Juego de villanos

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Natalia Isabel Jusino Henríquez

ID: 1065766

Prof. José Francisco Pérez

Ser Humano y Sociedad

9 de septiembre de 2015

Sec. 01

Una historia

Podemos ver como el cuento titulado “Una historia” es narrado por una mujer cercana a la familia, la confidente de la protagonista, que ya moribunda decide contarnos un secreto que lleva tiempo guardando. La historia se desarrolla en un área rural, específicamente en un pueblo al que se refieren como “un pueblo donde nada pasa a no ser la vida al lado de la muerte”. Inicia hablándonos de una familia acaudalada, compuesta por el padre, que era jefe del partido del gobierno, la madre, una cristiana devota, dos hijos, ausentes en la historia por encontrarse en el extranjero y dos hermosas hijas.

La familia, con su aire de superioridad y  su forma de tratar a los demás, era odiada por el pueblo. Los muchachos, hasta que no se fueron al extranjero se llevaban al pueblo por delante y las muchachas, que alegaban que jamás se casarían con un hombre de ese pueblo, llegaron a los cuarenta sin novio. Hasta que en un día de fiestas patronales una de las hijas conoce a un “tunante”, que se le declaró al instante y ella, sin opciones, accedió a casarse. Y así se caso sin conocer al hombre, se mudaron a una casa de huéspedes en la calle Hostos y gozó de su felicidad, yendo a sitios de bailar, de comer y sintiendo la plenitud de vida.

Pero esta felicidad solo se limitó a dos semanas, ya que al complaciente esposo enterarse de la bancarrota que vivía la familia, producto de los gallos y los malos negocios del padre, cambió considerablemente su actitud. El mal humor, las malas palabras, los insultos que recibía por parte de su pareja la hicieron optar por volver a casa, ya desgastada por la depresión.  

Luego de dos meses de ausencia regresó a casa, vestida de tristeza y vergüenza, victima del acecho de los curiosos que llegaban incluso a burlarse e inventar historias sobre la causa de su retorno. Ante esta situación la familia decidió no salir como lo hacia de costumbre, y la más afectada por la situación, nunca salió de su cuarto. Pero un día, las especulaciones y el encierro la llevaron al borde del abismo.  Alejada de la vergüenza y del pudor, corrió desnuda por la calle principal. Tal momento le sirvió al pueblo como venganza, cada quien vio la oportunidad para cobrarse y reír.  

• Mi enfoque

En mi opinión, el texto nos ofrece una forma de ver las consecuencias que conllevan nuestras actitudes en la sociedad. Una persona con cualidades como prepotencia, soberbia y egocentrismo con frecuencia recibe críticas de quienes lo rodean. Podemos ver como la joven al ser adinerada, muestra un aire de superioridad con los de su pueblo y luego de experimentar una desgracia, recibió las criticas de los demás. La sociedad de hoy en día mas que por apariencia, juzga por actitudes y por hechos, que por mas leves que sean, pueden dictar quien eres ante la vista de las demás personas.

En esta situación, no hubiese reaccionado con tal desesperación. Es fácil juzgar a una persona cuando no se conoce su situación pero en el caso de esta joven, el pueblo había sufrido las malas actitudes de los integrantes de la familia y vio este momento como el preciso para pagar con la misma moneda.

En mi caso, hubiese mantenido un bajo perfil como la joven lo hizo al inicio cuando regresó al pueblo hasta que las burlas cesaran y luego retomaría mi rutina. No sin antes disculparme con las personas que alguna vez ofendí con mi actitud, ya que este trago amargo fue suficiente experiencia para darme cuenta de mi error.

Al relacionar mi personalidad con la de la joven y su familia, pude darme cuenta como en muchas ocasiones somos ciegos ante nuestra realidad, y consideramos ésta como absoluta.  La familia nunca consideró su actitud como impropia, y la joven solo sintió la vergüenza de sus actos en el momento que estalló su paciencia y salió desnuda a la calle. También cuando la familia cae en la bancarrota por los despilfarros del padre, vemos como el ego de cada uno cae poco a poco y empiezan a mantener un perfil bajo. El egocentrismo que daban a demostrar fue el principal causante de las burlas, el cuchicheo y el doble sentido.

La narradora, que fue confidente de la joven y el baúl de sus secretos matrimoniales, nunca revelo los secretos que se le confiaron y se refería siempre a la familia con respeto, incluso expreso como los compadecía, porque con ella siempre fueron personas consideradas y por eso se quedó con ellos incluso en su desgracia.

El señor Inoa

Este cuento nos narra la historia de Ignacio Inoa, mejor conocido como el “señor Inoa”, y su proceso de jubilación. Al no poseer un titulo universitario sino un sobrio diploma de academia que lo acreditaba como Perito Contador, tuvo que arrimarse a un cargo de la administración pública de inferior categoría.  De director de departamento descendió a técnico en menos de dos años y así se mantuvo veinte años.  

En ese tiempo conoció a varias personas, muchas que se quedaban en su memoria, varios de estos personajes desconsiderados y malcriados con los cargos inferiores y el señor Inoa soportó en muchos momentos hasta burlas. Y así paso el tiempo, sintiéndose inútil, como sus habilidades ya no eran necesarias y se dio en él un proceso de recogimiento.

Su físico se fue deteriorando, se fue quedando calvo, empezó a presentar una joroba, adelgazó y su paso se tornó mas lento, ya no era el mismo. Su única motivación para no perder la esperanza eran sus cuatro hijos, que tuvo con Alida, la única mujer de su vida. Por ellos soportaba aquella interminable situación, consumiendo su tiempo en un trabajo que solo le garantizaba un sustento.

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