ENSAYO DE REINSERCION PENAL

ENSAYO DE REINSERCION PENAL

INTRODUCCION

EN enero del año 2013, conocí al señor Eleuterio morales cine en una visita que realice al centro penitenciario de la isla de Cozumel, en el cual me contó la historia por el cual se encontraba detenido en dicho lugar, me dijo que fue sentenciado a cuatro años de prisión por el delito de robo de la cual estaba cumpliendo el primer año de prisión y su único afán era salir de ese lugar y no volver a cometer el mismo error.

El Articulo 142 del código penal del estado de Quintana roo señala que “se impondrá de seis meses a seis años de prisión y de diez a cincuenta días de multa, al que se apodere de una cosa ajena mueble, sin derecho y sin consentimiento de la persona que pueda disponer de ella conforme a la ley”.

Fue tanta la preocupación que me trasmitió, por su familia y por sus hijos en virtud de que los dos hijos eran menores de edad y no tenían otro sustento más que del trabajo que el realizaba, que nació mi interés en poder ayudarlo para conseguirle un abogado que se interesara en su caso y por otro lado trabajar en sus capacidades y su disposición para reinsertarse en la vida en sociedad.

DESARROLLO

El señor Eleuterio morales cine, en una segunda visita que realice al centro penitenciario me compartió que el delito que el cometió fue haber comprado un vehículo que nunca se percató de que era un vehículo robado y tampoco investigo acerca de la persona que le vendió dicho vehículo por lo que solo conocía que esa provenía del estado de Yucatán sin saber su dirección o algún lugar donde pudiera ser localizado por lo cual al comprar el dicho automóvil y al ver que el Tenia llaves del mismo pensó que realmente él era el propietario de dicho vehículo lo que se le hizo raro, fue que el vendedor se comprometió a enviarle la factura cosa que nunca hizo y dado que el pago fue de 30,000. Pesos m/n. Por el citado bien, pues empezó a hacer uso de ese automóvil y pasados aproximadamente seis meses la policía judicial del estado se presentó a su domicilio preguntándole por qué andaba usando ese vehículo y aun a pesar de que le explico que ese automóvil le fue vendido por una persona de la ciudad de Mérida al no poder comprobar la propiedad fue detenido y tunado al ministerio público y su posterior puesta a disposición del juez penal de la isla de Cozumel. Y después del juicio fue sentenciado a 4 años de prisión.

Asimismo me comento que la vida en el penal es muy difícil dado que todos se tratan de aprovechar de los más débiles y que si no pagaba protección era golpeado y castigado enviándoles a las limpiezas de los baños por lo cual siempre trato de defenderse y hasta pensó en volverse igual que sus extorsionadores, también aunado a esto y  con mucha confidencialidad me conto que más de una vez pensó en el suicidio ya que al estar encerrado pasan muchas cosas muy duras por tu mente, tan es así que en varias ocasiones pensó en quitarse la vida, porque considera que los estado emocionales los sentimientos encontrados en el que te encuentras son muy fuertes y ya sientes que no encuentras una  salida, sin embargo con todos estos momentos vividos dentro de la penitenciaria tenía una esperanza, pese a lo que vivía día  a día, la visita de su familia lo reanimaba un poco, ya que lo necesitaban, los consejos  de su esposa lo hacían reaccionar para tener una leve esperanza y no desistir, algo que lo hacía emocionarse y sonar con salir de ahí, era volver a ver a sus dos pequeños hijos, ya que no es permitido el acceso a los niños menores de edad en la penitenciaria, Otro sufrimiento que tenía hasta cierto punto remordimiento, era no poder ver a su madre de 85 años de edad, eso le pesaba muchísimo porque tenía un mal pensamiento que lo atormentaba por las noches y no lo dejaba dormir, era no volver a ver a su mamita ya ancianita, decía quizás cuando yo salga ya no la encuentre viva, “ porque el encontrarme aquí es un calvario para ella” ya que soy hijo único y mi padre hace muchos años que falleció y que su madre vivía sola, y dependía económicamente de él.  Cuanto dolor llevaba este hombre en sus entrañas y cuanto peso en sus hombros por un delito que él no había cometido, “que injusta es la vida” esas fueron sus palabras del señor Eleuterio morales cime .en mi segunda visita a la penitenciaria.

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