Observación del psicoanálisis de Sigmund Freud

OBSERVACIÓN DEL PSICOANÁLISIS DE SIGMUND FREUD

Lo que exponemos en nuestro presente es el reflejo de las acciones en el pasado y en la mayoría de casos influye el cómo nos educan y las acciones que realizan nuestro padres para lograr eso, pero lo que no saben es que cada acto nos interviene para nuestro crecimiento y desarrollo personal. Para hallar respuestas a los tantos comportamientos que no logramos entender podemos recurrir al psiquiatra Sigmund Freud con su psicoanálisis del inconsciente basado en representaciones reprimidas. ¿Acaso logramos entender nuestros propios comportamientos?

Cuando nacemos nuestros padres son los primeros formadores y educadores, ellos se encargan de crear una conciencia o como lo es esa primera etapa del “consciente”, donde ellos nos dicen y nos empiezan a enseñar lo que es bueno y lo que es malo; allí es donde comienzan a crear un ideal del yo.( https://la-filosofia.com/la-filosofia-de-freud/)

En el pre-consciente que es otra de las tres etapas que nos presenta Freud (el consciente, el inconsciente y el pre-consciente), este no forma parte ni del consciente ni del inconsciente; esto también nos quiere dar a entender o se explica como que el método consciente accede a lo que archiva el pre-consciente, Lo que guarda el inconsciente puede también llegar al pre-consciente cuando resuelven el reparo que aparta a los dos anteriores métodos.

Y seguidamente encontramos el inconsciente el cual no todos saben que poseen, pero se explica como el ello y se encuentra en el libido placer (el deseo sexual, lo que nos incita a salvaguardar las relaciones sexuales); y por otra parte Freud no lo explica con dos simples palabras provenientes de los dioses de la mitología griega, “eros y thanatos”, significándolas como los instintos de “vida y muerte”. Y si por consiguiente queremos profundizar en estas grandes interpretaciones y explicaciones podemos orientarnos por este libro llamado: “introducción al psicoanálisis (1917)” Freud.

Del mismo modo encontramos una elucidación que le da Sigmund Freud a los sueños y no dejando a un lado su planteamiento con el inconsciente, nos presenta los tres tipos de interpretación que él le da; la primera: un deseo aceptado en la conciencia, la segunda: un deseo poco cubierto, se deriva de lo que nos provoca temor; y la tercera: un deseo reprimido, lo cual se deriva de algo que apetecemos pero no queremos aceptar.

Muchas veces y en diversos casos deseamos algo o a alguien y soñamos frecuentemente con ese algo o con esa persona, que en el muy fondo deseamos y al verlo nos produce algo pero al “tomar conciencia” no aceptamos que lo queremos con nosotros o que lo deseamos y de ahí la tercera explicación de los sueños según Freud,  nombradas anteriormente; esta emanada del deseo reprimido. De otro forma observamos el deseo poco cubierto el cual nos lleva a ese miedo que se va apoderando de nosotros cuando causamos daño o realizamos acciones indebidas las cuales no queremos que sean descubiertas pero el temor nos gana cuando en el sueño vemos reflejado que esto está poco oculto.

Y la primera explicación que nos da es acerca del deseo aceptado en la consciencia que es ese algo o alguien que deseamos pero a diferencia de la tercera si logramos aceptar dentro de nuestra propia conciencia y a la vez disfrutamos de ese sueño.

Y para enfocarnos más a este tema con los sueños y el psicoanálisis que le da nuestro pensador Sigmund Freud nos podemos encaminar hacia un libro escrito por nuestro mismo autor referido, llamado “la interpretación de los sueños (1899)”.

Por otra ración topamos ciertas etapas psicosexuales con la inédita explicación que le da Sigmund Freud; encontramos 6 etapas, las cuales son: etapa 0, 18 meses, 3 años, 6-8 años, pubertad y adultez; y se definen así: 0: es el momento en que nacemos, 18 meses: es la etapa oral y es un sentido involuntario de conocer el mundo con la boca cuando esta etapa es reprimida por los padres, el niño tiende por instinto a mantener todo en la boca cuando grande, como los esferos y demás y debido a esa repromisión de la etapa es que al momento de mantener una relación sexual la persona quiere quemar su fase inconscientemente realizando acto oral a su pareja o a la persona con quien esté llevando a cabo el acto sexual. 3 años: es la etapa anal, el control de las heces fecales, este es el momento en que los padres les enseñan a sus hijos que deben utilizar el pañal o simplemente deben aprender a utilizar el retrete cuando sientan la necesidad para tener ese placer de defecar. 6-8 años: es la etapa fálica, donde influye el complejo de Edipo y de Electra, este complejo es el que lleva y comienza con que la niña empieza a ver con otros ojos a su papá y del mismo modo el niño con la mamá, es de la primera persona que se enamoran y por la que sienten esa atracción por la persona de su sexo opuesto y hasta llegan a ver a la persona de su mismo sexo como su principal rival, cuando esta etapa es reprimida por culpa de padres separados, es cuando vemos hombres que tienen que vivir con sus madres a altas edades porque no les dieron esa libertad, y vemos también por consecuente el homosexualismo. Pubertad: es la etapa de latencia, donde prevalece la turbulencia sexual, es esa fase donde los preadolescentes empiezan a explorar y a descubrir ese deseo sexual que los está empezando a atraer, cuando la etapa que deben quemar con la masturbación es reprimida, nos vemos más adelante enfrentados a violadores y psicópatas sexuales. Adultez: es la etapa genital, deseo por el sexo opuesto, esta fase empieza en la pubertad y subsiste por el resto de la vida.

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