DESIGN THINKING

Definiendo que el Design Thinking es una metodología que busca solucionar los problemas de los usuarios y sabiendo que es una mezcla de pensamiento creativo con pensamiento corporativo que se refleja en innovación, se puede decir que  esta metodología de pensamiento se puede utilizar en diversos sectores y  que es aplicable a cualquier área, por lo que se puede aplicar perfectamente en el marketing, ya que este método se puede adaptar a nuestra estrategia creando contenidos innovadores y valiosos.

Habiendo conocido las 5 fases por las que pasa un proceso de Design Thinking (Empatizar-Definir-Idear-Prototipar-Testear), cuando se habla de marketing, la empatía es la más importante. Como bien se menciona en el Webinar, en el área de marketing y en otras áreas, es habitual comenzar por el problema, teniendo en cuenta las personas que están detrás del mismo. Empatizar permite al departamento de marketing obtener nuevas visiones y perspectivas centradas en sus clientes, porque analiza en profundidad sus necesidades y sus deseos.

Si antes de producir un contenido nos ponemos en los zapatos del cliente, podremos más fácilmente llegar a él creando un contenido valioso para solucionar su problema. De esta forma será mucho más fácil determinar las palabras clave y la intención de búsqueda del usuario.

El Design Thinking es una potente herramienta en el diseño de productos y servicios y una de las mayores ventajas que aporta es la de generar rápidamente propuestas que conectan con el usuario. Ya que, en la segunda fase, se puede dar forma a la idea y poder convertirla en modelos de negocio, basados en el producto o servicio que se esté diseñando.

Un ejemplo que nos llamó mucho la atención trata sobre la importancia de adaptar el lenguaje al receptor:

Por años, Worldwide Breast Cancer se ha dado a la tarea de “cambiar radicalmente la visión del cáncer de mama”.

 La organización sin fines de lucro ha tenido éxito con “Know Your Lemons” (“Conoce tus limones”), una ingeniosa campaña que utiliza una fruta común para mostrar los signos y síntomas de la enfermedad.

Corrine Beaumont, tras perder a su madre y sus abuelas a causa del cáncer, decidió crear en 2002 una campaña que ayudara a hacer visible los distintos síntomas que puede presentar esta enfermedad en el pecho de las mujeres, pero en el proceso se encontró con 2 dificultades:

1. Por un lado, la prohibición en muchas redes sociales de mostrar partes íntimas.

2. La complejidad de términos unida al analfabetismo de, todavía hoy, una gran cantidad de personas.

Por ello se propuso a hacer una campaña donde mostraba un cartón de 12 limones 12 limones y los compara con senos afectados por cáncer, con cada fruta individual mostrando un síntoma clave diferente, que solo con echarles un vistazo es suficiente para comprender a qué se refieren, aunque no sepas ni leer.

Al ilustrar claramente cómo lucen estos síntomas en imágenes, el póster permite a las personas “comprender fácilmente lo que necesitan saber cuando se trata de la salud de los senos, el riesgo personal y el diagnóstico”.

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