EMILIO SEGUNDO LIBRO

Segundo libro

EL DESCUBRIMIENTO DE LA INFANCIA

Rousseau en este segundo libro comienza hablando del lenguaje de los niños, que antes de saber hablar, todas las necesidades los expresan con llantos pero este cuando empiezan a hablar lloran menos porque sustituye un idioma por otro.

En la edad de la infancia se toman lecciones importantes esas lecciones que se adquieren por experiencia soportando dolores leves se aprende a soportar los fuertes. En esta etapa al que Rousseau lo llama segundo grado es donde empieza la vida individual, ya son capaces de desarrollar conocimientos que los hacen capaces de dirigirlos.

Tenemos la costumbre de querer sobre proteger a los niños y no dejamos que aprendan por sus experiencia y que quizás aprenderían mucho mejor por sí solos.

Empieza a mencionar como seria la vida de Emilio diciendo que no usara andadores ni canasta con rueda solo recibirá ayuda donde él no pueda para que adquiera experiencia por sí solo, en empedrados o los pajares, padecer es lo primero que debe aprender y lo que más necesitará saber. Quizás con frecuencia se lastime pero estará alegre en cambio si son muy protegidos y pocas veces se lastiman se sentirían frustrado y no le va a beneficiar esa actitud.

Rousseau considera la infancia la etapa de la alegría, cuestiona a los padres o maestros que castigan, amenazan y esclavizan a los niños considera a esta una educación inhumana sacrifica el tiempo presente, la edad de la alegría por querer prepararle a un futuro incierto haciéndolo miserables.

Unas de las ideas de Rousseau que influyo mucho en nuestra pedagogía, es que el niño es un ser, no un hombre pequeño, la infancia tiene su propia razón de ser, se justifica por si mismo, tiene su propia madurez y sus propias leyes. Querer entender a un niño con los moldes de un adulto seria atentar contra el orden de la naturaleza.

Educar a un niño sacrificando la felicidad presente no evitara los dolores de hombre en el futuro por ende es preciso dar a cada uno lo suyo (hombre- niño)y hacer por su felicidad todo lo que podamos.

La felicidad de la tierra se mide por la menor cantidad de males que sufren. “más feliz es aquel que sufre menos, más miserable es quien goza de menos placeres”. La infancia es débil e infeliz no por naturaleza, sino por el hombre, que quiere exigirle lo que está por encima de sus posibilidades naturales. El hombre verdaderamente libre quiere solo lo que puede hacer, y hace lo que le agrada.

Se debe hacer sentir al niño la dependencia y la necesidad de las cosas, que es propia de la naturaleza, no humilla, ni lesiona, ni genera vicios, se evitara que se sienta la dependencia de los hombres, que es propia de la sociedad.

Rousseau habla también de la flaqueza que provocan los padres con el exceso cariño que le dan, en vez de disminuirla lo aumentan, estos se da cuando los padres le exigen cosas que ni siquiera la propia naturaleza le exigía la propia naturaleza pone el orden en los procesos de educación como también para fortalecer el cuerpo y hacer que crezcan, los movimientos, son necesidades del niño, no se debe obligar al niño que se quede quieto, cuando quiera correr, ni a correr cuando quieran estar quieto, es la propia naturaleza que lo establece, solo tenemos que estar atentos a los que desean, sin poderlo ejecutar por sí solos. .

Insiste que, para vencer una negativa deben negarse a cualquier solicitud departe de los niños hechas con llantos pudiendo pedir con palabras, añade diciendo que a los hijos nada se le debe conseguir porque los pide sino porque los necesita y así también no debe hacer nada por obediencia sino por necesidad.

Rousseau pide que en esta edad, antes de la edad de la razón a tener cuidado con la entrada de los vicios o la semilla del error, por tanto prestar mucha atención a lo que hace, oye o ve, no hay maldad original en el corazón humano. Aclara que esto no quiere decir que no hará destrucciones o perdidas algunas por que el niño naturalmente va desarrollar su atolondramiento lo que quiere decir que si dejas en la libertad va ir descubriendo y sin malas intenciones pueden romper algún objeto frágil.

El cuarto de Emilio no estará adornado con tanto esmero porque solo estará en el pocos ratos pero Rousseau cree que él mismo lo ordenara que responsabilidad del adulto adornar con cosas que se pueden romper, perder o arruinar.

Rousseau muestra su desacuerdo con la máxima de Locke de que es preciso razonar con los niños. No están en edad de hacerlo; si pudieran razonar no tendrían la necesidad de ser educados. Basta con que sean consientes de sus limitaciones naturales y de su dependencia con el educador pero sin hacérselo notar directamente con mandatos y prohibiciones.

Considera la obra maestra de la educación aquello que la propia naturaleza fija dejando al niño ser niño porque la infancia tiene su modo de ver de sentir y de pensar que son propias de ellos por lo tanto hay que preparar al niño físicamente, desarrollar los sentidos dejar a la naturaleza que le den experiencias hasta alcanzar la edad de la razón para enseñarle la educación intelectual. Si el fin de la educación es formar un hombre racional, no podríamos sin antes fortalecer otras necesidades que la naturaleza exige, de lo contrario sería por el fin y querer que la obra sea instrumento. Esto sería lo que hoy la sicología nos dice que hay que quemar las etapas, este término se relaciona con la madurez precoz y sobre adaptación que se observa en ciertos casos.

Critica a los hombres que están a cargo de la educación y que no hayan imaginado otros instrumentos para conducirlos que emulación, los celos, la envidia, la vanidad, ansias, y miedos todos los sentimientos más peligrosos de corromper el alma y planta un vicio en el interior de su corazón, la mejor receta para él es la libertad bien aplicada donde no se le da lecciones verbales de ningún especie solamente dirigirla sin que se den cuenta para adquirir experiencias ni le impongas ningún castigo, porque no sabe que es comer culpa por que los movimientos primarios de la naturaleza no hay maldad; no se halla en el un vicio. La única pasión natural del hombre es amor de sí mismo.

LA EDUCACIÓN NEGATIVA

En esta etapa Rousseau habla del concepto de la educación negativa, la cual es una educación moral basada en las consecuencias naturales, sin esfuerzos mentales, con el objetivo de retrasar los vicios de la vida social.

Considera que la primera educación debe ser puramente negativa, consiste, no en enseñar la virtud ni la verdad, sino en preservar de vicios el corazón. Es preciso perder el tiempo para luego ganarlo. El periodo que llega hasta los 12 años es muy delicado, si se introduce el error en el alma será muy difícil

...