El Bullying

Tema: El bullying

Título: La violencia como parte de la construcción social

La historia de la humanidad está marcada con expresiones violentas; guerras, asesinatos, masacres, genocidios, destrucción. Innegablemente estos acontecimientos pertenecen a una memoria colectiva que nos ha caracterizado desde el inicio de los tiempos, una memoria que sigue siendo difícil de asimilar y concebir. Muertes masivas y catástrofes de dimensiones globales, pero, ¿qué pasa con la violencia que no es tan evidente con la que vivimos a diario?, ¿acaso este tipo de violencia no marca generaciones?

La violencia en nuestras vidas actuales es parte de la realidad que construye la cotidianidad, hemos llegado a tolerar altos y diversos tipos de violencia, así como hemos permitido que la violencia penetre en nuestros hogares, nuestras escuelas, nuestras lecturas, nuestros pensamientos y nuestros actos.

“La palabra violencia aparece a principios del siglo XIII; deriva del latín vis, que significa fuerza, vigor, y caracteriza a un ser humano de carácter iracundo y brutal. También define una relación de fuerza destinada a someter o a obligar a otros.” (Muchembled, 2010)

De acuerdo con Sanmartín Esplugues (2006), la violencia admite distintas clasificaciones: según el tipo de víctima, el tipo de agresor, el daño causado y el contexto donde se produce.

Fijare el contexto de la violencia desarrollado en las escuelas. Empezaré por definir la educación, tomando como referencia a Emile Durkheim, quien desde su postura funcionalista puntualiza que la educación es un hecho social, siendo éste un proceso de adaptación a normas, valores; así como la formación de hábitos y disposiciones básicas que determinarán la forma de ser y de actuar de los individuos en y para la sociedad, es transmitida de generación en generación asegurando la reproducción de patrones culturales para cumplir y satisfacer necesidades sociales.

La escuela junto con la familia son las instituciones principalmente encargadas de vigilar que el proceso educativo se desarrolle logrando sus objetivos y ambiciones. Sin embargo, ¿es la violencia un patrón de reproducción cultural?, históricamente nos ha acompañado en el desarrollo de la humanidad, aunque el fenómeno de la violencia sea un acto brutal, hemos vivido con él y por ende, sigue reproduciéndose.

La violencia ha ido evolucionando de la mano con la ciencia y la tecnología, para prueba de esto sólo hace falta ver los nuevos avances en las bombas nucleares, la contaminación atmosférica; la destrucción ecológica; lluvia radioactiva, por mencionar muy pocos. Los problemas originados por la tecnología son la consecuencia de la incapacidad de predecir o valorar sus posibles consecuencias negativas.

La violencia que tiene como escenario el sistema escolar, no es un fenómeno nuevo, ya que Dan Olweus, de la Universidad de Bergen (Noruega), desde los años 70’ había puesto atención en suicidios de adolescentes que previamente habían sufrido agresiones tanto físicas como emocionales por parte de sus compañeros de la escuela. Y fue hasta 1993 que este psicólogo escandinavo dio el nombre de bullying a este acontecimiento.

La violencia o acoso escolar es un fenómeno, por lo tanto, conocido por generaciones anteriores. “La forma de mirar y tipificar –todo tipo de violencia- ha cambiado con el paso del tiempo, lo que ha implicado que situaciones que antes se consideraban aceptables ya no lo sean actualmente; en parte también, porque esos fenómenos se han incrementado.” (Sanmartín Esplugues, 2006).

El bullying es un acto que implica la violencia física pero no necesariamente, puede ser verbal e indirecta. “Se dirige siempre hacia una persona (víctima). Asimismo, también se suele entender como una forma de agresión caracterizada por dos aspectos en particular: desequilibrio de poder y repetición.” (Smith, sf). “Hace referencia a un comportamiento repetitivo de hostigamiento e intimidación (agresor), cuyas consecuencias

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