OROYA- UNA MIRADA DESDE EL DESARROLLO SOSTENIBLE.

OROYA- UNA MIRADA DESDE EL DESARROLLO SOSTENIBLE

Presentado por:

Shirley Lizeth Sanín Munera

Presentado a:

Alejandro Boada

Universidad Externado de Colombia

Maestría en Administración de Empresas

09 de noviembre de 2016

Bogotá, Colombia

INDICE

1.        INTRODUCCION        

2.        CLARIFICACION        

3.        RAZONES        

4.        CONCLUSIONES        

5.        LISTA DE REFERENCIAS        

1. INTRODUCCION

Uno de los casos más reconocidos a nivel mundial en el tema de contaminación ambiental es el denominado caso “Oroya”, una ciudad ubicada en Perú, sus habitantes continuamente se encuentran expuestos a los tóxicos derivados de la explotación y transformación de materiales tales como plomo, zinc, azufre, entre otros por parte Doe Run, una empresa metalúrgica que aprovecha la escasa legislación ambiental del país para extraer recursos a un alto costo ambiental y social.

Así pues, es imperante que los estudiosos del tema, realicen investigaciones que tiendan a favorecer la comprensión del complejo estado de fenómenos que se encuentran subyacentes en dicha industria, con el fin de permitir ampliar el espectro de interpretaciones y fomentar una decisión coherente acerca de la aceptación o no del cargo directivo propuesto en el presente caso.

En consecuencia el presente documento realiza a partir de la recolección de datos una investigación a nivel de ensayo, con el fin de generar un análisis de la situación que se presenta en complejo metalúrgico ubicado en la Oroya, así pues, se abordaran cuatro ejes fundamentales, a saber; 1) identificación del concepto de externalidad aplicado a partir del costo externo marginal (CEM) 2) Determinación de variables Qs, Qa Y Qm y su actuación frente  a la contaminación generada por plomo 3) Aplicación de los elementos de personalidad corporativa expuestos en el documental  “LA CORPORACION”  en comparación con las acciones de la compañía DOE RUN. 4) Conclusiones.

1. CLARIFICACION

Diariamente los medios de comunicación saturan de información a millones de personas en el mundo sobre el deterioro ambiental, la contaminación, la explotación de recursos, etc. (Vílchez, J. 2009), a pesar de tal advertencia los daños no se detienen, por el contrario, el daño ecológico es cada vez mayor (Wilson, E. 2005), a pesar del ‘interés’ de estados y multinacionales por constituir una conciencia ambiental, tal situación a opinión de algunos expertos es debido a que el tema de la protección y conservación de la biodiversidad no es tema sólo de conciencia sino también de goce, placer, sentir e inconciencia.

Por tal motivo, un fuerte derrotero que emerge en medio del debate sobre la crisis ecológica planetaria es el desafío de transformar la encarnada manera consumista como habitamos en éste mundo por otra más ‘equilibradas’, es decir, poder ‘suscribir’ en la unidad constituyente de cada ser humano la unidad con la tierra, convertir en deseo la preocupación por frenar la destrucción de nuestra única nave espacial.

En este orden de ideas uno de los principales temas actualmente a nivel mundial es la protección al medio ambiente y como las organizaciones afectan positiva o negativamente, así pues, el principal concepto que se debe entender es el de desarrollo sostenible descrito en 1987 en el Informe redactado por la Comisión de Bruntland como “…desarrollo que satisface las necesidades de la generación presente, sin comprometer la capacidad de las generaciones futuras de satisfacer sus propias necesidades…” (Gómez. R. s.f) Profusamente citada, esta declaración es una prescripción ética que nos apremia a respetar el derecho de nuestros descendientes a disponer de un entorno saludable y utilizar los recursos naturales al menos en un grado similar al que disfrutamos los seres humanos actuales. Esta formulación universal de la justicia intergeneracional y justicia distributiva resumiría el sentido normativo “originario” del desarrollo sostenible.

Lo anterior permite evidenciar que la dimensión del Desarrollo sostenible que debe fortalecerse es la cultural y más específicamente la dimensión ética, teniendo en cuenta que el modelo de desarrollo y consumo imperante hoy en día tributa a la destrucción del planeta ya que está basado en la competencia despiadada, por tanto como lo afirmó el presidente de Uruguay en su intervención en Rio + 20 llevada a cabo en Rio de Janeiro (2012) el desafío de procurar modelos sostenible debe realizarse reconociendo que la crisis no es ecología, es política y que el hombre no gobierna hoy las fuerzas económicas que ha desatado, estos aspectos requieren la incorporación de modelos de razonamiento y modelos de comprensión  concluyentes, vinculantes y éticos ya que la “crisis” de la destrucción del planeta no es una causa, la causa es el modelo de desarrollo.

En consecuencia, a lo anterior el modelo de desarrollo actual promueve estrategias de apropiación de recursos naturales quedando entonces atrapado el concepto de ambiente en las mallas del poder del discurso del crecimiento sostenible, no obstante lo anterior, la  explotación económica de la naturaleza, la degradación ambiental, la desigual distribución social de los costos ecológicos y la marginación social persisten como externalidades del proceso productivo de muchas compañías que no asumen el costo social. Uno de los mayores impactos ambientales es producido entonces por la minería entendida como una actividad heterogénea de extracción, explotación y aprovechamiento de recursos con fines comerciales y que por ejemplo en Perú contribuye al fisco más de S/. 1,100 millones de soles al año (Barrantes, R. s.f)

Por consiguiente, se torna importante analizar el caso del complejo metalúrgico de la Oroya ubicado en la provincia de Yauli, departamento de Junín, en la sierra central peruana, a 3,775 metros sobre el nivel del mar, cuyo tema que ha causado revuelo mundial por el alto impacto ambiental producto de la extracción de recursos. De acuerdo con el último estudio realizado por el Instituto Nacional de Estadística e Informática (INEI, 2012), la Oroya posee una población censal de 24.476 habitantes  entre mujeres y hombres para el año 2015.

...