MODELOS DE EVALUACION.

SECRETARÍA DE EDUCACIÓN PÚBLICA

INSTITUTO ESTATAL DE EDUCACIÓN PÚBLICA  DE OAXACA

COORDINACIÓN GENERAL DE EDUCACIÓN BÁSICA Y NORMAL

DEPARTAMENTO DE ACTUALIZACIÓN Y FORMACIÓN DE DOCENTES

CENTRO REGIONAL DE EDUCACIÓN NORMAL

RÍO GRANDE, OAXACA.

CLAVE: 20DNP0013S.

MODELO DE EVALUACIÓN.

LICENCIATURA EN EDUCACIÓN PRIMARIA PLAN/97.

RESPONSABLE:

CHRISTHIAN DANIEL CRUZ RIVERA.

Río grande Villa de Tututepec de Melchor Ocampo, Juq., Oax., Enero de 2009.

• CONTENIDO.

• INTRODUCCIÓN.

1. FUNDAMENTACIÓN.

1. METODOLOGÍA.

1. INTRUMENTOS.

1. BIBLIOGRAFÍA.

• INTRODUCCIÓN.

Dentro de la formación del profesorado se hace fundamental el desarrollo de competencias básicas para organizar y llevar a cabo el trabajo docente, seleccionando recursos que sean congruentes con los propósitos planteados, para el diseño de estrategias didácticas particulares con el fin de mejorar el aprendizaje de los niños. Poner en marcha actividades de evaluación nos permite contribuir en éste mejoramiento, que según algunos teóricos como Antoni Zabala Vidiella y María Antonia Casanova, basándose en una serie de estudios señalan la importancia del uso conveniente de la información aportada por la evaluación influye en la calidad de los aprendizajes que se logran en la escuelas.

Uno de los problemas más comunes que enfrenta el docente al evaluar estriba en el error de pensar que evaluar significa medir, estimar y calificar, cometiendo con esto una evaluación mal ejercida, que forma un juicio erróneo sobre el estudiante que tiene como consecuencia que la evaluación pierda su función de corregir aquello que está mal. Entonces si al evaluar nos equivocamos ¿por qué lo hacemos?, la primera respuesta a este planteamiento tiene su origen en que al hacerlo se cumple con un trámite administrativo, en donde los resultados presentados carecen de aspectos reales, por que en escasas ocasiones se hace un análisis acerca de lo que se pretende que los alumnos mejoren.  Con el afán de corregir lo que hasta el momento se había hecho con el concepto y practica de la evaluación se presenta un modelo de evaluación que contiene una fundamentación que pretende explicar el por qué, para qué y qué evaluar en mi trabajo docente, además se presenta la metodología que seguiré al evaluar en donde se explica el cómo, cuando, donde y con qué evaluar en el grupo. La aplicación del modelo evaluativo que se presenta, tendrá lugar durante las jornadas de prácticas que se desarrollen en la escuela primaria “Lic. Adolfo López Mateos”, con el segundo grado grupo “A”, ubicado en la comunidad de Puerto Escondido, Oaxaca, a lo largo del ciclo escolar  en curso.

1. FUNDAMENTACIÓN.

La evaluación como proceso formativo es compleja y relativa, ya que está sujeta a criterios y juicios que dependen de la ideología del maestro y del sistema educativo al que se atiende. Por ello y con el afán de no emitir juicios erróneos sobre nuestros alumnos, se diseña un modelo evaluador cualitativo, formativo y continuo en el proceso de enseñanza/aprendizaje, pretendiendo dejar de lado la consideración que se tiene acerca de la  evaluación como un instrumento sancionador y calificador, en donde el maestro solo tiene la tarea de medir los conocimientos a partir de una única prueba, el examen y el numero como expresión de resultados, en este sentido la evaluación supone hablar meramente de resultados.

Para dejar atrás todas estas consideraciones se propone un modelo de evaluación que atienda al sentido cualitativo, formativo y continuo que nos permita la obtención rigurosa y sistemática de datos  validos y fiables acerca de una situación a lo largo de un proceso, con el fin de formar y emitir juicios de valor respecto a ella, la valoración que se haga nos permitirá tomar las decisiones necesarias de forma inmediata, ya sea para corregir o mejorar la situación, en donde la continuidad deberá ser factor importante para poder llevar a cabo esta función. ^[1]

El modelo evaluativo que presento supone considerar a lo largo del proceso una serie de características de acuerdo al tipo de contenido con el que se esté trabajando y a las unidades didácticas empleadas para su enseñanza, permitiéndome con esto considerar a los sujetos (maestro-alumnos) y los objetos (enseñanza-aprendizaje) de la evaluación.

Cuando hablamos de evaluar al alumno como sujeto y al aprendizaje como objeto de la evacuación, se considerará lo que el alumno: sabe (conceptos), sabe hacer (procedimientos) y es (actitudes). Cuando se habla de evaluar los contenidos conceptuales haremos referencia a la consideración de los conocimientos previos del alumno, su nivel de desarrollo, su conflicto cognitivo y actividad mental para cambiar concepciones. En cambio cuando se valoren los contenidos procedimentales se tomará en cuenta la competencia procedimental que el alumno presente, la manera en que represente el proceso, el número de representaciones progresivas y ordenadas que haga hasta lograr los objetivos. Por su parte al hablar de evaluar los contenidos actitudinales tomaremos en cuenta la motivación del alumno, actitud favorable, conducta coherente, compromiso, pensamiento, sentimientos, participación, entre otros. Ahora bien al evaluar al maestro como sujeto y a la enseñanza como objeto, hemos de tomar en cuenta la secuencia didáctica empleada de acuerdo al tipo de contenidos que se pretenda enseñar, ya que de acuerdo a las intenciones educativas de este contenido habrá secuencias que se adapten mejor y nos permitan cumplir con los propósitos establecidos. ^[2]

1. METODOLOGÍA.

Ante todo lo ya expuesto surge la necesidad de establecer una metodología que me permita atender a la consideración de evaluar de forma cualitativa, formativa y de modo continuo, en donde se pueda recoger de forma sistemática y rigurosa datos confiables sobre los contenidos o secuencia evaluada, para la obtención de conclusiones finales que me permita tomar decisiones e informar a los involucrados.

El modelo evaluativo que presento pretende tener una función formativa ya que está orientada a tomar en cuenta los procesos que sigue el niño para obtener los resultados y no de los productos terminados, en donde la finalidad es siempre mejorar el proceso evaluado ya sean los sujetos u objetos de la evaluación, y donde la toma de decisiones para corregir o mejorar se harán de modo inmediato.

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