Enseñanza situada

Si bien las pedagogías que se centran en el sujeto como un ser que aprende se observan desde el silo XVII, es hasta el siglo XX donde estas toman mayor fuerza, al considerar que el currículo y la enseñanza debe centrarse en aspecto como las necesidades, intereses y conocimientos previos.  De acuerdo con Neve (2003) la obra experiencia y educación Dewey constituye la raíz intelectual de propuestas actuales que recuperan la noción de aprendizaje experiencial y sustenta las correspondientes a la enseñanza reflexiva y situada.

Dewey ubicado desde el movimiento de la educación democrática progresista  parte del rechazo a la filosofía y práctica educativa en las primeras décadas del siglo antepasado,  puesto que las consideraba como inapropiadas y enciclopedistas, que contribuían a reforzar o reproducir el autoritarismo.  Para Dewey la escuela es una institución social en la que se puede desarrollar una vida comunitaria, ésta constituyendo el soporte de la educación.   En esta vida comunitaria al alumno se le conduce a participar activamente en la tradición cultural que le es propia, permitiendo de igual manera  el desarrollo pleno de sus propias facultades. Si bien la escuela es entendida como un proceso de vida, la vida social de la escuela deweyniana se basa en el intercambio de experiencias y en la comunicación entre los individuos. Por lo tanto la escuela tiene que estructurarse en torno a determinadas formas de cooperación social y vida comunitaria, de tal manera que por medio de la participación democrática surja la autodisciplina mediante el compromiso con la tarea constructiva y la propia dedición del individuo.

Según Posner (2004), la perspectiva experiencial se basa en el supuesto de que todo lo que les pasa a los estudiantes influye en sus vidas, por ende el currículo debería plantearse considerando  todas las consecuencias no anticipadas de cada situación significativa, de tal manera que los pensamientos, sentimientos y tendencias a actuar ante dicha situación dejen huella perdurable. La filosofía de una enseñanza de corte experimental descansa en la premisa: “si la experiencia escolarizada se relaciona más con la experiencia significativa de los estudiantes y resulte menos artificial, los estudiantes se desarrollarán más y llegarán a ser mejores ciudadanos”.

La propuesta del aprendizaje experiencial de Dewey se desarrolla a partir de la tesis “toda autentica educación se efectúa mediante la experiencia”, de igual manera afirma que ello “no significa que todas las experiencias sean verdaderas o igualmente educativas”.  El aprendizaje experiencial es activo, utiliza y transforma los ambientes físicos y sociales para extraer lo que contribuya a experiencias valiosas; pretende establecer un vínculo entre el aula y la comunidad y entre la escuela y la vida. El aprendizaje experiencial se conoce como el enfoque de “aprender haciendo”, o “aprender por experiencia”.  proponiendo como punto central el desarrollo del pensamiento de la práctica reflexiva.

De acuerdo con Brubacher (2000) los principios educativos de la postura deweyniana son, una edicacion:

Democrática: en y para la democracia, orientada hacia la construcción del orden social.

Científica: da relevancia a la experimentación por medio del método científico.

Pragmática: centrada en la experiencia como prueba de conocimiento.

Progresista: la experiencia educativa es una reconstrucción social del actuar del niño a la luz de las experiencias vividas.

Para Dewey el currículo debe modificarse constantemente según las necesidades e intereses de los alumnos, con la intención de fomentar en ellos el desarrollo de la inteligencia, habilidades sociales para la participación democrática. Dewey intenta equilibrar dos criterios, el desarrollo del  razonamiento y del conocimiento empírico o procedimental, además introduce un tercero: el desarrollo o crecimiento saludable de la experiencia individual. Estableciendo un balance entre el desarrollo intelectual, social y personal.

 En la educación experimental, los contenidos de la enseñanza se derivan de la experiencia de la vida diaria. Para Dewey  las experiencias y conocimientos previos son el  punto de partida de toda experiencia. De igual manera Ausbel con su teoría de aprendizaje significativo,  relaciona el aprendizaje experimental  y el contenido por aprender con las experiencias previas, aunado a esto Dewey plantea como siguiente paso que el educador debe seleccionar aquellas experiencias promisorias de estimular nuevas formas de observación y juicio. Conforme se amplía la experiencia y se organiza más , se aproxima a una forma de organización más madura y hábil.

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