HEPATITIS C Perfil serológico de la hepatitis C

HEPATITIS C

Es la más voluminosa de las vísceras y una de las más importantes por su actividad metabólica: sintetisa proteínas, elimina toxinas, almacena vitaminas y glucógeno, secreta bilis, entre otras.

[pic 1][pic 2]

La hepatitis es una inflamación del hígado, es causada por distintos tipos de virus dependiendo su motivo de contagio:

[pic 3]

"existen hepatitis tóxicas y hepatitis causadas por virus no citopatico o bacterias". La hepatitis c Es una enfermedad viral que lleva a hinchazón (inflamación) del hígado. se produce por la infección por el virus de la hepatitis C (VHC).  La exposición puede ocurrir:

Después de una punción con aguja (tatuajes, acupuntura, drogas, perforaciones) o una lesión con objetos cortopunzantes.

Contacto con la sangre infectada, en cortaduras en la piel, transfusiones, ojos o en boca.

relaciones sexuales sin protección con una persona que padece hepatitis C.

de madre infectada a hijo durante el parto

trasplante de órganos de un donante con hepatitis C.

Comparten elementos de uso personal, como cepillos de dientes o máquinas de afeitar, con alguien que tiene hepatitis C.

esterilización inadecuada de equipo médico

[pic 4]

Fisiopatología de la infección por el virus de la hepatitis C:

En el caso de la hepatitis C y su fisiopatología, en principio se relaciona por la infección de un virus no citopático. Ahora bien el daño hepático producido se da por la respuesta inmunitaria de las células. Al ser reconocidas Las proteínas del HCV por los linfocitos T citotóxicos y cooperadores, se producen citocinas proinflamatorias, las cuales determinarán una inflamación crónica y se podrá desarrollar una neoplasia maligna (producen destrucción local, destrucción en sitios alejados y trastornos metabólicos generales. Provocan la muerte si no son tratadas adecuadamente y en el momento oportuno. Las neoplasias malignas reciben en conjunto el nombre de cáncer).  Se puede presentar ictericia y posible riesgo de falla hepática fulminante.

Diagnostico y tratamiento:

Los siguientes exámenes se hacen para identificar y monitorear el daño hepático a causa de la hepatitis C:

Nivel de albúmina

Pruebas de la función hepática

Tiempo de protrombina

Biopsia del hígado

Tratamiento:

si en los primeros cuatro meses tras la infección por hepatitis C aguda, se inicia un tratamiento de 24 semanas con ranitidinaInterferón Alfa-2a, para aumentar las defensas del propio cuerpo, (la llamada inmunoterapia), la inflamación aguda del hígado es casi siempre curable.

En la hepatitis C crónica, se usa normalmente el peginterferon ALFA 2a, en combinación con agentes antivirales como ribavirina. Para aumentar la respuesta permanente al tratamiento en más del 50% de los casos.

      Dependiendo del virus causante, las posibilidades de curación son mayores: en la infección con el genotipo 2 ó 3 del virus se cura en más del 80% de los casos, mientras que los genotipos 1a y 1b que son los más frecuentes, tienen peor respuesta al tratamiento.

Efectos secundarios: la mayoría incluidos en lo que se llama síndrome gripal. Al cabo de los meses provoca pérdida de masa muscular. Todos estos síntomas se revierten al finalizar el tratamiento.

Uno de los efectos secundarios más importantes de la ribavirina (actúa como antiviral,  inhibe el crecimiento de virus tanto de ADN como de ARN) son las anomalías congénitas en los hijos de un paciente recientemente tratado. Por esta razón los médicos aconsejan no engendrar sino hasta 6 meses después de finalizado el tratamiento, y la Asociación Española de Enfermos de Hepatitis C sugiere alargar este periodo a un año.  Además de el interferón (interferir en la replicación de los virus en las células hospedadoras).  Otro efecto adverso frecuente es la anemia, que en muchos pacientes obliga a administrar eritropoyetina (hormona glicoproteica que estimula la formación de eritrocitos y es producida principalmente por el riñón).

[pic 5]

Periodo de incubación

En la hepatitis C el periodo de incubación es de 2 a 24 semanas (el tiempo desde la infección por el virus de la hepatitis C hasta el inicio de los síntomas).

La hepatitis C generalmente no muestra síntomas, o muestra pocos síntomas evidentes (por ejemplo, similares a la gripe). Sólo el 25% de los infectados de hepatitis C aguda muestra signos de la enfermedad, a menudo síntomas leves; Los síntomas agudos de la hepatitis C son los siguientes:

Fatiga

Decaimiento

Dolor de cabeza

Pérdida del apetito

Pérdida de peso

Dolor muscular y articular

Sensación de presión en la parte superior derecha del abdomen

Fiebre

En la fase aguda de la hepatitis C, son muy raros los síntomas típicos de ictericia, como orina oscura, color claro de las deposiciones y coloración amarillenta de la piel o los ojos.

La infección aguda es por lo general asintomática, pero la infección crónica puede producir lesión en el hígado y a la larga originar cirrosis. En algunos casos, los pacientes con cirrosis también presentan insuficiencia hepática, cáncer de hígado y varices esofágicas (dilataciones venosas patológicas en la submucosa del esófago) potencialmente fatales, hipertensión portal, ascitis, coagulopatía, varices esofágicas y gástricas, ictericia y encefalopatía hepática

...