Planificacion Del Entrenamiento

La preparación inicial de un deportista debe seguir unos determinados pasos, es decir, debe ir desde una preparación general e ir introduciendo actividades más enfocadas a las que se realizarán en competición , que sean semejantes a las que se producirán, por decir un deporte, en un partido de fútbol (sprints cortos, salto y salida etc). Se debe de observar una evolución en los ejercicios.

En esta evolución, Platonov comenta que primero hay una etapa de Preparación General, en la que se busca una mejora general del deportista, tanto a nivel físico(el objetivo principal es elevar el nivel de aptitud física general del atleta como a nivel técnico ( mejora de las cualidades), y una etapa de Preparación Específica, en la que ya se realizan actividades muy semejantes a las de competición.

Platonov comenta, que dentro del Periodo de Competición, hay que disminuir el volumen de entrenamiento considerablemente para que el atleta llegue en las mejores condiciones a la competición, pero también mantener al máximo la intensidad de entrenamiento. Este punto de vista está destinado a deportes que constan de una competición importante al año y dos o tres menos importantes (secundarias), que pueden servir como controles. En deportes en los que se compite cada semana, este punto de vista habría que modificarlo bastante para poderlo llevar a la práctica; ya que en estos deportes no se cuenta con tanto tiempo ya que se compite cada semana y según su punto de vista hay que hacer esto dos o tres semanas antes de la competición.

En el segundo mesociclo antes de la competición adquiere mucha importancia lo que dice, en el cual el volumen de trabajo se reduce a un 50 o 60 %, sin variar la intensidad (ésta se mantiene), garantizando el descanso absoluto del deportista de cara a la competición, tanto física como psicológicamente.

Respecto al periodo de transición, el método a emplear siempre dependerá del deporte para el cuál se esté entrenando al deportista, pero, en líneas generales, la más efectiva sería la de procurar al atleta de dos semanas de descanso pasivo, para que éste desconecte tanto física como psicológicamente, y, a partir de ahí, comenzar a trabajar con actividades no específicas, es decir, actividades muy diferentes a las del deporte para el cuál se esté preparando al atleta ( por ejemplo un futbolista ir a nadar, jugar al tenis).

...