Lo Que Necesito Saber Antes Y Durante Las Parcticas Laborañes

Las tareas de las educadoras no son nada sencillas implica tener características básicas para desarrollar el trabajo docente primero que nada la educadora debe poseer la característica de la observación debido a que es una técnica de enseñanza, de aprendizaje y de reflexión muy importante y benéfica dentro de nuestro ámbito laboral. La observación en nuestra carrera juega un papel muy importante ya que es en el jardín de niños donde se darán numerosas oportunidades para percibir información de todo tipo y poder analizarla desde diferentes perspectivas según nuestros intereses en los que está basada la observación.

La observación, como herramienta de preparación a la práctica docente, es fundamental, ya que se desarrolla como el medio principal, el más directo y el más seguro, a través del cual nosotras (futuras educadoras) tendremos la oportunidad de identificar el desarrollo físico y cognitivo de los niños con los que intervendremos, así como sus emociones, sentimientos, gustos, intereses, necesidades, estado de salud, entre otros aspectos.

Posteriormente como persona debemos poseer actitudes y valores positivos ya que para los niños somos como un modelo, conocer la diversidad que implica trabajar con grupos homogéneos y heterogéneos, conocer las características individuales y grupales de los pequeños, conocer el contexto de procedencia donde se desenvuelve el niño las partes medulares que forman ese contexto. Toda esta información recogida y analizada nos será de mucha utilidad a la hora de planear actividades didácticas, enfocando nuestros propósitos hacia algún aspecto especifico; además, una observación constante y adecuada nos ayudará también a autoevaluar nuestro desempeño docente y la pertinencia y eficacia de nuestras actividades (al comparar las capacidades y habilidades de los niños antes y después de varias sesiones), lo que nos permitirá identificar nuestras dificultades y logros.

La observación se puede realizar en dos formas la observación directa que es cuando la educadora tiene que poner más atención a los que realizan los niños por ejemplo con que materiales funciona mejor una actividad, a que niño se le dificulta realizar algo, que actitudes y conductas hacen cuando están realizando sus creaciones, o conviviendo con sus padre a la hora de entrada y salida, la otra observación es llamada indirecta ya que cuando se requiere alguna información esta es dada por terceras personas ya sean los padres de familia, educadores, y esto se realiza por medio de entrevistas que ellos mismos complementa.

Las tareas de las educadoras no son nada sencillas implica tener características básicas para desarrollar el trabajo docente primero que nada la educadora debe poseer la característica de la observación debido a que es una técnica de enseñanza, de aprendizaje y de reflexión muy importante y benéfica dentro de nuestro ámbito laboral. La observación en nuestra carrera juega un papel muy importante ya que es en el jardín de niños donde se darán numerosas oportunidades para percibir información de todo tipo y poder analizarla desde diferentes perspectivas según nuestros intereses en los que está basada la observación.

La observación, como herramienta de preparación a la práctica docente, es fundamental, ya que se desarrolla como el medio principal, el más directo y el más seguro, a través del cual nosotras (futuras educadoras) tendremos la oportunidad de identificar el desarrollo físico y cognitivo de los niños con los que intervendremos, así como sus emociones, sentimientos, gustos, intereses, necesidades, estado de salud, entre otros aspectos.

Posteriormente como persona debemos poseer actitudes y valores positivos ya que para los niños somos como un modelo, conocer la diversidad que implica trabajar con grupos homogéneos y heterogéneos, conocer las características individuales y grupales de los pequeños, conocer el contexto de procedencia donde se desenvuelve el niño las partes medulares que forman ese contexto. Toda esta información recogida y analizada nos será de mucha utilidad a la hora de planear actividades didácticas, enfocando nuestros propósitos hacia algún aspecto especifico; además, una observación constante y adecuada nos ayudará también a autoevaluar nuestro desempeño docente y la pertinencia y eficacia de nuestras actividades (al comparar las capacidades y habilidades de los niños antes y después de varias sesiones), lo que nos permitirá identificar nuestras dificultades y logros.

La observación se puede realizar en dos formas la observación directa que es cuando la educadora tiene que poner más atención a los que realizan los niños por ejemplo con que materiales funciona mejor una actividad, a que niño se le dificulta realizar algo, que actitudes y conductas hacen cuando están realizando sus creaciones, o conviviendo con sus padre a la hora de entrada y salida, la otra observación es llamada indirecta ya que cuando se requiere alguna información esta es dada por terceras personas ya sean los padres de familia, educadores, y esto se realiza por medio de entrevistas que ellos mismos complementa.

Las tareas de las educadoras no son nada sencillas implica tener características básicas para desarrollar el trabajo docente primero que nada la educadora debe poseer la característica de la observación debido a que es una técnica de enseñanza, de aprendizaje y de reflexión muy importante y benéfica dentro de nuestro ámbito laboral. La observación en nuestra carrera juega un papel muy importante ya que es en el jardín de niños donde se darán numerosas oportunidades para percibir información de todo tipo y poder analizarla desde diferentes perspectivas según nuestros intereses en los que está basada la observación.

La observación, como herramienta de preparación a la práctica docente, es fundamental, ya que se desarrolla como el medio principal, el más directo y el más seguro, a través del cual nosotras (futuras educadoras) tendremos la oportunidad de identificar el desarrollo físico y cognitivo de los niños con los que intervendremos, así como sus emociones, sentimientos, gustos, intereses, necesidades, estado de salud, entre otros aspectos.

Posteriormente como persona debemos poseer actitudes y valores positivos ya que para los niños somos como un modelo, conocer la diversidad que implica trabajar con grupos homogéneos y heterogéneos, conocer las características individuales y grupales de los pequeños, conocer el contexto de procedencia donde se desenvuelve el niño las partes medulares que forman ese contexto. Toda esta información recogida y analizada nos será de mucha utilidad a la hora de planear actividades

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