CALIDAD EDUCATIVA

DESARROLLO DE PROGRAMAS PARA EL MANEJO DE LA CONDUCTA

¿Qué es la conducta?

Reacción general a todo estimulo, determinada por el contexto social y por las experiencias previas. La personalidad y el entorno definen la conducta.

Dentro de las habilidades sociales existe una estrecha vinculación entre el contexto escolar y el bienestar del individuo proyectando incluso su etapa adulta, es decir cuando las personas aprenden a relacionarse y comportarse desde pequeños, muy probablemente también lo harán de grandes.

Las competencias sociales de los individuos desde pequeños se modifican cuando interactúan en su contexto escolar ya que no siempre logra asumir su rol que le permita desarrollar relaciones sociales positivas es decir que afronte efectivamente las demandas de su entorno, por esto se pide que exista un acompañamiento ya que los alumnos asisten en ocasiones a la escuela mostrando nerviosismo, enojo, depresión, etc., dando pie a que no se logren los aprendizajes es decir no asimilen la información, desembocando así en una desmotivación provocando una deserción escolar.

Se recomienda que como estrategia para el docente y evitar esta deserción escolar se realice de forma paralela con su práctica educativa el desarrollo de dichas competencias sociales, para así lograr que el alumno tenga una disminución de cargas emotivas que son inhibidores del aprendizaje.

Realizando este trabajo se lograra un equilibrio entre lo académico y las conductas sociales derivando en estudiantes competentes que: afronten retos cognitivos, apliquen habilidades de negociación, realicen trabajos en equipo, sean asertivos y puedan manejar situaciones de conflicto.

Para el lograr esto implica que el docente cambie su forma de actuar con respecto al manejo de la conducta. Es decir que no basta con solo dar la clase ni tampoco suponer que los estudiantes saben cómo comportarse si no definir con claridad lo que esperamos que hagan.

El docente deberá poner especial atención en el comportamiento que realmente preocupa ya que no es normal a la edad del estudiante o bien porque puede ser un indicador de algo más serio. Se deberá ignorar aquello que es propio de la edad ya que solo es para retar al docente.

Cuando los estudiantes se mueven en un ambiente positivo y se les da la confianza necesaria para adquirir creencias favorables sobre sí mismos, se adquieren las competencias sociales por lo que gradualmente necesitaran menos estímulos para actuar correctamente ya que estas creencias dirigen su atención a su propia capacidad de actuación.

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