LA PANZA DEL TEPOZTECO. (ENSAYO)

UNIVERSIDAD MEXIQUENSE DEL BICENTENARIO[pic 1][pic 2]

UNIDAD DE ESTUDIOS SUPERIORES ALMOLOYA DE ALQUISIRAS

MATERIA: FUNDAMENTOS DE INVESTIGACIÓN.

DOCENTE: LIC. ELIZABETH VALLE MARTÍNEZ.

ALUMNO: CHRISTIAN MANUEL LAGUNAS PORCAYO

CARRERA: LICENCIATURA EN ADMINISTRACIÓN.

SEGUNDO SEMESTRE

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LA PANZA DEL TEPOZTECO.

(ENSAYO)

AGUA FRÍA, ALMOLOYA DE ALQUISIRAS, MEXICO A: 12 DE MARZO DE 2018.

INTRODUCCIÓN.

La panza del Tepozteco es un libro publicado en 1992 escrito por José Agustín en donde  nos narra la historia de siete amigos de secundaria de la Ciudad de México  que se disponen a viajar el fin de semana a Tepoztlán a la casa de campo de su amigo Alaín, en donde se desarrolla la trama de la historia cuando suben a la montaña del Tepozteco y ahí se introducen en una caverna en donde no solo encuentran una gran pirámide, sino también se encuentran con  varios dioses prehispánicos.

DESARROLLO.

La historia comienza en el sur de la Ciudad de México en una terminal de autobuses en donde se encuentra un grupo de amigos conformado por Alaín, Yanira, la pequeña Selene, Tor, Indra, Homero y Erika en donde se disponen a ir a la casa de Alain en Tepoztlán para pasar el puente del 16 de septiembre y para ello llegan a las 8 de la mañana a la terminal para comprar los boletos para abordar el autobús que los llevaría a su destino. Para su sorpresa la terminal se encontraba muy llena ya que todas las personas querían pasar el fin de semana con sus familias.

Al estar todos reunidos fueron a una ventanilla para preguntar la hora de salida de los camiones a Tepoztlán a lo que les respondieron que salía a las 12:30, siendo esto muy tardado decidieron buscar una alternativa y Yanira apareció casi gritando entre la gente para avisarles que en una parte de la terminal estaban saliendo microbuses que pasaban por Tepoztlán y que se salían cuando se llenaban y decidieron ir ahí en lugar de esperar 4 horas para poder salir de la ciudad.

Al llegar a la casa de Alain su madre Coral los recibió con un vaso de agua de papaya se dispuso a ordenar como es que dormirían, siendo así que los hombres dormirían en el cuarto de Alain y las mujeres en un cuarto de huéspedes. Al pasar un rato Alain no encontraba a sus amigos por ningún lado y se dirigió a su cuarto en donde ellos estaban embobados jugando videojuegos, Coral los llamó para comer y al terminar todos Alain decidió llevarlos al Tepozteco, una montaña cerca de su casa, pero primero pasaron a casa de Panchito a preguntarle si quería acompañarlos ya que él conocía la montaña mejor que nadie. Panchito aceptó y comenzaron a subir la montaña. Al estar demasiado lejos Panchito mencionó que recientemente había encontrado una caverna gigantesca y que debían verla pero como ya estaba oscureciendo propuso ir al siguiente día por la mañana. Enseguida bajaron casi corriendo dela montaña y todos terminaron muy cansados y al llegar a casa Coral fue a casa de Guillermina (mamá de Panchito) para que le hicieran una “limpia”, todos los amigos de Alaín tuvieron curiosidad por saber que era y acompañaron a Coral.

Al día siguiente todos salieron de la casa de Alain a las 8 de la mañana con linternas, sándwiches, chocolates y demás cosas para adentrarse a la caverna. Después de mucho escalar por fin llegaron a la caverna y entraron en ella; era gigante y muy profunda, al seguir caminando se encontraron con dos caminos y le preguntaron a Panchito cual camino elegir pero respondió que no recordaba muy bien hacia a donde era, al final opto por el camino de la izquierda, pasaron mucho tiempo caminando y todo parecía igual hasta al punto de que pensaron que se habían perdido y que solo estaban caminando en círculos, al llegar a un cuarto grande observaron un pequeño destello de luz y decidieron apagar las linternas para averiguar de dónde salía ese destello, al averiguar se preguntaron si acercarse a esa luz sería bueno a lo que una voz en la oscuridad dijo: “seria lo peor que pudieran hacer”, en ese momento todos se asustaron y de la oscuridad apareció un viejito que se encontraba borracho preguntando que quien les había dado permiso de entrar ahí a lo que respondieron que no sabían que debían pedir permiso para entrar, el viejito llamado Tezca les dijo que si se emborrachaban con él, podían estar ahí y ellos no aceptaron ya que si al regresar a casa los descubrían que olían a alcohol su madre los castigaría. Tezca desapareció entre la oscuridad y enseguida apareció un perro negro sin pelo que orinó a Tor y de igual forma desapareció.

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