Ensayo Pedagogia De La Autonomia

ENSAYO

PEDAGOGÍA DE LA AUTONOMÍA

PAULO FREIRE

Carmen Jenny Vedia Ayllón Fis-Qmc

A un estudiante se le informa la nota de bimestre: 55, “55… ¿por qué? Se pregunta, ahora la calificación es sobre 100, en el antiguo sistema era sobre 70 y sus notas no habían bajado de 65, ………….se acerca a la maestra e intenta preguntar, entonces la maestra le dice que en ese curso muchos han copiado en el examen de autoevaluación y ante la insistencia por información le increpa “¿sabe con quién está hablando?”.

En ese momento termina el reclamo, pero inicia la frustración, el pensar de que cuando no se puede responder con argumentos la fuerza, la imposición es la respuesta, seguramente cuando le toque estar de ése lado del poder podrá imponer sin responder y hacerle a otro sentir lo que él está sintiendo.

Eso no es disciplina sino autoritarismo, ya que la disciplina según Freire es el resultado de la armonía entre autoridad y libertad, claramente el no responder a una cuestión que le interesa al estudiante demuestra que no tiene capacidad para explicar sus acciones, o que se siente una diosa a quien “no debe”cuestionarse nada porque simplemente es perfecta.

“El clima de quien piensa acertadamente es el de quien busca seriamente la seguridad en la argumentación, es el de quien al discordar con su oponente, no tiene por qué alimentar contra él o contra ella una rabia desmedida, a veces mayor que la propia razón de la discordancia.” Freire, (Pedagogía de la Autonomía pag. 17)

Una maestra que actúa así está alimentando a la persona (estudiante) con frustración e ira contra un mundo injusto, el que le presenta ella, el estudiante de todos modos está aprendiendo pero no a construir en consenso sino a humillarse y tragarse su necesidad de explicación e incluso justicia, porque no sabe si es o no justa su nota, sólo aprende que no tiene derecho a preguntar, que debe ser sumiso, acaso ella tomará represalias si insistiese, después de todo es sus manos está el que apruebe o no; pero además aprende que él mismo puede hacer eso si se encuentra en una situación de poder, es más que es parte de la vida hacerlo, es natural que quien detente poder de alguna forma debe atropellar a otro y hacerle “valorar su trabajo”, hacerle sentir que está bajo su poder.

Entender que no hay docencia sin discencia porque el que enseña aprende a enseñar y quien aprende enseña al aprender, entender lo profundo que significa ésta sola respuesta, tal vez haría reflexionar a la maestra y podría permitirse aprender en la cuestión, analizar juntos ese resultado, informar que implica tomar responsabilidad de lo que se hace y si hay equívoco reconocer y enmendar el error o si no hay error permitir superar lo equivocado en el desempeño del estudiante en el bimestre es un actuar con altura y ética. No es la función del docente aplazar, no significa tener siempre la razón sino ayudar a desarrollar sus propios pensamientos y esa curiosidad por conocer cómo es que sale su nota no debe ser anulada sino ser usada para enseñar con ejemplo el actuar con justicia. “Enseñar exige la corporización de las palabras en el ejemplo”(página 17) nos dice Freire, y es una verdad indiscutible, no se puede atropellar el derecho de un estudiante y luego exigirle que actúe con justicia con sus compañeros o con la misma maestra o maestro, o con su comunidad. Se debe actuar en concordancia con lo que se dice y enseña.

“El profesor que realmente enseña, es decir, que trabaja los contenidos en el marco del rigor del pensar acertado, niega por falsa, la fórmula farisaica, del “haga lo que mando y no lo que hago” Freire, (Pedagogía de la Autonomía pag. 17)

Por otro lado ya que “Enseñar exige conciencia de inacabamiento.- el inacabamiento del ser es propio de su experiencia vital.

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