El jurista y el simulador del derecho. Jurisconsulto,

Introducción

“El jurista y el simulador del derecho”, nos da una detallada explicación sobre la diferencia que existe entre el verdadero jurista y un simulador del derecho, de como uno puede llegar a ser un “jurisconsulto” de manera adecuada, siendo un estudioso de la materia, comprendiendo todos los valores que debe tener el verdadero jurista para poder desempeñarse de una manera adecuada y justa ante la sociedad.

Jurisconsulto, su concepto es equivalente al de jurisprudente, ya que ambos denotan sabiduría del Derecho o jurisprudencia, estos términos los podremos apreciar a fondo en el  ensayo realizado por el doctor en derecho. Ignacio Burgoa Orihuela

Así mismo abarcaremos otros temas como “el derecho como fenómeno social”, ya que hemos afirmaremos que sin el derecho no puede existir y subsistir la sociedad.

La diferencia entre el jurista y el simulador del derecho, es un tema muy importante porque:

El simulador lleva acabo la acción de fingir o imitar lo  que no es. Sin en cambio el verdadero jurista es aquel estudioso de la ciencia del derecho. El jurista es un galante de la sociedad en cuanto que debe procurar que en ella impere la justicia y la seguridad.

Desarrollo.

¿Quién es el jurista?, el jurista es el cultor del derecho, la importancia ingente de su tarea social deriva puntualmente de la trascendencia del orden jurídico.

Para que un verdadero jurista pueda cumplir su excelso cometido, el jurista, principalmente como abogado debe ser libre. En donde la libertad significa que no debe estar vinculado permanentemente a ningún sector público, privado o social, ni patrocinar solamente los intereses que este sector le represente.

El derecho como ciencia. La ciencia como la acción de saber, implica conocimiento general y abstracto de las cosas. Este atributo indica que no todo conocimiento es científico.

El derecho como arte. El arte jurídico importa un hacer, un actuar para tratar de conseguir estos dos primordiales objetivos: la bondad y la justicia

El arte del derecho se revela como la actuación o actividad en procuración de “lo bueno” y de “lo justo”

LA tipología del jurista. La actividad del jurista se realiza a través de distintos tipos interrelacionados que reconocen como presupuesto fundamental el del jurisconsulto.

El concepto de jurisconsulto es equivalente al de jurisprudente, pues ambos denotan sabiduría del derecho o jurisprudencia. Así “prudente” y “consulto” son sinónimos de “sabio”, “docto”, “entendido” o “maestro” en la ciencia jurídica. Cualidades que necesariamente deben concurrir en todos los tipos de actividad del jurista.

El abogado. El abogado debe ser un jurisprudente, esto es un sapiente del derecho. Sería absurdo que no lo fuese. Sin los conocimientos jurídicos no podría ejercer digna y acertadamente su profesión.

El “magister juris” maestro del derecho, le es inobjetable que debe ser jurisprudente sería inconcebible que no lo fuese ya que no es posible transmitir conocimientos que no tenga.

La misión del “magister juris” se realiza en dos ámbitos diferentes pero complementarios: la enseñanza y la educación jurídicas.

El simulador del derecho, en consideraciones generales.

La simulación es la acción de fingir o imitar lo que no se es. El simulador hace de su vida una farsa, ósea, una comedia, su personalidad psíquica envuelve muchos  vicios como la vanidad, la egolatría, la megalomanía, la mentira, el engaño, el fraude, la falsedad, la mediocridad, la corrupción, y otros que sería prolijo nombrar. Así el simulador al ostentarse como lo que no es, al aparentar para cubrir su ignorancia, se muestra vanidoso, es decir, vacio por dentro y engañoso por fuera. Por tanto, una especie de defraudador que se apoya en sus propias mentiras sobre su persona para pretender dar la impresión de una importancia que no tiene. Sus actitudes obedecen a su incultura que proviene, o de su falta de inteligencia o de su falta de vocación  por el estudio.

Padece un complejo de inferioridad que trata de ocultar exteriormente con audacia y temeridad. Su vanidad lo presiona para no admitir que vale menos de lo que cree valer y lo empuja a una sobreestimación de su ego.

Todas sus actitudes (el simulador) tienden a darle la ilusión de una superioridad que para los demás no existe.

La audacia del simulador, que no la inteligencia de la que carece, lo convierte en un farsante ante quienes no lo conocen, buscando un aplauso y admiración. Esta audacia se torna cobardía frente a las personas que están enteradas de sus limitaciones intelectuales y culturales.

El verdadero jurista. Además de ser libre el jurista debe ser autentico, la autenticidad se revela en un comportamiento acorde a lo que se piensa y se siente. Es, por tanto, una calidad opuesta  al vicio de la falsedad e hipocresía.

Una de las imprescindibles cualidades del jurista es la honestidad, que en su sentido amplio equivale a no ser corrupto.

Así mismo es evidente que el jurista debe tener un hondo sentido de la justicia no solo en lo que tradicionalmente se considera como justicia conmutativa, sino, por modo primordial, en lo que debe entenderse por justicia social.

Diferencias entre el jurista y el simulador del derecho

El jurista.- es una persona recta, honesta, una persona libre, autentico, una persona estudiosa del arte de derecho, que no es vanidoso, tiene la sapiencia necesaria para poder impartir conocimiento. Ya que no solo ostenta un titulo, si no que vive el derecho día a día, le apasiona el arte del derecho y se cultiva más y más para obtener los conocimientos adecuados en el tiempo adecuado, para así permanecer actualizado y ser un “homo juridicus” en toda la extensión de la palabra

El jurista, es jurisprudente, puede ser abogado, “magister juris”, juez, ya que a pesar de poseer la titularidad de licenciado o doctor en derecho tiene los conocimientos adecuados para poder desempeñarse como tal.

Mas sin en cambio el simulador es una persona petulante, pedante, puede decir que sufre de “ignorancia juris”, ya que no cuenta con los conocimientos adecuados para desempeñarse como un verdadero jurista así mismo, se oculta tras una cortina mentiras y engaños, solo finge o imita a un verdadero jurista.

El simulador del derecho aun sustentando un título de licenciado en derecho, o doctor no es jurisprudente, ni abogado, ni “magister juris” la titularidad mencionada y cualquier nombramiento que hayan expedido al simulador, no le confieren cualidades de los aludidos tipos de jurista.

Conclusión.

El derecho es una ciencia que vivimos día a día aun así no lo percibamos, así que es importante tener los conocimiento básicos y fundamentales del derecho.

Debemos tener en cuenta que para poder llegar a ser un verdadero jurista “homo juridicus”, debemos ser unos estudiosos de la ciencia del derecho, aplicarla con rectitud y honestidad.

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