La Escuela Lancasteriana

SIGLO XIX

EL SISTEMA LANCASTERIANO

Este proyecto de investigación tendrá como objetivo describir el estado de la educación después de que México logró su independencia, determinar cuáles fueron las características principales de la educación en el periodo de las Escuelas Lancasterianas, ejemplificar la forma en que se impartía la educación, su modelo pedagógico, y cómo influyó en la sociedad. Para esto, la hipótesis a plantear es: “Si los métodos pedagógicos utilizados en las escuelas lancasterianas se hubieran ido modificando conforme a las necesidades del país, serían pilar fundamental en las escuelas privadas de la actualidad”, con ello tendremos preguntas de estudio sobre ¿Cómo se manejaban las estrategias educativas en este sistema? ¿Era adecuado el sistema utilizado para la época? ¿Cuál fue factor importante para el decaimiento de las escuelas?, con el propósito de evaluar los vacios educativos que a lo largo de la historia de la educación se han ido dando, y como han afectado esos hechos a la actualidad.

La educación es una actividad social, cada persona la comienza a desarrollar desde el seno familiar, la adquiere en las actividades sociales en las que se relaciona, en la comunidad en que vive o en las instituciones educativas a las cuales asiste. La educación está relacionada con las características y problemas de cada grupo y época. Y está íntimamente ligada al desarrollo del país que habita. Existe una interacción entre la educación y el progreso.

La evolución mexicana a lo largo de los siglos ha sido de derrotas y logros. No podemos hablar nunca de una historia lineal en la concepción de un México histórico, ya que deben considerarse todos los fenómenos que sucedían en el entorno de cada contexto y momento histórico para comenzar a entender el verdadero sentido de nuestro presente tomando en cuenta que la educación en México ha sido un lazo mutuo en este entramado nacional.

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En el mes de febrero de 1822, cinco hombres de la ciudad de México se reunieron para fundar la primera asociación civil del México independiente que tuvo como propósito brindar instrucción elemental a la niñez más necesitada de la capital. Llamaron a su asociación “Compañía Lancasteriana de México” la cual contó, desde su fundación, con la aprobación y apoyo del gobierno. Sus creadores fueron: Manuel Condoniú, Agustín Buenrostro, coronel Eulogio Villaurrutia, Manuel Fernández Aguado, Eduardo Turreau e Ignacio Rivoll.

Esta compañía tuvo el apoyo del gobierno y del pueblo, por lo que en 1842, el gobierno nacional le entregó la dirección de la instrucción primaria de toda la República Mexicana y entre 1842 y 1845 encabezó la Dirección General de Instrucción Pública.

Ante la incapacidad del nuevo gobierno de ofrecer educación a las masas, es la iniciativa privada, a través de las escuelas Lancasterianas que logra difundir la educación de manera masiva, fueron importantes debido a:

• Es la primera institución que se preocupa por la enseñanza primaria y popular

• Dada la carencia de maestros de la época, el método de las escuelas lancasterianas pudo resolver esta escasez.

• Es un ejemplo de lo que la iniciativa privada pudo hacer con la educación.

• Se practicó la tolerancia a la enseñanza de la religión, por lo que estas instituciones promovieron e hicieron posible la idea de enseñanza libre.

El método de enseñanza que se aplicó en las múltiples escuelas que fundaron a lo largo de los casi setenta años de vida de esta corporación, fue el de enseñanza mutua, el cual tuvo como base los principios promovidos por Andrew Bell y Joseph Lancaster. Este método había sido ampliamente aceptado y divulgado en países como Francia, Inglaterra y España. Pero no fueron únicamente los elementos propuestos por Bell y Lancaster los que la Compañía Lancasteriana tomó en cuenta para instrumentar su proyecto de enseñanza mutua. La Cartilla Lancasteriana fue el documento que consolidó la propuesta pedagógica de la Compañía, tarea nada fácil.

La Cartilla Lancasteriana puede ser considerada como el primer documento que se editó en el México independiente, cuyo propósito fue el de guiar de manera detallada las actividades de enseñanza de los maestros de las escuelas de primeras letras. Por su contenido, no sólo es el precedente más remoto de una guía didáctica o programa de estudios de educación elemental, sino que rebasa en mucho estas acepciones, pues proporcionaba, además de los contenidos de los ramos de enseñanza, indicaciones precisas sobre cómo transmitir los diversos conocimientos; por ejemplo, para las niñas proporcionaba muestras sobre costura y bordado; además de indicaciones arquitectónicas para la construcción de un salón de clase, mobiliario y útiles escolares indispensables, sugerencias para organizar una escuela, complementadas con cuadros (horario de clases, registro de inscripción, lista de asistencia, etc.) y dibujos (del edificio escolar y mobiliario) para orientar a quienes quisieran establecer una escuela y simplificar la labor educativa del maestro.

Fue sólo a través del aprendizaje compartido que Lancaster encontró la manera de suprimir el sueldo de profesores, ya que los alumnos se instruían entre sí, dando origen a que este sistema fuera conocido como de enseñanza mutua. Se atendía a gran cantidad de estudiantes distribuidos en grupos de diez personas y al discípulo más adelantado en conocimientos, quien era el que presidía la instrucción, se le conocía como monitor o instructor.

"El método utilizado por la Escuela Lancasteriana, se basaba en la exposición verbal principalmente, en una exposición sistematizada y en ejercicios de repetición de tipo memorístico, se estudiaba en cajas llenas de arena, donde se hacía repetir al alumno letras o números hasta haberlos memorizado completamente, esto tendiendo a disciplinar la mente y formar hábitos."

El control de la disciplina era gracias a los rigurosos castigos y represalias; cuando se cometía una infracción, se hacían acreedores a castigos muy fuertes, se les colocaban grandes orejas hechas de papel en forma de burro y el alumno era colocado en la esquina del salón hasta por varias horas. Por este motivo los monitores contaban con gran cantidad de enemigos, ya que éstos eran libres de ser castigados. Había algo que llamaban el cuarto oscuro, el cual era utilizado cuando se cometían faltas mayores; consistía en un pequeño espacio con cuatro paredes, ni una sola ventana y una pequeña puerta que era el acceso. En este lugar se introducía al alumno para que reflexionara sobre su falta por un largo periodo de tiempo.

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