Cultivo De Caraota
Enviado por juliano • 9 de Febrero de 2012 • 1.874 Palabras (8 Páginas) • 1.475 Visitas
La caraota (Phaseolus vuigarisL.) es un componente de gran importancia en la dieta de la población latinoamericana por su alto contenido de proteína (22%} y calorías (390 cal/100 g). Aparte de su valor en la estrategia alimentaría, es un cultivo de gran importancia en los programas de rotación, por su capacidad de fijar el nitrógeno atmosférico, como mejorador de la fertilidad de los suelos y abono verde. En nuestro país, la caraota constituye, junto con el maíz y la yuca, la base de la alimentación de la población rural; su cultivo se realiza en todo el territorio nacional con diversos grados de intensidad (BCV, 1978). De acuerdo con el Anuario Estadístico 1987, Venezuela produjo para esa fecha 30697 t de caraota bajo una superficie de 60190 ha con un rendimiento promedio de 510 Kg./ha, lo cual significó que para satisfacer la demanda nacional se importaran 28277 t del grano, representando una fuga de divisas del orden de los 72926 millones de bolívares.
Los rendimientos de este cultivo señalados a nivel nacional son muy bajos. Sin embargo, la caraota tiene un potencial de producción superior a las 4 t/ha. Esta diferencia tan marcada entre la productividad actual y potencial, se atribuye, en parte, a la carencia de semilla de calidad, al ataque severo de plagas y a problemas nutricionales de suelo.
Analizando las perspectivas que tiene el cultivo de la caraota en nuestro país, tenemos:
-Es un cultivo de amplia distribución agroecológica y de consumo masivo.
-Es un rubro tradicional que forma parte de la dieta del venezolano, constituyendo un suplemento necesario para la dieta basada en cereales.
-Es una fuente importantísima de proteína de alta calidad y bajo costo.
-En la actualidad los precios a nivel del productor son atrayentes.
-Entre las causas que limitan sus rendimientos, tenemos:
-Desconocimiento de sus exigencias agroecológicas, evidenciado en siembras dentro de áreas no aptas.
-Alta incidencia de plagas, incrementándose esto por la poca disponibilidad de variedades resistentes a las principales plagas locales.
-La no aplicación de prácticas agronómicas adaptadas al cultivo.
-Ausencia de un programa de asistencia técnica y crediticia para el cultivo.
Un aspecto restrictivo a destacar es la escasez de semilla de buena calidad. La mayoría de los productores utilizan semilla de la cosecha anterior o intercambiada entre vecinos, desaprovechando las ventajas que lleva implícita su utilización.
La semilla como factor clave en el sistema de producción
La productividad de la caraota afronta una grave limitante en el uso de la semilla de mala calidad, expresada en un material que carece de pureza genética, como consecuencia del cruce natural o de la mezcla de semillas de diferentes tipos, así como por problemas fitosanitarios, insectos-plagas y semillas de malezas que se incrementan cosecha tras cosecha. Utilizar un material de mala calidad asegura la diseminación de plagas, aumenta el riesgo de presentar bajo poder germinativo y que todo el esfuerzo concluya en bajos rendimientos.
Producción de semilla
Una semilla de buena calidad es aquella que tiene pureza, tanto varietal como física-botánica, un alto porcentaje de germinación y está libre de organismos patógenos, tanto interna como externamente (CIAT, 1980). Para producir una semilla de caraota de buena calidad se deben cumplir con ciertos requisitos, entre los cuales tenemos:
-Disponer de semilla varietalmente pura, la cual puede ser de una variedad tradicional o de una mejorada.
-Contar con una semilla libre de patógenos.
-Seleccionar un sitio con ambiente adecuado para evitar el desarrollo de patógenos.
-Ubicar un lote del campo donde no se haya sembrado caraota durante el año anterior, y que el lote para semilla esté separado de la siembra comercial por lo menos 50 m para evitar contaminaciones.
-Manejar adecuadamente el lote de semilla, lo cual implica:
a. Buena preparación del suelo.
b. Utilización de una densidad de población del orden de las 140.000 plantas/ha, lo cual se traduce en una mayor producción de inspección técnica de cultivares de caraota en condiciones de cosecha. semilla por planta, se reduce la diseminación de enfermedades, facilita la remoción de plantas enfermas o atípicas y las inspecciones de campo.
c. Uso de fertilizantes previo análisis de suelo.
d. Riego adecuado y oportuno.
e. Control de malezas e insectos- plagas.
-Remover plantas enfermas y/o atípicas esto, además de prevenir contaminaciones, elimina las ya existentes en campo.
-Realizar la cosecha oportunamente. Esta se debe iniciar cuando las semillas tengan una humedad entre un 18 y 20%, evitando cosechar las vainas que estén en contacto con el suelo.
-Efectuar la trilla manual o mecánica, evitando mezclas con otras variedades y daños mecánicos a la semilla.
-Manejar adecuadamente la semilla postcosecha, mediante secado limpieza, tratamiento preventivo y almacenaje.
Sistemas o formas de producción de semillas
La organización para producir y distribuir la semilla de caraota, en nuestro país, va desde el sistema convencional de producción y mercadeo bajo la supervisión del Estado, apoyado en una compleja red de instituciones públicas y privadas, hasta el sistema tradicional. En éste, la mayoría de los pequeños productores siembran, año tras año, semilla de la cosecha anterior o producto del intercambio entre vecinos. Así, entre una forma y otra, existe una falta de organización, de tipo intermedio, que impide mejorar la calidad de la semilla sembrada por la mayoría de los productores.
En este sentido, podemos señalar tres sistemas de producción y distribución de semilla.
a. Tradicional
b. Convencional
c. No convencional
a. Sistema tradicional: el productor utiliza semilla proveniente de la cosecha anterior o producto del intercambio entre vecinos. La alternativa de mejoramiento de este sistema consistiría en la difusión y aplicación de prácticas culturales sencillas como la eliminación de plantas enfermas, cosecha oportuna, secado natural, trilla manual, etc. Estas recomendaciones tienen como propósito hacer que los pequeños productores aprovechen eficientemente el potencial genético de los materiales criollos y puedan autoabastecerse de semilla de mejor calidad en comparación con la que acostumbran utilizar.
b. Sistema convencional:
...