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Como son los Bodes comunicativos


Enviado por   •  27 de Enero de 2016  •  Ensayo  •  1.905 Palabras (8 Páginas)  •  251 Visitas

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 Introducción

Los estudios culturales  y la critica cultural representarían dos nuevas prácticas que participan de esta misma búsqueda de transversalidad tanto en el rediseño de las fronteras del conocimiento de los estudios culturales y como en las rearticulaciones criticas del discurso teórico. Tanto el estudio y la critica cultural consiste en un modo de hacer, una forma de actuar, una estrategia de intervención teórico-discursiva que utiliza instrumentos críticos en función a la coyuntura de signos que se propone analizar y desmontar, a esta crítica cultural le interesa tomar partido a favor de las significaciones anti hegemónicas, no en la centrales, por lo tanto que se emergen en la pugnan con la tradición oficial o  la normativa institucional.

La abolición de la distinción jerárquica entre cultura popular y alta cultura que practican los estudios culturales ha significado el ingreso al campo del análisis de la cultura de múltiples artefactos que reivindican los mismos derechos a ser tratados como objetos de desciframiento crítico que el arte y la literatura. La celebración de lo “popular” ha liberado el ingreso a la academia de todo un rango de prácticas expresivas y comunicativas que forman parte del cotidiano (Culturas suburbanas, géneros audiovisuales, modas y estilos de vida, etc.) y circulan por los medios masivos de la globalización cultural.

Por ende el presente trabajo de investigación tiene el objeto de presentar al graffiti como un medio de expresión y publicidad política en un ambiente, por lo tanto se plantea ¿Cómo se entiende el grafiti en Latinoamérica: solo como corriente de arte urbana o como mensaje politizado? En América Latina los graffitis que proliferaron en las ciudades en los años sesenta y setenta tenían un carácter eminentemente político e ideológico, a diferencia de aquellos que se realizaron durante los ochenta y noventa, los cuales eran más bien de corte expresivo simbólico.

Como sostiene Alejandra Sandoval, “en el graffiti es posible identificar discursos de sujetos individuales o colectivos, que escriben desde un lugar de enunciación y desde una condición social particular, lo que tiene como consecuencia que su impacto tenga diversos alcances en cuestiones de identidades e intereses diversos o particulares”. El graffiti siempre remite a una dimensión de conflicto, de lucha o de rebeldía contra el orden urbano que va más allá de la literalidad de los mensajes o de la motivación de quien o quienes lo realizan.  

Defender este activismo de las prácticas en “cultura y poder” como un modo de hacer estudios culturales en América Latina, la cultura como un campo de lucha y resistencia simbólicas en el que se enfrentan lo hegemónico y lo contestatario; la cultura como un instrumento de ciudadanía, que permite diseñar las “políticas de identidad” y de “representación” destinadas y el graffiti  se ha utilizado como medio para expresar inconformidad, amor, arte o simplemente vandalismo. A pesar de los diferentes mensajes que pueda contener tiene un aspecto común: se busca que sea visto por la gente. No es una forma privada ni directa de establecer comunicación. Los receptores del mensaje son todos aquellos que lo vean y esto lo vuelve público. El objetivo de este trabajo es mostrar sólo una parte de estos mensajes en un contexto muy particular políticas de América Latina en los años 80.

Desarrollo.

  1. El grafiti y la hegemonía capitalista en Latinoamérica.

Según la historia moderna el graffiti se remonta hacia los años sesenta en la ciudad de Nueva York. El graffiti ha creado dos clases de miradas: la mirada del opositor, del que se niega a aceptar un Arte tan ordinario y popular, pues acabando con lo que tenemos no se arregla nada; y está también la mirada del cómplice, de aquel que se satisface al observar lo que otro fue capaz de hacer a partir de un pensamiento que comparte plenamente.

Siempre se han intentado dar explicaciones desde el punto de vista psicológico de por qué se hace graffiti. Numerosos han sido los intentos de sociólogos, psicólogos y demás profesionales del sector del estudio del comportamiento humano que han intentado dar explicación al fenómeno en artículos periodísticos, reportajes, programas de televisión y radio... Con un resultado en general equivocado o en su defecto muy superficial.

Pero los graffitis a los que se refiere este artículo no son esos sino son aquellos graffitis que surgieron como represalia en contra de dictaduras o malos gobiernos que eran ocasionados por la hegemonía capitalista, que presentaba un modelo de neoliberal como es el ejemplo de Chile y Argentina, países que fueron absorbidos en este sistema, pero que el grafiti propuso una cierta oposición al régimen generando fisuras comunicativas, las cuales se han seguido manteniendo hasta la actualidad y que han servido para que los pueblos  formen nuevas contraposiciones hacia las burguesías. Además se podría recalcar que la existencia del grafiti también ha servido para que se aparezcan bordes comunicativos tales como los que están al servicio del poder y los que están en su contra.

Dicho lo anterior, se puede sostener que la sociedad de América Latina se inclina manifiestamente por la variante del grafiti escrito. Esto se debe a que además de ser una creación más barata(a diferencia de las manifestaciones visuales de los países ricos), la prensa legal escrita estaba cooptada al servicio del poder. Durante el siglo XX en América Latina se utilizó el grafiti en cada proceso electoral y cada decisión gubernamental. De este modo, las paredes latinoamericanas han representado un lugar para que la sociedad lleve a cabo una catarsis colectiva, sin importar si el autor fue uno o todos, al ser cómplices de éste.

Como protesta con carácter político, se efectúa en el momento que los espacios son abordados para hacer una denuncia social, una crítica a las instituciones del Estado, pero además pretende difundirse entre la población para crear una conciencia ciudadana sobre un problema en particular. Combinando el arte, con la sátira, la apropiación del espacio con ese fin, es usado por movimientos sociales de gran importancia en el pasado y en la actualidad; la apropiación de las paredes para expresarse es una forma de comunicación alternativa ante el monopolio de otros medios existentes como los audiovisuales.

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