Ejemplo de Proceso Interactivo y Recursos para la Comprensión de la Lectura
Enviado por marielar386 • 16 de Marzo de 2022 • Tarea • 1.231 Palabras (5 Páginas) • 348 Visitas
Proceso Interactivo y Recursos para la Comprensión de la Lectura
Es muy importante antes de iniciar la lectura, definir y dejar claro por qué o para qué va a servir leer dicho texto o libro. Se debe establecer el propósito de la lectura que se va a efectuar. Se puede leer para:
1. Obtener las ideas generales de un texto o libro.
2. Distinguir las ideas principales de un texto o libro.
3. Evaluar críticamente un texto.
4. Comprender el contenido de un texto.
5. Localizar información específica.
6. La aplicación práctica.
7. Distraerse.
8. Dar una revisión rápida a un texto o libro.
9. Hojear un texto.
10. Hacer una lectura de estudio.
11. Leer palabra por palabra.
12. Enriquecer vocabulario
Aplicación de los Procesos Interactivos y Recursos para la Comprensión de la Lectura
Para la aplicación de estos en la lectura, el texto escogido es: Si los tiburones fueran hombres (Bertolt Brecht), siguiendo los pasos adecuados, lo primero que hice fue la realización y análisis de la lectura, encontrando palabras desconocidas como lo son: varec, fauces y retozar, la cual buscando el significado de cada una de ellas, encontré que varec son un Conjunto de restos de algas pardas, fauces es la parte posterior de la boca de los mamíferos, que se extiende desde el velo del paladar hasta el principio del esófago, y por último es retozar, lo cual es importante mencionar que esta palabra tiene varios significado como lo son: altar y corretear alegremente, realizar juegos eróticos con otra persona, y avivarse sin llegar a aflorar por completo, dicho esto estoy cumpliendo así el primer nivel del proceso interactivo llamado nivel de decodificación.
Luego proseguí a ejecutar el segundo nivel llamado la comprensión literaria, esta trata en la compresión de lo explícito de la lectura realizada, donde reflejé simplemente aspectos reproductivos de la información expresada en el texto sin ir más allá del mismo, esta se refería a que un señor le explica a una niña que es la hija pequeña de la patrona ¿Qué pasaría si los tiburones fueran hombre?, con esto realizando así el segundo nivel de los procesos interactivos.
Después proseguir con el siguiente paso llamado comprensión inferencial, que se relaciona con una elaboración semántica profunda, donde se realizan estrategias para comprender lo que se está leyendo, en este caso mi estrategia principal fue leer en voz alta e imaginar que soy parte de los personajes de este texto para poder entender y sentir lo que está pasando en la lectura y hacerme preguntas sobre dicho tema, para luego cuestionar el mismo.
Gracias a los niveles anteriores logré llegar a realizar el último nivel que lleva por nombre metacomprensión, la cual refiere al nivel del conocimiento y control necesario para reflexionar y regular la actividad de comprensión.
Ahora bien, mediante la aplicación de los procesos interactivos y recursos para la comprensión de la lectura obtuve el siguiente análisis sobre el cuento de Si los tiburones fueran hombres (Bertolt Brecht): Este texto es un claro ejemplo de una crítica sobre el funcionamiento del sistema, además, tiene tanta vigencia en sus palabras y puede adjuntarse a tantos gobiernos, tiempos, sistemas políticos que han existido, que existen y que posiblemente existirán. Considero que es un buen texto que hace una analogía al sistema capitalista, esto lo comparo con La Biblia, ya que es un texto que por más que pase el tiempo seguirán concordando con el presente, tengamos los dirigentes que tengamos, es por ello que es muy adecuado para reflexionar sobre la realidad que ahora nos toca vivir.
Un claro ejemplo de este texto para su comprensión, es que durante la época de la segunda guerra mundial, nadie (los pececillos) debían pensar y actuar a su gusto, solo debían obedecer lo que decía los tiburones (Hitler y los nazis).
Lectura Escogida
Si Los Tiburones Fueran Hombres (Bertolt Brecht)
— Si los tiburones fueran hombres -preguntó al señor K. la hija pequeña de su patrona- ¿se portarían mejor con los pececitos?
— Claro que sí -respondió el señor K.-. Si los tiburones fueran hombres, harían construir en el mar cajas enormes para los pececitos, con toda clase de alimentos en su interior, tanto plantas como materias animales. Se preocuparían de que las cajas tuvieran siempre agua fresca y adoptarían todo tipo de medidas sanitarias. Si, por ejemplo, un pececito se lastimase una aleta, en seguida se la vendarían de modo que el pececito no se les muriera prematuramente a los tiburones. Para que los pececitos no se pusieran tristes habría, de cuando en cuando, grandes fiestas acuáticas, pues los pececitos alegres tienen mejor sabor que los tristes. También habría escuelas en el interior de las cajas. En esas escuelas se enseñaría a los pececitos a entrar en las fauces de los tiburones. Estos necesitarían tener nociones de geografías para mejor localizar a los grandes tiburones, que andan por ahí holgazaneando.
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