Paradigmas

EL DESARROLLO INFANTIL SEGÚN LA PSICOLOGIA GENETICA

En esta lectura el autor J. de Ajuriaguerra la génesis y desarrollo del niño.

La evolución del niño se puede evaluar por diversos procedimientos y calcularse mediante escalas de desarrollo, a las que Binet y Simón proponen para obtener el coeficiente intelectual. Las más reconocidas son las de Charlotte Buhler y A. Gessell sobre la base de meses y años de edad. Nos dan un valor estadístico, nos permite medir en el niño con precisión el nivel de desarrollo alcanzado o el retraso. Los estadios de desarrollo han sido establecidos para definir los niveles funcionales. Las escalas son descriptivas; los estadios operacionales con vista a profundizar el conocimiento del modo organizativo del niño.

El estadio no tiene una base cronológica se basa en una sucesión funcional. H Wallon valora los estadios partiendo del desarrollo emocional y la socialización.

J Piaget precisa al máximo los términos la definir un estadio:

Para considerar que existe un estadio, lo primero es que el orden de sucesión de las adquisiciones sea constante.

Todo estadio ha de ser integrador. Es que las estructuras elaboradas en una edad determinada se conviertan en parte integrante de las de los años siguientes.

Un estadio comprende al mismo tiempo un nivel de separación y un nivel de terminación.

Cuando se dan juntos una serie de estadios hay que distinguir el proceso de formación, de génesis y las formas de equilibrio final.

J Piaget él llama estadio lo que otros llaman fase.

P Osterrieth comprobó que entre los 0 y 24 años puede considerarse que cada vez que se cambia de edad comienza o tiene su final un estadio.

Un tercer periodo dominado por la aparición de la capacidad representativa. Después el niño abandona la postura adualista y comienza a considerar al mundo que lo rodea como algo interpersonal. Al mismo tiempo aparece la toma de conciencia de si mismo. En este periodo se elabora la lógica concreta. La primera crisis de oposición a los 30 meses de edad aproximadamente.

A Gesell señala una crisis de inseguridad, una fase conflictiva y una serie de dificultades al llegar a los 5 o 5 años y medio relacionada con el periodo edipiano.

R. Zazzo introduce una diferencia entre la idea de crisis y la de estadio: la crisis ha de introducir un nuevo estadio definido cualitativamente, y por consiguiente una reorganización.

La aportación de la psicología genética es todo un cuerpo de doctrinas en que sincronía y diacronía son complementarias.

J. piaget y H Wallon presentan el desarrollo psíquico como una construcción progresiva que se produce por interacción entre el individuo y su medio ambiente. Piaget ha profundizado en los procesos propios en el desarrollo cognitivo, y Wallon en el papel de la emoción en el comienzo del desarrollo humano.

En el proceso de adaptación hay que considerar dos aspectos, opuestos y complementarios a un tiempo: la asimilación o integración de lo externo a las estructuras de la persona y la acomodación o transformación de las propias estructuras de la persona en función de los cambios del medio exterior.

H. Wallon insiste en el primer desarrollo Neuromotor y especialmente en la función postural que por sí solo ofrecerá posibilidades de reacciones orientadas. La emoción está provocada por impresiones posturales y porque en base al mismo tiempo de la postura (gesto mímica) para expresarse. Las reacciones denominadas por H. Wallon, tónico-emocionales son los primeros indicios del desarrollo psíquico en la medida en que inicialmente son las primeras reacciones psicológicas. Para H. Wallon la emoción es el intermedio genético entre el nivel fisiológico con sólo respuestas reflejas y el nivel psicológico que permita al hombre adaptarse progresivamente el mundo exterior que va descubriendo. El primer mundo exterior es el mundo humano. “el niño que siente va camino del niño que piensa”.

ESTADIOS DEL DESARROLLO SEGÚN H. WALLON

Autor: J. de Ajuriaguerra.

Al nacer la principal característica del recién nacido es la actividad motora refleja. Wallon llama este estadio impulsivo puro. La respuesta motora a los diferentes estímulos (interoceptivos, propioceptivo y exteroceptivo) es una respuesta refleja.

En este sentido la forma más degradada de la actividad es la que posteriormente se da cuando queda abolido el control superior ( en la crisis convulsivas) cuando no se desarrolla normalmente el sistema nervioso, es la única respuesta y sin posible progreso.

Wallon ha hecho retroceder a los seis meses que llamamos Segundo estadio.

Las primeras muestras de orientación hacia el mundo del hombre: la alegría o la angustia; se manifiesta a los tres o cuatro meses. Segundo estadio, o estadio emocional, Cuya existencia niega J. Piaget la emoción en si nunca dominante y organizada. H. wallon caracteriza este estadio como el de Simbiosis efectiva que sigue a la autentica simbiosis de la vida fetal.

El tercer estadio de Wallon es el llamado estadio sensoriomotor aparece al final del primer año o al comienzo del segundo. Según con lo que denomina “sociabilidad incontinente” el niño se orientara hacia intereses objetivos y descubrirá realmente el mundo de los objetos. Define la actividad simbólica como la capacidad de atribuir a un objeto se representación (imaginada) y a su representación un signo (verbal), cosa que ya es definitiva a partir de un año y medio o dos años.

Estadio proyectivo es que la acción, en lugar de ser, como será mas tarde, simplemente ejecutante es estimuladora de la actividad mental o de la que Wallon llama conciencia.

El quinto estadio Wallon denomina estadio del personalismo. Tras unos claros progresos marcados por el “sincretismo diferenciado”, el niño llega a prescindir de situaciones en que se halla implicado y a reconocer su propia personalidad como independiente de las situaciones. Llega a la “conciencia del yo”. entre los dos años y medio y los tres años.

El periodo de comprender comienza por una fase de oposición y concluye con una fase de gratitud.

Cuando llega a la edad escolar, hacia los seis años posee los medios intelectuales y la ocasión de individualizarse claramente, le permite entablar nuevas relaciones con su entorno, relaciones cuyos lazos se van estableciendo progresivamente, pero se aflojan o fortalecen según los intereses o las circunstancias. Es la fase de personalidad polivalente el niño puede participar en la vida de diversos grupos sin hacer la misma función ni ocupar el mismo puesto.

La adolescencia en una etapa en que las

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