Quien fue Clorinda Matto de Turner

Clorinda Matto de Turner

3.1. Biografía

Grimanesa Martina Mato Usandivaras, quien después se llamará Clorinda Matto, nació en la ciudad del Cusco, Perú el 11 de noviembre de 1852^[1]. Fue hija de Ramón Mato Torres y Grimanesa Usandivaras Gárate, quienes eran dueños de la hacienda llamada Paullo Chico, donde Matto y sus dos hermanos, David y Daniel, pasaron la mayor parte de su infancia. Debido a su estadía en la hacienda, tuvo oportunidad de observar la vida campestre y aprendió a hablar el quechua.

“José María Montes Arregui de 84 años, nacido y vecino del Ayllo de Paullo, nos cuenta […] [la niña Clorinda] Era de carácter varonil y dominaba a sus hermanos menores David y Daniel. Ella era quien dirigía los juegos infantiles. Amable con los suyos y en especial con los tiernos indiecillos” (Cuadros, 1949). Desde pequeña, cuando jugaba con los niños de la hacienda, Clorinda mostró su eterno interés por el bienestar de la población indígena.

Obtuvo su educación formal en Cusco, en el Colegio Nacional de Educandas. “A los catorce años ya editaba un periódico estudiantil y también escribía obras de teatro que eran representadas por sus amigas” (Berg, 2010). En 1862 falleció su madre y en 1868 ella abandonó la escuela para ayudar con el manejo de la casa y hacerse cargo de sus hermanos menores.

En 1871 se casó con el médico y comerciante inglés José Turner, y se fueron a vivir al pueblo andino de Tinta, Cusco. “Su contacto diario con la gente del lugar –indígenas explotados, blancos abusivos- fue nutriendo su espíritu de una experiencia de carácter social, y para matar las horas empezó a escribir, aunque tenía cierto rubor al qué dirán” (Zanutelli, 2006). Al poco tiempo empezó a colaborar con diversos periódicos como El Heraldo, El Ferrocarril, El Rodadero, El Eco de los Andes y El Mercurio; sin embargo, ocultaba su identidad bajo seudónimos como “Lucrecia”, “Betsabé", "Rosario" o “Carlota Dimont”.

Funda en febrero de 1876 la revista El Recreo del Cuzco, una revista semanal de literatura, ciencia, artes y educación, la cual incluyó muchos artículos suyos. En 1877 visitó por primera vez la capital peruana, donde fue bien acogida e invitada a varios festejos literarios, entre ellos las tertulias literarias organizadas por la escritora argentina Juana Manuela Gorriti, veladas que luego continuaría la propia Clorinda.

En 1879, cuando Matto volvió a Tinta, en los primeros años de la guerra con Chile, “Respaldó activamente la causa de Andrés Avelino Cáceres. La casa de los Turner fue usada como hospital de guerra y Matto organizó un sistema de ambulancias además de reunir fondos para la guerra” (Berg, 2010).

Su esposo falleció en marzo de 1881, cuando el desorden de la guerra estaba en su apogeo, dejando a su viuda en una situación económica difícil. A fines de 1883, se trasladó a Arequipa para asumir la jefatura de redacción del diario La Bolsa, uno de los más importantes de la ciudad.

En 1884 publicó un libro de texto de selecciones de literatura para mujeres. En 1886 Matto se fue a vivir a Lima, donde se había establecido su hermano David, que había obtenido título de médico-cirujano. Matto se incorporó rápidamente a las principales instituciones culturales de la capital como el Ateneo de Lima y el Círculo Literario, al que asistía Manuel González Prada, quien influyó profundamente en la obra de Matto. Continuó escribiendo artículos y narraciones, y en 1889 asumió la dirección de El Perú Ilustrado, la revista literaria más importante de Lima en su época. En ese mismo año, publicó su primera novela, Aves sin nido, obra que casi inmediatamente logró mucha notoriedad debido a la denuncia de la corrupción nacional y el abuso de la Iglesia.

En El Perú Ilustrado, Matto publicó la obra de muchos escritores importantes como Rubén Darío y Manuel González Prada. Sin embargo, el 23 de agosto de 1890, El Perú Ilustrado publicó (sin autorización de Matto, según aclaró posteriormente, pues ese día había estado enferma) “Magdala”, un cuento basado en la vida de Cristo, escrito por el brasileño Henrique Maximiano Coelho Netto, que enfureció a muchos lectores quienes opinaron que se había difamado a Cristo pues se decía que sentía una atracción sexual por María Magdalena. Es por esto que el arzobispo de Lima excomulgó a la autora.

Matto renunció a su cargo de editora y directora de El Perú Ilustrado. En 1891 publicó su segunda novela índole y decidida a independizarse tras su accidentado paso por El Perú Ilustrado, en febrero de 1892 fundó con sus hermanos su propia imprenta, La Equitativa, que publicaba el periódico bisemanal Los Andes (sólo duró un año) desde el cual Clorinda Matto de Turner defendió abiertamente al gobierno del general Andrés A. Cáceres. En 1893 publicó su tercera novela, Herencia, con su imprenta. El 17 de marzo de 1895 tropas rebeldes al mando de Nicolás de Piérola entraron en la capital peruana y combatieron con las fuerzas gobiernistas. Los rebeldes saquearon la casa que Matto compartía con su hermano David. Para entonces el presidente Cáceres había sido derrotado y la imprenta La Equitativa había sido saqueada e inutilizadas sus máquinas. Matto vivió duros momentos y en 1895 tuvo que huir a Chile, posteriormente a Buenos Aires, donde fijó su residencia.

En Argentina, dio clases en la Escuela Comercial de Mujeres y la Escuela Normal de Profesoras, tradujo libros del Nuevo Testamento al quechua para uso de misionarios y evangelistas, y continuó escribiendo artículos para diversas publicaciones. Colaboró en diarios porteños como La Nación, La Prensa, La Razón y El Tiempo y en varias revistas distinguidas. Fundó y editó El Búcaro Americano, revista general con interés especial en temas sociales y literarios que apareció desde 1896 hasta 1909.

En 1908 Matto recorrió gran parte de Europa y escribió un diario de las impresiones de su viaje por Italia, donde tuvo audiencia con el Papa, Suiza, Alemania, Inglaterra, Francia y España, país donde dictó conferencias sobre Argentina y Perú. A finales de ese mismo año regresó a Buenos Aires y cayó enferma. El 25 de octubre de 1909  murió de pulmonía.

Años más tarde, en 1924, una resolución legislativa del Congreso peruano dispuso la repatriación de los restos de la escritora.

3.2. Actividad periodística

        3.2.1 Etapas de su producción periodística:

La recepción de la obra periodística de Matto implicó, por un lado, su ingreso al ámbito de la política y, por otro, la expresión de sus ideas a través del soporte de la prensa.

Para Ana María Portugal (1999) cuatro son los momentos en la trayectoria de Matto como periodista. El primero es la aparición de El Recreo (1876), un semanario de «literatura, artes y ciencias», que estaba destinado, según su directora, a «despertar de la inacción las facultades del bello sexo cusqueño».

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