Elecciones

A lo largo de varias contiendas electorales, la pregunta recurrente para muchos de los mexicanos es: ¿Qué necesita el país?, ¿Hacia dónde vamos?, la mayoría de la sociedad erróneamente busca que la solución a varias cosas dentro de su vida se las proporcione el gobierno y por consecuente al algo ir mal dentro de la mayoría de las cosas, lo más fácil es culpar al gobierno, pero me pregunto si acaso ellos mismos reflexionan ¿Qué están haciendo para que el país marche de mejor manera?, acaso comienzan por cosas sencillas como ser mejores ciudadanos, no tirar basura a la calle, educar de la mejor manera a sus hijos para que en lugar de restar le sumen a este país.

Yo me atrevería a citar a desde mi punto de vista, uno de los mejores políticos del país, Luis Donaldo Colosio Murrieta, el cuál en su último miting político pronunció lo siguiente: “ Entre el gobierno y la sociedad hay que construir nuevas relaciones, tender nuevos puentes, nuevos métodos de trabajo, formas de asociación. Se requieren construir prácticas diferentes, que generen confianza mutua; es necesario desarrollar nuevas bases para dejar atrás viejas sospechas”.

Con la frase anterior, puedo concluir que tanto nosotros como el país vivimos una necesidad reciproca, es decir que si nuestro país no avanza es porque el engrane que a nosotros nos corresponde de este gran máquina que es nuestro país, no estamos haciendo el trabajo que verdaderamente nos corresponde, que como un comercial en esta época electoral que esta a muy poco de concluir nos decía, México ya toco fondo, ya urge salir a flote, pero no esperemos ni la solución divina, ni de quienes nos gobiernan, empecemos HOY y con nuestras propias manos a retomar el camino, desde las trincheras que a cada quien le corresponden, haciendo cada quien lo que le toque, estoy convencida que a la vuelta de la esquina nuestro país cambiara, nuestras futuras generaciones incluyendo a nuestros hijos, podrán disfrutar el país que tanto anhelamos y este se convertirá en realidad.

La imagen que como buenos mexicanos a lo largo del tiempo hemos creado de los tiempos históricos para México, ha sido sin lugar a dudas una imagen de la cuál deja demasiado que desear, pareciera que más que enorgullecernos, fuera una carga demasiado pesada para todos, tenemos una historia política bastante rica, la cuál ha marcado lo que actualmente estamos viviendo, el asunto de la raza el cuál nos llevó a una discusión demasiado complicada, de ahí el lema de la Universidad Nacional: “Por mi raza hablará el espíritu”, El mito fundador del México contemporáneo es precisamente la idea de ubicarnos como una raza superior.

Nuestra nación se ha caracterizado por ser un país cerrado a las comparaciones, quiero citar el texto de O’Gorman , “México el trauma de su historia”, en el cuál afirma que somos un país sustentado en una tesis bastante contrahecha, tratamos a toda costa de ser modernos, pero no queremos la forma de ser de la modernidad, como buenos mexicanos queremos seguir siendo los mismos, pero al mismo tiempo ser modernos, lo cuál es incompatible, el expone que al ser modernos, esto implica de igual forma cambiar a los mexicanos pero desde lo más básico e intrínseco que poseemos que lo son los valores.

Es muy fácil, de pronto, negar que ese México autoritario que les toco vivir a nuestros antepasados, es más no vamos tan lejos, que a nuestros propios padres les toco a nuestra edad vivir, ese sistema político autoritario, se mantuvo durante siete décadas en el poder, el cuál no todo lo que realizo fue erróneo, de manera personal pienso que al tener un mando en el cuál se goza de tanto poder como de privilegios, corres el riesgo de que no todas las decisiones que emitas sean las correctas, como buenos mexicanos sólo recordamos las cosas malas, jamás volteamos la cabeza hacia los aciertos que emitieron, que gracias a nuestros pasados políticos, gozamos de muchas cosas, que países como Cuba o Venezuela desearían conocer.

Gracias a los políticos de las décadas pasadas, podemos presumir ante los demás países de tener instituciones gubernamentales que velan por nuestros derechos, pero también aunque a muchos no les parezca, de nuestras obligaciones, y hablo de aquellas instituciones que algunos que se dicen “políticos” se atreven a cuestionar y desprestigiar , los llamo “políticos” porque para hacer política, debes tener un dialogo abierto a la crítica de los demás y por consecuente tienes que estar abierto a la retroalimentación, alguien autoritario que piensa que la verdad absoluta la poseen sus ideas y pensamientos, no puede incluirse dentro de los políticos, pareciera que a la izquierda mexicana se le necesita en estas épocas aclarar el concepto de lo que es un político, y que se tiene que llevar acabo para considerarse como tal.

Pero hacia todo eso me pregunto en este 2012, año de contienda electoral importante, en donde se avecina el regreso de la mas grande fuerza política del país, el Partido Revolucionario Institucional, ¿Hacia dónde vamos?.

El dilema, y lo que también debe ocuparnos, la cuál es la pregunta del día de mañana. ¿Cómo llegar al 2018 como una sociedad en crecimiento, de clase media, segura y ubicada en el mundo?

Debemos estar consientes que como se ha demostrado a lo largo de los últimos 2 comicios presidenciales, que ha vivido nuestro país en los años 2000 y 2006, los comicios son en éste siglo que vivimos definidos por los votantes más modernos, es decir los que están más vinculados con los beneficios de la globalización, el voto duro aporta un piso, necesario pero a su vez insuficiente, al decir el voto duro me refiero a aquellas personas que poseen mas edad que nosotros, nuestros abuelos, padres etc. Que toda su vida han sido priistas, panistas, etc. Y por consecuente ya sea en una elección local o en una nacional como lo es la presidencia por la república, sea quién sea el abanderado de su trinchera, esas personas emitirán su sufragio por su alma matter, es decir su partido de toda la vida.

Los cambios sin lugar a duda y como joven, aseguro que traerán cambios, segura estoy que son cambios para bien, lo que como nación demandamos y buscamos no es el simple hecho

...