Ambiente De Un Aula
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PLANIFICACIÓN DE AMBIENTE DE AULA
VALENCIA, 18 DE DICIEMBRE DE 2009
Según Schwartz y Pollishuke (1998), El ambiente en el aula tiene un profundo efecto en el desarrollo social, afectivo, físico e intelectual de los alumnos a los que enseñamos. Para que adquieran una actitud positiva hacia el colegio y el aprendizaje, necesitan estimulación visual, organización, espacio y una sensación de acogida y seguridad. En consecuencia, merece la pena dedicar tiempo y energía a la planificación y configuración física del aula.
Una de las primeras cosas que un maestro debe preparar en su aula es una gran zona de reunión en grupo, elemento esencial de una clase. La proximidad al maestro y a los compañeros estimula el diálogo, la interacción en grupo y el flujo de ideas.
También vendría bien fijar áreas de trabajo específicas dentro del aula para estimular a los alumnos para que compartan, cooperen y trabajen juntos. Asimismo, designar unas zonas específicas para los materiales y aparatos audiovisuales puede contribuir a aprovechar mejor el espacio. La colocación de armarios y estanterías alrededor de toda la clase y al lado de las zonas de trabajo, facilita el acceso de los alumnos a los recursos y materiales y favorece su independencia.
El establecimiento de diversos lugares de exposición realza el espacio físico de la clase y además, el hecho de que los alumnos vean expuesto su trabajo eleva su autoestima y su sentido de propiedad e incrementa la motivación para el rendimiento.
Creación del ambiente material
En los procesos de enseñanza y aprendizaje, el entorno físico dispuesto por el enseñante posee dos funciones. Proporciona el lugar para el aprendizaje y al mismo tiempo, actúa como participante en la enseñanza y el aprendizaje. Según Loughlin, y Suina (2002), este entorno físico del aprendizaje tiene dos elementos principales: la instalación arquitectónica y el ambiente dispuesto. Ambos interactúan para fortalecer o limitar la contribución del entorno al aprendizaje de los estudiantes. Cada uno es esencial e influye en la conducta y el aprendizaje, pero la instalación arquitectónica y el ambiente dispuesto poseen diferentes funciones y características.
La instalación arquitectónica proporciona el lugar en donde tienen su desarrollo todas las interacciones entre las personas y los materiales dentro del proceso de aprendizaje. Establece el espacio básico del entorno y organiza el acceso a los espacios externos y a los recursos. La instalación arquitectónica determina las condiciones básicas de luz, sonido, temperatura y la intrusión o separación entre grupos de personas. Proporciona calidades como el color, la textura, el nivel y la suavidad o dureza de los espacios que cabe disponer para el aprendizaje.
Las instalaciones de la escuela actual suelen ofrecer una flexibilidad en las divisiones del espacio y en el acceso para el aprendizaje a las áreas interiores y exteriores. Algunas brindan una considerable variedad de formas, texturas, niveles y volúmenes de los espacios concebidos para el aprendizaje. Los arquitectos de las construcciones escolares contemporáneas consultan atentamente a los educadores, a la comunidad y a los alumnos para complementar su información acerca de un diseño eficaz. Siempre que resulte posible, los diseñadores de las construcciones y los realizadores de curricula trabajan conjuntamente en el desarrollo de planes para el programa y el curriculum de la escuela y de su arquitectura. Buena parte de las instalaciones arquitectónicas actuales se hallan concebidas para atender a propósitos y necesidades generales de la escuela, aunque existen algunas disposiciones especiales para unidades más pequeñas. Los diseños escolares basados en los estilos de los programas actuales y de los proyectados ofrecen ambientes que armonizan con tales programas. En semejantes construcciones el desarrollo del entorno dispuesto por el profesor se halla bien respaldado por el ambiente, a condición de que sus planes y métodos se acomoden estrechamente a los programas que fueron estudiados. Pero incluso cuando se logra la más estrecha acomodación posible entre la construcción y el estilo del programa, la disposición arquitectónica sólo puede atender a algunas de las funciones del entorno físico para el aprendizaje; no constituye en sí misma el entorno de aprendizaje, debido al carácter genérico de las instalaciones, que dentro del marco temporal del año escolar, suelen ser estáticas y que se hallan concebidas en términos de una previsión generalizada de conductas, actividades, niveles de funcionamiento de los estudiantes, propósitos docentes y estilos de enseñanza asociados con el curriculum concebido. Cuando el entorno comienza a ser utilizado, diversos profesores con sus grupos específicos de alumnos, ocupan espacios dentro de la instalación. Cada profesor cuenta con una agenda con su propia serie de expectativas de conducta, experiencias de aprendizaje, operaciones cotidianas, destrezas que es preciso practicar y conocimiento que ha de ser adquirido. Para cada uno el esquema resulta específico y en relación con el grupo singular de alumnos implicado. El desarrollo del entorno, dispuesto de modo que se acomode a los alumnos en cuestión y al programa específico resultará más fácil en un ambiente que armonice con la agenda del profesor que en otro en que choque con ésta. Pero incluso en las mejores instalaciones, los profesores deben desarrollar aún más el entorno generalizado en beneficio de propósitos y grupos específicos.
Para la creación del ambiente material se pueden seguir las siguientes pautas:
• Delimite una zona de reunión en gran grupo
• Establezca un área de trabajo dependiendo de las actividades a realizar
• Asigne una zona de trabajo próxima a los enchufes que facilite el uso de aparatos audiovisuales (magnetófono, tocadiscos, ordenadores, retroproyectores, video beams, etc)
• Coloque el mobiliario de manera que permita el trabajo en pequeños grupos
• La disposición del mobiliario debe permitir a los alumnos estar frente a frente para favorecer la interacción didáctica.
• Las mesas dispuestas en forma de U o formando cuadrados o rectángulos favorecen la interacción entre los alumnos y el clima adecuado
• Instale estanterías, armarios o ambas cosas para almacenar y exhibir los materiales y recursos. Pueden ponerse al lado de las áreas de
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