Nutrición caballos de ocio

Nutrición de caballos de ocio

Introducción

El diseño de raciones basadas en forrajes secos y concentrados para caballos de ocio alojados en establos, sin acceso a pastos o limitado, tiene que satisfacer las necesidades nutritivas diarias, garantizar la seguridad digestiva, sin dejar de lado el aspecto económico. Para esto es vital el conocimiento de las necesidades nutritivas, del valor nutricional de los alimentos y raciones, de la digestión, de las limitaciones de consumo e interrelaciones entre los diferentes nutrientes.

En Costa Rica la actividad referente a caballos se centra principalmente en caballos de ocio, ya sea para topes, cabalgatas, etc.; es decir caballos con poca actividad física. De ahí la importancia de conocer sobre la nutrición de los caballos de ocio para poder satisfacer sus necesidades nutricionales de una manera adecuada.

Consumo de materia seca

El consumo de materia seca varía según el estado fisiológico y peso del caballo, sin embargo la ingesta voluntaria no es bien conocida aun. Dado esto, se recomienda respetar las relaciones definidas entre el aporte de materia seca y de energía, llamadas coeficiente de volumen, para componer las raciones de de los caballos con el fin de no sobrepasar la capacidad del tubo digestivo y calcular la inclusión de los diferentes nutrientes (Martínez 2007).

Los consumos medios de materia seca para los diferentes estados fisiológicos de caballos de 500 kg de peso vivo (PV) son (Martínez 2007):

• Yeguas gestantes: 9,1 kg/d
• Yeguas en lactancia: 11 kg/d
• Potros: 6,3 kg/d
• Caballos sometidos a ejercicio ligero: 9,9 kg/d

Según lo anterior, el consumo se encuentra entre un rango de 2 a 2,5%  del PV en yeguas lactantes y potros, mientras que para yeguas gestantes y caballos es de 1,5 a 2% del PV (Martínez 2007).

La relación de consumo forraje/ concentrado durante los últimos meses de gestación se recomienda 70/30 o 80/20, mientras que durante lactancia se recomienda que se 40/60 o 50/50 (Acero 2007).

En cuanto al reparto de la ración diaria, se recomienda que se divida en dos o tres partes, preferiblemente que el forraje se suministre antes que el concentrado (Acero 2007, Martínez 2007).

Consumo de forrajes

El consumo de forraje para garantizar la seguridad digestiva de las raciones, el consumo mínimo de forraje debe ser de 1 kg/100 kg PV/d, y se recomienda que en ningún caso puede ser inferior a 0,5 kg/100 kg PV/d (Martínez 2008).

Considerando un consumo mínimo de 1 kg/100 kg PV/d, y los valores de ingesta de materia seca anteriormente señalados, el contenido en forraje de las raciones podrá oscilar de 50 a 67% en yeguas gestantes y caballos, y de 40 a 50% en yeguas lactantes y potros (Martínez 2008).

Consumo de concentrado

La alimentación de caballos con concentrados van en cantidades comprendidas entre 8 y 12,5 kg/d, esto se traduce en 1,5 a 2,4% PV, en función del contenido de fibra bruta (de 2,9 a 13,7%) y con acceso exclusivamente a paja de cereales de la cama es satisfactoria desde el punto de vista metabólico y fisiológico (Martínez 2008).

Energía

Los aportes y las necesidades de energía de los caballos se expresan habitualmente en Energía Digestible (ED) o en Energía Neta (EN). Las necesidades de energía según el sistema del NRC 1989, para yeguas gestantes de 500 kg 11º mes, son de 1,97 a 2,62 Mcal ED/ kg MS. Las yeguas en lactancia de 500 kg PV, 15 kg de leche/d necesitan alrededor de 2,26 a 2,83 Mcal ED/ kg MS. Para los potros en crecimiento 325 kg PV 0,65 kg/d los requerimientos de energía son de  de 2,63 a 3,27 Mcal ED/ kg MS. Y por último los caballos de silla 500 kg PV 2 horas de ejercicio ligero requieren de 2,05 a 2,73 Mcal ED/ kg MS (Martínez 2007).

En el siguiente cuadro se especifica cómo se calculan las necesidades energéticas de los equinos según el sistema NRC 1989 (Acero 2007).

Cuadro I: Necesidades energéticas de los equinos según el sistema NRC 1989.

PV= Peso vivo en kg, GMD= ganancia media diaria (kg/dia), x= edad del potro en meses

Fuente: Acero (2007)

Proteína

Las necesidades y los aportes nitrogenados de los caballos pueden expresarse como PB según el NRC, 1989, como proteína digestible (PD) o como proteína digestible corregida por su capacidad de aportar aminoácidos (Materias nitrogenadas digestibles para caballos - MNDC- en el sistema INRA, 1990 (Martínez 2008).

Las necesidades de proteína según el sistema del NRC 1989, para yeguas gestantes de 500 kg 11º mes, son de 44-66 g de PB/Mcal. Las yeguas en lactancia de 500 kg PV, 15 kg de leche/d necesitan alrededor de 50-75 g de PB/Mcal . Para los potros en crecimiento 325 kg PV 0,65 kg/d los requerimientos de proteina son de  de 45-68 g de PB/Mcal. Y por último los caballos de silla 500 kg PV 2 horas de ejercicio ligero requieren de 40-60 g de PB/Mcal (Martínez 2007).

Cuadro II: Necesidades proteicas de los equinos según el sistema NRC 1989.

         1 potros de 8-12 meses con peso de 500 kg 2 caballos adultos de 500 kg

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