Antonio Carrillo/ Escrito X Rocio Rodriguez

Antonio Carrillo era mi maestro de biología, pero también dedicaba su tiempo al estudio de plantas de diversas regiones mexicanas era titular de mi grupo el tercero de secundaria en el 3º C, era de estatura mediana, delgado, de complexión realmente fibrosa y de carácter nervioso pero que con una mirada de seriedad paraba el intento de alguna burla o murmullo.

Era la primera clase por la mañana y maestro Antonio Carrillo empezó hablar sobre el tema de reproducción sexual al escuchar sobre el tema los alumnos reian pues era 1995 y no era muy usual que en el nivel básico se hablara sobre ese tema. El maestro Carrillo explico el tema con el ejemplo de la reproducción sexual en los invertebrados y en específico tomo como ejemplo a las gallinas.

El maestro Carrillo explicaba con palabras apropiadas para el nivel que daba clases apoyándose de los dibujos que hacia pues se le facilita hacerlo, de este modo hizo la clase audiovisual concibiendo el tema preciso, claro y profundo y con solo sesenta minutos que son reglamentarios por clase creando un panorama realista sobre el sistema reproductivo de los vertebrados.

Mediante el genio artístico y su interés por la morfología del maestro Antonio Carrillo yo tuve un interés por la flora mexicana y en específico el fascinante mundo de las orquídeas.

Veía dibujarlo entre una y otra clase o antes de empezar la sesión matutina o vespertina, dibujaba bellísimas laminas a color sobre diversas orquídeas que tenia sobre recipientes pequeños con formol donde las preservaba o que mantenía vivos ejemplares que estaba e floración; pero no solo era verlo realizar algunos trazos y el combinar los colores sino el escuchar las historias venturosas que pasaba para colectar una orquídea que se encontraba sobre un risco de las barrancas del estado de Morelos.

Antonio Carrillo nos enseñaba biología apoyando en el gusto y el conocimiento de sus saberes. Haciendo de muchos de nosotros y sin que el lo planeare sembrarnos semillas que al paso del tiempo brotarían en carreras profesionales bien declaro. Después de treinta años no hay duda que él fue mi mejor guía y que dejo en mi una aptitud que ningún otro maestro pudo cambiar.

Conclusión.

Esta lectura me dejo un claro ejemplo que hay maestros que dejan marcada la vida de muchos de manera que esto nos pueden llevar a la toma de decisión respecto alguna carrera profesional y en esta lectura nos hablo de como dejo marcado a sus alumnos el maestro Antonio Carrillo al verlo como se apasionaba por su trabajo ya que transmitía esas emociones de dedicación y alegría por las cosas que hacía. Es por ello que nosotros como futuros maestros debemos transmitir esas emociones, de manera que los alumnos sientan que estamos dando clases por gusto y con buen humor mas no por obligación y en ocasiones hay que hacernos la pregunta de cómo nos gustaría a nosotros que nos dieran una clase,

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