ORIENTACIONES TEORICAS

Orientaciones teóricas

El Currículo Nacional Bolivariano (CNB, 2007) forma parte del Nuevo Diseño Curricular del Sistema Educativo venezolano. Es un proyecto que está sustentado con datos históricos, pedagógicos, filosóficos, sociales, culturales, psicológicos, políticos, metodológicos, científicos y humanísticos que servirá de fundamento para la formación de niños, niñas, jóvenes, adultos, que forman parte de la educación en Venezuela. En el mismo se encuentran presente los valores de libertad, igualdad, fraternidad, justicia, paz, el bien común, cooperación y la unidad del continente americano, con los cuales se cimentó la independencia de Venezuela en el año 1811, fundándose así la Primera República.

Este Currículo Nacional Bolivariano está centrado en los pensamientos de personajes ilustres como: Simón Bolívar, Francisco de Miranda, Ezequiel Zamora, Simón Rodríguez, Luís Beltrán Prieto Figueroa, Belén Sanjuán, Paulo Freire y José Martí, entre otros. Los cuales forman parte de las Orientaciones Teóricas

Con respecto a las Orientaciones Filosóficas, son los cambios políticos, económicos y sociales que ha experimentado nuestro país en los últimos años están encaminados a la construcción de una nueva sociedad, en un marco de derecho y de justicia social que universaliza los derechos fundamentales en la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela (CRBV). Donde de la participación protagónica del pueblo, quien con una visión de transformación social, orientada por los ideales de libertad, justicia, originalidad y emancipación de Simón Rodríguez, Simón Bolívar, Francisco de Miranda y Ezequiel Zamora, ha generado cambios sustantivos en todo el sistema político, social, económico y cultural.

En este contexto, dicha sociedad demanda el renacer del proceso educativo, orientado por un modo de vida que centra su fuerza y su empuje hacia el desarrollo del equilibrio social, a través de una nueva moral colectiva, la producción social, la igualdad territorial, y la configuración de un mundo multipolar; para el restablecimiento de la sociedad sobre nuestras propias raíces libertarias, desde una concepción neo-humanística, ambientalista e integracionista, llena de una energía popular y espiritual.

En esta transformación, igualmente se considera la formación de un nuevo republicano y una nueva republicana aptos para vivir y convivir con una forma de ver del mundo, alcanzando un desarrollo integral del ser humano; así como de la situación económica, social y cultural, conducida por la ética social e impregnada de valores de libertad, justicia, igualdad, equidad e integración. Además, este proceso se basa en una férrea identidad venezolana y una conciencia ciudadana de soberanía, que reconoce sus derechos y responsabilidades; en el carácter participativo, protagónico y corresponsable que se expresa en el ámbito social y en la gestión pública; y en el respeto y valoración a la diversidad étnica y cultural.

Por  lo tanto estas propuestas pertenecen a los postulados filosóficos de Simón Rodríguez “la ruptura con lo colonial, el pensamiento de lo original y la invención y la construcción política-histórica de los ciudadanos libres de la América”; postulados que fueron propuestos para la creación de sistemas educativos, no sólo de Venezuela, sino de toda la América.

En referencia con la ruptura con lo colonial, es conveniente mencionar que a partir del legado de Rodríguez se emprende la búsqueda y la creación de paradigmas y encaminar el desarrollo propio, la innovación de un vehículo para la verdadera libertad del pensamiento, cuyo beneficio sea una revolucionaria concepción de lo que debe ser el modelo educativo de las naciones americanas. El mismo Bolívar decía que su maestro enseñaba divirtiendo, con lo cual rompía con las rígidas costumbres educativas del colonialismo europeo; de allí que, en el siglo XXI, el SEB está creado para romper las presentes estructuras del aprendizaje que permanecen en la bases teórica de modelos exógenos.

Por consiguiente, se desea en lo educativo la creación de nuevos métodos de aprendizaje, que rompan con el modelo repetitivo y transmisor, derivados del discurso clásico colonial. Desarrollar una transformación de pensamiento que termine de una vez con la concepción colonial propia de la educación venezolana, que se manifiesta en las prácticas pedagógicas vigentes.

Desde la perspectiva filosófica se intenta la refundación de la República a partir de unos valores universales allí declarados, pero no se muestra ninguna reseña bibliográfica de naturaleza filosófica o sociológica en las citadas orientaciones teóricas que dé luces sobre el tipo de república que se intenta fundar. “La nueva república”, “la participación protagónica y responsable”, “la formación con ideas revolucionarias”, “conocedor de la nueva geometría territorial” son sólo enunciados que se hacen en el documento, lo cual lleva a pensar que su intención es adoctrinar para un modelo de país que aún no conocemos, más que formar en un modelo educativo abierto, flexible y democrático.

En otro orden de ideas, las Orientaciones educativas se construye primordialmente sobre la base del ideario educativo de Simón Rodríguez, Simón Bolívar,  Belén Sanjuán Paulo Freire, José Martí y Luis Beltrán Prieto Figueroa; idearios que fomentan el diseño curricular a través de sus conceptualizaciones sobre el propósito de la educación, la escuela, él y la estudiante, el maestro y la maestra, el aprendizaje, las experiencias de aprendizaje y la evaluación.

Esta orientación  asume  la educación como un proceso social que se funda en colectivo y surge de las raíces de cada pueblo; como un acto político y expresión de los procesos sociales, culturales y educativos, cuya propósito es promover el pensamiento liberador, creador y transformador; así como la razonamiento crítico, la participación ciudadana y los sentimientos de honor, probidad, amor a la Patria, a las leyes y al trabajo. Además, involucra el desarrollo de las virtudes y principios sociales, y el progreso de una ciudadanía responsable de sus derechos y deberes públicos; todo ello para lograr el desarrollo endógeno de los pueblos.

Las ideas expuestas por estos maestros antes mencionados, explican una concepción de la educación según la cual los y las estudiantes son protagonistas de múltiples interacciones sociales, integrantes activos en los procesos de evaluación y organización de las experiencias de aprendizaje, caracterizándose por ser curiosos y curiosas, creadores y creadoras, cooperativos y cooperativas, transformadores y transformadoras, analíticos de saberes, humanistas, experimentadores y experimentadoras, y por estar en permanente búsqueda de soluciones originales de los problemas de su entorno local, regional y nacional.

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