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Socializacion Y Afectividad Del Niño Ii


Enviado por   •  23 de Julio de 2011  •  1.970 Palabras (8 Páginas)  •  1.183 Visitas

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CARACTERÍSTICAS DE LOS NIÑOS Y NIÑAS PROSOCIALES

Determinados niños son más propensos que otros a compartir sus juguetes y a ayudar a otras personas en sus tareas cuando no existen premios evidentes por hacerlo. ¿Los niños prosociales y los menos prosociales se diferencian en alguna otra característica personal además de en sus tendencias prosociales? Las diferencias entre los niños prosociales y los que lo son menos no son absolutas. Los primeros se pueden diferenciar de los segundos en general en alguna característica, pero esto no significa que todos los niños prosociales se distingan de los no prosociales en las características concretas en cuestión.

Los niños mayores tienden a ser más prosociales al menos en cierto sentido que los menores; por consiguiente, es posible que los niños prosociales tiendan a ser mayores que los menos prosociales. Los padres, profesores, alumnos y profesionales interesados en la infancia suelen mantener unos estereotipos acerca los niños serviciales y.de los egoístas y poco serviciales. Además, generalmente la gente imagina a los niños prosociales como comprensivos, relativamente capaces de adoptar las perspectivas de los demás y dotados de un repertorio de habilidades socialmente adecuadas para .la resolución de problemas que pueden utilizar en situaciones de conflicto social.

Naturalmente, el simple hecho de que los niños prosociales sean más comprensivos que los menos prosociales no demuestra por sí mismo que la simpatía sea una causa de la conducta prosociales.

 En primer lugar si hay alguna causa para creer que determinadas características personales ofrecen más probabilidades de que niños adopten un comportamiento prosociales, se puede utilizar esta información cuando se intenta comprender por qué algunos factores culturales y algunas técnicas educativas parecen incrementar las tendencias prosociales infantiles.

 En segundo lugar si es bastante evidente que ciertos tipos de niños son más complacientes y generosos que otros, podemos desarrollar programas de intervención en la familia, en la escuela y en otros lugares, que aprovechen esta información.

Se han analizado algunos aspectos de la personalidad y de las circunstancias de los niños en relación con la conducta prosociales.

 El primero consiste en variables demográfico el sexo, el que ocupa en la familia (si es el primero o el último hermano), y la situación socio- económico familiar.

 Un aspecto se refiere al estilo del niño (por la sociabilidad) y a la capaz de desenvolverse en circunstancias sociales.

 Un tercero, a la receptividad emocional del niño con otro esto es, su receptividad compasiva y empática.

 Un cuarto tipo de característica examinada son las capacidades personales indicadores del desarrollo cognitivo, tales corno el cociente intelectual y la capacidad de adoptar la de otro.

Por tanto hay que planteársela siguiente pregunta: ¿están, algunos niños más predispuestos que otros a mostrarse complacientes serviciales y prontos a compartir en una serie de circunstancias?

LA REGULARIDAD

Parece que la respuesta es afirmativa. Aunque cualquier niño puede compartir en una situación y no en otra, en una situación y no compartir en otra, general existe cierta regularidad individual en la respuesta prosocial infantil. Por otro lado, los niños de educación infantil y los de edad preescolar demuestran una regularidad moderna en las conductas prosociales. En infantil, la actitud solícita, la simpatía, la consideración y la adopción de las perspectivas de los compañeros se interrelacionaban de tal modo que indicaban la existencia de unas diferencias en la predisposición hacia la responsabilidad social y hacia la conducta prosocial subyacente.

Además, los niños que en la guardería eran sociales responsables y prosociales solían destacar aun en estas características en la escuela primaria. Algunos estudios sobre niños de los últimos cursos de primaria y sobre adolescentes también han demostrado la existencia de una regularidad en la respuesta prosocial. Además las diferencias individuales en el gran grado de conducta prosocial eran constantes durante varias semanas.

Los niños solían mostrar unas diferencias individuales en el estilo de a una edad temprana, pero ocurría también que estas individuales eran relativamente estables a lo largo del tiempo. Sin duda, no puede esperarse que ni siquiera una persona muy altruista ayude en todas las situaciones, ni que siempre lo haga de la misma manera. Las consideraciones prácticas tales como los recursos y la capacidad de las personas, Determinadas conductas prosociales se deben a que un niño siente pena por otro; otros, a que es incapaz de desatender una petición de ayuda. No es probable que las acciones prosociales que se realizan por razones diferente estén muy correlacionadas en las diferentes circunstancias.

DIFERENCIAS ENTRE SEXOS

A pesar del estereotipo de que las niñas comparten, ayudan y consuelan más que los niños, la mayoría de los estudios realizados sobre las diferencias entre sexos en las conductas prosociales infantiles no han encontrado variación alguna entre chicos y chicas.

De hecho, los hombres, pueden ser más serviciales que: las mujeres cuando se trata comportamientos de ayuda o de socorro instrumentales por ejemplo, ayudar a cambiar una rueda o cuando lo ayuda implique un riesgo por ejemplo, recoger a un autoestopista. Por el contrario, las niñas y las mujeres pueden ser más propensas a ayudar cuando se requiere asistencias psicológicas por ejemplo consolar y cuando quien recibe la ayuda es alguien conocido un amigo o un niño.

De hecho hay algunas pruebas de que quizá, las niñas estén más preparadas para la conducta prosocial que los niños. Sin embargo, con la edad, los niños pueden recibir mayor estima que las niñas por adoptar conductas serviciales que conlleven riesgo, labores manuales o ayudar a las mujeres es decir caballerosidad.

CARACTERÍSTICAS DEMOGRÁFICAS

La clase social

No parece que la clase social esté relacionada directamente con la conducta prosocial de los niños. Sin embargo, los hijos de familias de industriales de clase media, quizá sean un poco menos prosociales que otros niños de clase media y más propensa que otros consideran la reciprocidad ayudar a alguien que ya les ha ayudado o que puede hacerlo en el futuro

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