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LA TELEVISIÓN: LA NIÑERA DE LOS NIÑOS. LA INTERNET: LA AUTORA DE LA CONCIENCIA DE LOS JÓVENES


Enviado por   •  3 de Junio de 2014  •  2.103 Palabras (9 Páginas)  •  264 Visitas

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LA TELEVISIÓN: LA NIÑERA DE LOS NIÑOS. LA INTERNET: LA AUTORA DE LA CONCIENCIA DE LOS JÓVENES

RESUMEN: La sociedad moderna tiene un problema con los jóvenes y sus padres no sa-ben qué hacer; esta situación se debe a que los padres han cometido algunos errores que tienen influencia en la educación de sus hijos y en su relación, haciendo un abismo gene-racional. La televisión y la internet han desempeñado un papel fundamental en el desarro-llo de este abismo ya que estos medios de comunicación han venido a interrumpir la ar-monía familiar aderezado por la falta de interés de los padres quienes por el hecho de tra-bajar delegan inconcientemente la formación de sus hijos a estos medios.

PALABRAS CLAVES: conducta, educación, generación, medios de comunicación

ABSTRACT: The modern society has got a trouble with the young people and their parents don’t know what to do; this situation is due to parents had made some mistakes that has got influence in the education of their children and in their relationship, making a generational abysm. Television and Internet have performed a fundamental rol in the development of this abysm because this Media have become to interrupt the family armony dressed for no-interested parents due to both are working and they unconsciously delegate their children’s formation to this Media.

KEY WORDS: Behaviour, education, generation, Media

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1 INTRODUCCIÓN

Siempre se ha dicho que el hombre es un ser social por naturaleza, no obstante no se conocía el impacto que tendría la tecnología en su conducta, la cual ha sido modelada por los medios masivos de comunicación. La conducta de los jóvenes ya no es la misma de cuando sus padres crecieron, algunos argumentarán que las generaciones son distin-tas entre sí y que las circunstancias de la crianza de cada generación tienen mucho que ver, en esta sociedad moderna existe una distancia social cada vez más remarcada, so-bre todo en aquellas sociedades urbanas, ya que en las rurales aún pueden observarse ciertos patrones con los cuales muchos adultos pueden identificarse. Por otro lado, mu-chos padres dicen no entender a sus hijos y es que el abismo generacional es cada vez más amplio. Dentro de este laberinto de ideas y cambios en la conducta propia del adoles-cente, la madre resignada y vencida de luchar contra su propio hijo lanza un conjuro al viento, algo que a su vez también escuchó tantas veces de sus padres: ya lo pagarás con tus hijos. Estos “cambios son asimilados e interpretados por la continuidad de la cultura” (Lomnitz, 2001).

2 DESARROLLO

Los padres han tenido que salir a trabajar para poder pagar las exigencias moder-nas, por superación personal y/o por necesidad ambos padres tienen que ausentarse del hogar dejando a los hijos en manos de un tercero y esto incluye a la televisión, quien se ha encargado de entretener a los niños y muchas veces sin contenido educativo. Esta generación de padres acuñó una frase que no está dando resultados: ¡Yo no quiero que mis hijos pasen los trabajos y carencias que yo pasé, yo quiero que mi hijo tenga lo que yo nunca tuve! Ello conlleva a darle al adolescente todo lo que pida y éste lo consigue con tan sólo extender la mano y no le ha costado nada de trabajo obtener lo que quiere.

Años atrás cuando el padre era el único proveedor en el hogar y la madre tenía que encargarse de la educación y de proveer a sus hijos de valores, el padre reclamaba a la madre sobre la educación de los hijos y recurría a la frase: yo para eso trabajo, por eso traigo el sustento a la casa y tú eres responsable de la conducta de los hijos. El padre no se metía en lo concerniente a la educación excepto para castigar cuando la madre acusa-ba a sus hijos porque ya no “podía” con ellos. En tiempos modernos, cuando ambos pa-dres trabajan fuera de casa, esa estafeta de inculcar valores y moldear la conducta de los jóvenes, ambos padres se lo reclaman al maestro o a la escuela, sin saber que en la es-cuela se refuerzan los valores, no se inculcan, pero ¿con qué valores puede criarse un niño si su niñera ha sido la televisión? la violencia, la sexualidad, los estereotipos de raza y de género y el abuso de drogas y alcohol son temas comunes en televisión (Prensa, 2011) y muchas veces los niños ven toda esa programación sin la supervisión de los mis-mos padres quienes no se preocupan en ver si es adecuada para su edad.

Habría que preguntarles a los padres modernos cuantas canciones de cuna o cuentos infantiles se saben o si por estar tan ocupados han encargado a la televisión esa actividad, la cual está llena de programación no apta para niños, y si existen algunos programas que sí tienen contenido educativo es en solo una hora de todo el día, cuando el niño pasa varias horas frente a ella. La mayoría de los padres no se toman el tiempo para investigar qué calidad de programas están viendo sus hijos. El periódico nicaragüense la prensa ha publicado que “…es necesario controlar lo que sus hijos ven en la televisión, ya que muchas veces, por no decir la mayoría, pueden provocar efectos negativos en el menor.” (Prensa, 2011) y que los niños, a esa edad no saben diferenciar entre la realidad y la fantasía, están bajo la influencia de anuncios que te aconsejan adelgazar, de bebidas alcohólicas, comidas chatarras, etcétera.

Por otro lado, los jóvenes se levantan generalmente irritados por la mañana porque se acuestan muy tarde, viendo televisión por cable, jugando playstation, hablando o en-viando mensajes por teléfono o chateando por la Internet “Los usuarios de Internet son cada vez más y el tiempo que dispensan frente a la computadora los aparta, muchas ve-ces, del entorno familiar.” (Vallejos, 2009). Además de descuidar de esta manera sus es-tudios, esto es propio de la juventud que ya San Agustín había mencionado en sus Confesiones en el capítulo décimo de su obra cómo por amor al juego no se aplicaba al estudio “… me inclinaba y hacía desear ardientísimamente hallarme en aquellos espectáculos y juegos que los hombres ya grandes solían asistir…” (San Agustín) ya que muchos de los jóvenes usan su tiempo tratando de imitar a los adultos en sus actividades.

La Internet, lejos de ser una ayuda para el estudio, resulta ser un entretenimiento para la juventud, claro que eso es parte de lo que la internet ofrece; sin

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