una válvula de escape que evitaría laradicalización de la sociedad. Incluso en el imperio de los Habsburgo se realizaron algunasreformas. En 1871 Bismarck fue nombrado canciller del imperio, quien defendería la monarquía prusiana frente a las fuerzas liberales y las nacionalistas. Imperio organizado en torno a un parlamento, cuyos miembros eran elegidos mediante voto universal del varón. Bismarck, en vezde ir al choque con los liberales –moderados- adoptó algunas de sus propuestas para beneficio propio. (Hobsbawn No dice más al respecto, pero viendo a Lliubert –o como se escriba- decíaque los sectores conservadores alemanes le quitaron la plataforma a los liberales llevandoadelante las reformas en el medio agrario: Abolición de la propiedad feudal, del sistema dearrendamiento y convirtiendo la propiedad de la tierra en propiedad privada capitalista). La interrogante en la que se encontraban los gobernantes de entonces era cómo manejar las fuerzas económicas, políticas y sociales sin perder ellos en el intento, es decir, sin ir encontra de tales impulsos pero manteniendo los ordenamientos políticos dentro de límitescontrolables. – Ahora que lo escribo creo queesta es la ideaque usa Hobsbawn en los trescapítulos, tal vez en todo el libro, ¿tal vez en toda la trilogía de las eras?- Napoleón III cayo en1870 porque no encontró el sistema que se lo permitiera. En cambio Bismarck y Cavour sí lolograron.Los dos fueron antirrevolucionarios, y no mostraron ninguna simpatía hacía las fuerzas políticas, si bien se hicieron cargo de los programas de estás y los pusieron en práctica en Italiay Alemania después de eliminar sus implicancias democráticas y revolucionarias. Ambostuvieron cuidado de separar la unidad nacional de la influencia popular. Los dos fueron losuficientemente flexibles como para integrar a la oposición, si bien hicieron imposible que éstatuviera accesos a ninguno tipo de control. Bismarck solo concebía la unidad de Alemania si estáno era democrática ni tampoco demasiado grande para ser dominada por Prusia. Esto último,tuvo como implicancia, la necesidad de excluir a Austria de la Alemania unificada. (La pequeñaAlemania). Cavour por su parte se encontró en la necesidad de movilizar a la aliada Francia para

18que le sacara de encima al Imperio Austrohúngaro. Logrado esto Cavour se encontró con unaItalia medio unificada desde arriba por la administración controlada y medio unificada desdeabajo por la guerra revolucionaria llevada adelante por Garibaldi. Aparte de sus aplausos odisentimiento con el movimiento de unificación alemana, lo liberales democráticos y losrevolucionarios sociales no contribuyeron en nada al proceso real de unificación. En cambio enItalia, la izquierda de Garibaldi, como vimos, había jugado un papel más importante al liberar elsur mediante la guerra

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