“El bajo rendimiento escolar y los problemas de conducta”

INDICE

Introducción        2

Situación escolar        3

Marco teórico        4

Análisis        6

Reflexiones finales        8

Bibliografía……………………………………………………………….9

Introducción

En la actualidad existen varias situaciones escolares importantes, una de las problemáticas principales, a nuestro criterio, y que abordaremos en este trabajo es “El bajo rendimiento escolar y los problemas de conducta” que mayormente llevan al Fracaso escolar.

Son muchos los niños que presentan problemas de rendimiento escolar y de conducta, y que lamentablemente no son tratados. Esto no sólo genera problemas en el niño sino también en los docentes que muchas veces no saben cómo enfrentarlo. Al reconocer que ya no pueden manejar a un alumno, sienten como un propio fracaso en su calidad de docente o culpan a la familia, entrando en un círculo vicioso que se orienta en buscar responsables, pero no en buscar la solución a ese problema específico.

El desempeño escolar depende en gran medida del ambiente socio-familiar que rodea al alumno. Cuando un niño repite, no sólo es un fracaso del niño, sino de  los padres y de todo el sistema educacional, por lo tanto, estos tres sistemas están fallando y para poder resolverlos todos deberían intervenir.

La falta de recursos, falta de preparación por parte de los docentes, potencian el problema y son proporcionados por las instituciones (escuelas, colegios)

Las consecuencias de los problemas en el desempeño escolar y de la deserción pueden manifestarse de muchas maneras, por ejemplo: salones vacíos, vicios, frustraciones, desintegración en la familia, falta de motivación, alteraciones en la conducta y alteraciones emocionales, agresividad producto de la frustración, disminución de la autoestima, entre otras, y finalmente la deserción.

Situación escolar  

Un ejemplo de esta situación escolar que da cuenta a esta problemática es el siguiente:

A un alumno de segundo grado la docente siempre tiene que llamarle la atención, ya que el niño desatiende en las clases, se niega constantemente a escribir y a realizar las actividades propuestas por la misma.

Molesta a sus compañeros y solo trabaja cuando alguna consigna le agrada o le  llama la atención, también se ausenta por varios días y luego retoma su asistencia a clases pero sin ningún justificativo, por tal motivo siempre se encuentra atrasado con los temas.

La docente trata de mantenerlo cerca para poder controlarlo y de esta manera lograr que por lo menos pueda entender algunas de las actividades desarrolladas en clases. Muy pocas veces trae las tareas realizadas, porque casi nunca las copia y siempre termina completando el cuaderno la docente y mandando notas sobre esta situación constantemente a la mama, ya que los padres se encuentran separados por problemas de violencia.

La madre del niño evita hablar con la docente y manda a retirar a su hijo con el abuelo, muy rara vez contesta las notas y cuando lo hace siempre plantea que el niño tiene problemas por la situación familiar y a veces culpa a la docente de que el niño tenga ese comportamiento, la misma también se niega a que el niño acceda a un tratamiento psicológico.

Desde el primer día de las observaciones que realizamos en el Taller de práctica notamos como este niño desde que ingreso al aula se negó a sacar sus útiles de la mochila, luego de tanto insistir, la docente logro que finalmente sacara el cuaderno, pero el mismo también se negó a escribir. Después de tanto llamarle la atención y de tener que interrumpir varias veces la clase para lograr que se callara y dejara de jugar, la docente decidió escribir una nota a la madre, fue entonces que este niño puso un poco más de atención y realizo la última actividad del día coloreando un dibujo de una fotocopia, pero más tarde se negó nuevamente a escribir la tarea.

Marco teórico

Entendemos por fracaso escolar que el niño no logra alcanzar el nivel de escolaridad correspondiente, de acuerdo a su edad cronológica, que es influenciado por diversas causas como la desintegración del núcleo familiar, falta de interés, motivación escolar, problemas socioeconómicos y el entorno en que se desenvuelve el niño. Por otro lado el fracaso escolar no es el fracaso de la escuela si no una consecuencia o un reflejo del fracaso psicológico y social que viven estos niños.

La década de 1950 fue el momento de mayor auge de las interpretaciones de fracaso escolar, fue interpretado como patología, como enfermedad, donde se media a través de los test de inteligencia.

La primera explicación del fracaso escolar fue de índole individual donde se desconocía el contexto sociocultural, familiar, escolar y era responsabilidad individual del alumno, se los rotulaban como enfermos especiales y es así que surge la noción de retardo mental leve y el prefijo dis en las palabras que señalan dificultad como: dis-lexia, dis-ortografía, dis-grafía, etc., y el prefijo a, para indicar ausencia como por ejemplo: alexia, agrafia, etc.

El bajo rendimiento escolar constituye un problema; no es solo aprobar o reprobar,  no depende únicamente del esfuerzo del alumno o del trabajo del docente, es más complejo y en él que influyen también las capacidades intelectuales, limitaciones físicas, medio escolar, medio socio-cultural y económico y la familia.

Hablamos de fracaso cuando un niño no es capaz de alcanzar el nivel de rendimiento medio esperado para su edad y nivel pedagógico. Se entiende entonces por fracaso escolar el hecho de no lograr el título académico mínimo obligatorio de un sistema educativo.

El fracaso escolar se encuentra vinculado también con las desigualdades socioculturales, desventajas lingüísticas, intelectuales, culturales, o socioeconómicas, según Perrenoud: las diferencias entre los alumnos, por si solas, no explican nada, no se transforman en desigualdades de éxito escolar, sino a través del peculiar funcionamiento del sistema de enseñanza.

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