Esposas Por Cataloga

Esposas por catalogo

Hace cinco años en la ciudad de tángalo, filipinas; vivió una joven de tan solo dieciocho años de edad, llamada Marites. Ella, como la mayoría de las personas de su localidad vivía en la pobreza extrema. Marites quiso acabar con la situación económica de su familia, llevándola al borde del colapso.

Cierto día Marites conoció a un hombre llamado Bing, quien dirigía un sitio web, donde exhibían a las mujeres, como si fueran un par de zapatos para vender a los hombres de occidente.

Bing le prometió el cielo y la tierra, le decía que su vida cambiaria cuando se casara con un hombre occidental y ella al estar bajo esta presión y la de su familia acepto sin medir las consecuencias.

Bing cuenta que en su agencia acuden hombres adinerados, solteros, pero de una edad bastante avanzada. –“ellos solo quieren una mujer con quien puedan compartir el resto de su vida siempre y cuando sean menores que ellos”- afirmo, - no hay mejor lugar que filipinas, puesto que las mujeres de este país son muy obedientes a sus esposos y saben cuál es su lugar en el mundo. “Detrás de ellos”, su rol es cuidar del hogar y de su esposo- Agrego.

Estas mujeres con el deseo de salir de esta situación, dan su consentimiento para ser vendidas como objetos sin medir las consecuencias, las cuales son bastantes en estos matrimonios arreglados.

Tristemente a estas mujeres no les dicen como es su esposo físicamente, lo único que saben es que posiblemente las saque de la pobreza, tampoco saben dónde vivirán -creyendo ellas que será en una mansión- es decir están a punto de contraer un matrimonio a ciegas.

Marites con las ansias de salir rápido de su país natal, decide firmemente aceptar sin importarle a los peligros que se enfrenta, dejando todo atrás su familia, amigos y de más personas; su futuro esposo paga la suma de cincuenta mil dólares, suma que es repartida entre sus familiares y la agencia de esposas.

Después de un largo viaje, Marites llega a su futuro hogar en Londres, Inglaterra; sin saber absolutamente nada del país y mucho menos de hombre con quien se casara. Cuando llega a la casa de Brush, el comprador, se lleva una gran decepción primeramente por que el hogar donde viviría es una pequeña cabaña y segundo porque su futuro marido es un anciano de sesenta años de edad, ella queda atónita al darse cuenta de su futuro incierto con un total desconocido, pero ya no hay vuelta atrás, porque ella tiene una gran deuda con este hombre.

Brush al ver a su hermosa y joven mujer se ve muy feliz y le enseña en lugar donde vivirán. Después de una semana de ella acoplarse al ambiente nuevo donde se encuentra, esta pareja dispareja, contraen matrimonio.

Marites melancólica y enfadada consigo misma intenta suicidarse, tomándose una serie de pastilla revuelta. Brush al darse cuenta de este incidente, habla seriamente con ella y la amenaza diciéndolo que si vuelve a intentarlo el enviaría a que mataran a su familia.

Triste y asustada decide no intentarlo más por guardar la vida de su adorada familia por la cual se está sacrificando tanto. Aunque Marites es aún una niña, las circunstancias en las que se encuentra la obligan a comportarse como una mujer madura.

A los dos meses de casados, Marites queda embarazada; el muy feliz por la buena noticia pues nunca había tenido hijos a pesar de su edad. Durante

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