GRECIA CLASICA

La antiguedad clásica.

La "antiguedad clásica" designa un período histórico de las civilizaciones de la Roma y Grecia antigua, que abarcó aproximadamente desde la mitad del siglo VII a.C hasta las conquistas de Alejandro Magno finalizando el siglo IV a.C, y de Roma hasta el siglo dominado por Augusto.

La civilización de los griegos, así tambien como la de los romanos han sido una gran influencia en la lengua, ciencia, política, arte y ariquitectura de la actualidad. Toda cultura occidental desciende directamente de aquellas fascinantes obras de las civilizaciones del Mar Mediterráneo.

Creta

En el mediterráneo Oriental la mayor de las islas del Mar Egeo, Creta, logró alcanzar un nivel cultural muy importante, un verdadero Imperio marítimo y comercial.

La isla de Creta fue el centro de la civilización egea. Si bien el origen de los cretenses se desconoce, pertenece a la étnia mediterránea que coincide con la de Asia Menor.

Su historia tiene lugar en el año 3000 a.C, cuando sus habitantes fueron influenciados por los egipcios, desarrollando una fuerte cultura basada en el comercio.

Hacia el 2000 a.C se construyeron grandes palacios (Cnossos, Faistos) alrededor de los cuáles se establecieron las ciudades. Crearon una potente flota y se establecieron las relaciones comerciales con Oriente. También habían desarrollado una forma de escritura, contaban con dos sistemas, a las cuáles los historiadores las designaron línea A y línea B.

Años posteriores, no se conoce si por causas naturales o por invasiones extranjeras los palacios y ciudades fueron destruídos. En ese tiempo la cultura cretense se deterioró mucho, pero se logró reconstruir sobre las ruinas y Creta volvió a dominar el comercio y desarrolló una talasocracia, atravezando su período de mayor auge.

En esta etapa se destaca la leyenda del Rey Minos. Cuenta la historia que Minos había intentado darle hijos a varias mujeres pero de ellas solo nacían serpientes y alacranes. Tras sus intentos, lo logró con Pasifae con la cuál tuvo hijos normales.

El rey ofendió al dio de los mares, Poseidón, quien se vengó haciendo que Pasifae se enamoráse de un toro, y que de ésta pasión naciera el Minotauro, animal mitad hombre y mitad toro. El rey ordenó a Dedalo a que construyera un laberinto para alojar allí al salvaje animal, pero además encerró en el a el constructor y a su hijo Ícaro, con el fin de que no se divulguen características secretas del laberinto. Pero Dédalo implementó una ingeniosa técnica, construyó para si y para su hijo unas alas de pluma y cera con las cuáles lograron huir. Ícaro olvidó las advertencias de su padre y se acercó demasiado al sol, al derretirse la cera por el calor cayó al mar y murió. Su padre muy dolido se dirigió a Silicia y llevó allí sus conocimientos del curioso edificio.

Mientras, en el laberinto, el Minotauro satisfacía su hambre con los malhechores de la zona. Minos recibió la noticia de que su hijo había sido asesinado en Atenas, y en un momento de ira mandó a su ejército a aquella ciudad, la cuál no había sido avisada de éste ataque por lo que pronto pidió la paz. El rey recibió a los embajadores atenienses y negociaron juntos la paz, la condición impuesta por Minos era recibir cada 9 años 7 hombres y 7 mujeres como alimento del minotauro, pagando así con sus vidas la de su hijo. Una condición a favor de Atenas, fue que Minos juró que si alguno de ellos lograba matar al Minotauro serían librados de tal trágico acuerdo.

Luego de dos viajes a Creta, en los que se cobraron varias vidas de atenienses, se acercaba la fecha de enviar un siguiente navío. Teseo hijo del rey de Atenas, Egeo, pidió ser parte de los próximos 7 hombres con el propósito de acabar con la vda del Minotauro. Acordó con su padre que si lo lograba las velas del navío al regreso serían blancas, y si fallaba y moría negras.

Desembarcaron en Creta y fueron llevados a una prisión en las afueras de la ciudad. Teseo recibió el aviso de que la hija mayor del rey Minos, Ariadna, quería hablar con él. La princesa le ofreció su ayuda, le entregó un ovillo de hilo para que al entrar al laberinto lo ate y lo vaya deshaciendo a medida que avanzaba para guiarse, además le dió una espada mágica. Ariadna pidió a cambio escapar en el navío junto a ellos.

Al día siguiente el príncipe logró vencer al Minotauro y en forma de agradecimiento a Ariadna le cumplió su deseo y en el viaje de regreso se la incorporó junto con su hermana Freda, que nunca se separaba de ella. Tras una fuerte tormenta el navío encontró refugio en la isla de Naxos. Cuando se calmó la tempestad decidieron continuar viaje, pero Ariadna había desaparecido, y no lograron encontrarla. Emprendieron viaje sin la princesa, que se había quedado dormida y cuando despertó apenas se veía en el horizonte.

En Atenas, Egeo se acercaba día tras día a las orillas del mar, esperando que regrese el navío con una respuesta. Pero Teseo olvidó cambiarlas, y su padre al ver que eran negras se arrojo al mar que desde entonces tiene su nombre. El príncipe fue consagrado rey y contrajo matrimonio con Freda.

En 1400 a.C en Creta hubo una ivasión de indoeuropeos, eran los aqueos que ya habían dominado el Peloponeso, permanecieron allí hasta el 1200 a.C y acabaron con la civilización minoica.

Gobierno: El poder lo tenía el monarca o Minos, del cuál proviene la determinación de minoica a esa cultura. Éste permanecía en Cnossos y además de ser la autoridad superior era sacerdote. Su cargo duraba 9 años, y podía ser reelegido por los sacerdotes.

Economía: La economía se basaba prácticamente en la actividad mercantil. Los cretenses tenían flotas con las que establecieron relaciones comerciales, principalemte con Asia. Además habían desarrollado la agricultura y ganadería, que les proveía los alimentos esenciales.

Sociedad y costumbres: La población era de carácter pacífico, sentían afición por la música y por los deportes, como la caza, lucha, acrobacia taurina, juegos y competencias atléticas.

La mujer gozaba de libertad, podía participar en éstas actividades, aunque predominaba en el seno del hogar. Existía una gran variedad de especializaciones, carpinteros, pastores, agricultores, pintores, orfebres, alfareros, entre otros.

Cada una de las familias contaba con una parcela de tierra y trabajaban en ella.

Religión: Los cretenses eran politeístas. Su divinidad principal era la diosa madre, cuyo culto provenía de Asia, y sus dos hijos. Adoraban a los animales, y a la naturaleza. El esposo de la diosa era el Dios Minotauro. Las divinidades eran representadas en forma de animales, siendo la de serpiente y paloma para la diosa, y la de toro para el Minotauro.

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