Resumen La voz dormida cap. 42-49

Capítulo 42

Lugar: consulta privada del padre de don Fernando

Don Fernando tiene una cita con su padre porque él tiene el poder de liberar a Pepita. Le pide este favor y a cambio don Fernando vuelve a ser un médico, lo que su padre deseaba para él. Pero su padre también quiere que la saque de su casa en respeto a su mujer Amparo. Amargado, acepta y van de prisa a la Gobernación para liberarla antes de que la torturen.

Capítulo 43

Lugar: Gobernación

Carmina, el enlace de El Chaqueta Negra, está muerta y dos policías la arrastran por el suelo. Pepita ve toda la escena. Después la llevan a empujones en un cuarto y la hacen sentar, pero mientras que hay un diálogo entre los policías, ella se desmaya y cuando se dan cuenta intentan despertarla con un cubo de agua fría.
El capítulo termina con Pepita que se despierta.

Capítulo 44

Lugar: pensión Atocha

Doña Celia ha llorado por mucho tiempo pero ahora ha acabado de llorar y tiene los ojos secos y enrojecidos. Después llorará también Pepita en los brazos de doña Celia cuando le contará que las manchas de sangre que tiene sobre su vestido no son suyas sino que son de Carmina, que ahora está muerta.
Mientras que era en la policía, perdió el sentido dos veces:
La primera vez que abrió los ojos tiritaba sin tener frío, y era tan pálida que uno de los hombres dijo que parecía a un cirio.
La segunda vez el padre de don Fernando la estaba visitando y dijo que estaba bien. Don Fernando la saca de ahí y, después que su padre le recordó otra vez de sacarla de su casa, se alejó y don Fernando empezó a hacerle muchas preguntas sobre lo que sucedió y sobre el contenido de la carta de Jaime. Él sospecha de que Jaime es en realidad Paulino pero ella logra convencerlo de que Jaime no lo conoce y él deja de hacer preguntas.

Capítulo 45

Lugar: cárcel de Ventas

El doctor Ortega va a la cárcel de Ventas y ve que estaba llena de gente: las presas que tenían enfermedades contagiosas estaban mezcladas con las que no tenían enfermedades contagiosas, y además las condiciones eran horribles porque no había suficientes sábanas y mantas, y las que tenían eran sucias.
La Zapatones le dijo que cada día el número de las enfermas cambia porque unas se mueren y otras no. Indignado, le pregunta quien cuida estas personas y le dice que hay 2 funcionarias. Él va hacia ellas y ve que estaban jugando a las cartas y descubre que no tienen ninguna experiencia médica: ellas solo le dan la comida a las presas. Afortunadamente logró cambiar la situación de las presas: obtuvo mas sábanas limpias, mantas suficientes y 2 nuevas funcionarias, que eran Sole y Mercedes.
Mercedes decide ayudar el doctor porque arriesgó perder su trabajo después de que ella no supo imponer su autoridad y las presas se rieron de ella. Entonces hace todo esto para poder conservar su trabajo.
Organizaron bien la sala de enfermería: separaron las pacientes contagiosas y las que no lo eran; las cuidaron y dieron pañuelos y sabanas limpios y las funcionarias que jugaban a las cartas dejaron de jugar. Ellas tenían que dar la comida a las que estaban en aislamiento y, como no era un trabajo agradable, cuando un día Mercedes se ofreció a sustituirlas, aceptaron. Ella y Sole bajaron y en una celda encontraron a Tomasa, que estaba en condiciones horribles: desnutrida, cubierta de sabañones y sin fuerzas.
El capítulo termina con Sole que habla con el doctor para que Tomasa no se muera.

Capítulo 46

Lugar: cárcel de Ventas

Tomasa se encuentra todavía en aislamiento y sus condiciones de salud no son buenas. El doctor le prescribió que le dieran bien de comer y que la sacaran a tomar el aire, pero la Veneno solo le concede 10 minutos en el patio y ninguna porción extra de comida.                                                 Sole decide ayudar a Tomasa y empieza a traerle secretamente comidas con una sonda a través de la cerradura de la celda. La salud de Tomasa mejora y Hortensia, Reme y Elvira siguen mirándola a través de la ventana durante sus paseos en el patio y en el mismo tiempo discuten sobre las acusas contra Tomasa: la han acusado de haber matado a algunas personas en Castilblanco durante la convocación de la Federación Nacional de Trabajadores de la Tierra, pero las mujeres saben que Tomasa no estuvo en Castilblanco.

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