EL INDIVIDUO Y LAS ORGANIZACIONES

LAS PERSONAS Y LAS ORGANIZACIONES

Las personas y las organizaciones son inherentes, existe una dependencia basada en la satisfacción de objeticos. Ya que para el individuo es primordial satisfacer sus necesidades y expectativas de desarrollo, la organización debe contribuir al desarrollo de los individuos que forman parte de esta, basándose en aportaciones (algunas obligatorias) de carácter económico, desarrollo profesional, crecimiento laboral, brindar bienestar como miembro activo dentro de la organización pero que a su vez dicho bienestar repercuta de manera positiva en él, dentro de su rol como individuo fuera de la organización. De igual manera la estadía del individuo en la organización depende de varios factores internos, ya que desde su reclutamiento la entidad debe iniciar por integrar a aquellas personas que reúnan ciertas características, cualidades, requisitos y todos aquellos aspectos que la propia organización requiere dentro de sí para cada uno de sus puestos, que al igual que un engrane para una reloj, esta pieza siempre deberá ser adecuada, justo a la medida para que el objeto funcione. De principio, una organización opta por objetivos para dar continuidad al porque se su existencia, y el recurso humano siempre vendrá a aportar desde distintos enfoques un factor primordial para que la organización ponga en marcha sus actividades, y a su vez las actividades tomaran el rumbo que los objetivos ya establecidos dicten.

Desde luego cualquier organización impone reglas, políticas o normas para todo aquel individuo que forme parte de esta, mientras una personas forme parte de la empresa en su rol de trabajador la misma personas deberá sujetarse a una serie de reglas, políticas o normas que regirán (por decirlo de alguna manera) sus actividades y su propia estadía en la empresa aparte de esto, existe sus obligaciones y las actividades que debe realizar dentro de su puesto de trabajo.

Haciendo énfasis en el párrafo anterior, es en este punto donde la organización entra en conflicto con el individuo, ya que no siempre la relación entre ambas partes es cien por ciento de cooperación y satisfactoria, muchas veces la relación puede tornarse tensa y conflictiva debido a que los objetivos de la organización no compaginan con los objetivos personales del individuo. La organización es por demás la que impone sus objetivos sobre el individuo, ya que esta se vale de las cualidades, destrezas, habilidades, que posee la persona, para encaminar sus objetivos mediante las actividades que la persona deberá realizar en cada puesto y su vez en cada área de la propia empresa. Esto en un corto o largo plazo puede resultar frustrante para las personas, sobre todo cuando sus actividades como trabajador se tornas monótonas o rutinarias, extenuantes o sofocantes, la organización no puede darse el lujo de dejar de exigir resultados en tiempo y forma a sus trabajadores, esto podría resultar contraproducente

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