Evidencia

En algunas empresas tan pronto se termina el proceso de producción, los artículos se integran directamente a la logística para su embarque o traslado al cliente, evitando costos de inventarios por almacenaje de productos terminados, incluso muchas de las veces existen contratos con los clientes para determinar que los almacenes de la empresa sean precisamente los inventarios de los clientes, realizando ya una operación específica de costos que puede ser absorbida por el cliente o en forma conjunta.

En la cuenta de inventarios de productos terminados se contabiliza la producción de bienes cuya elaboración ha sido finalizada, que ha pasado por control de calidad y ha sido entregada al cliente. Al concluir se contabilizan los costos reales de producción y se integra de la siguiente manera:

Se contabilizan en el balance y forman parte de los activos corrientes de la organización, por cuanto se pueden vender en un plazo no mayor a un año. Esta información se utiliza para calcular las proporciones financieras. Asimismo, los inventarios de productos terminados cobran importancia en el estado de resultados, dado que figuran como el costo de las mercancías vendidas.

Cuando el producto se vende, se resta del inventario y se aplica al costo de ventas.

En años recientes, el cuestionamiento del administrador financiero acerca del mantenimiento de grandes inventarios desarrolló un sistema de control de inventarios llamado justo a tiempo (JIT), el cual fue una idea de los japoneses, ya que rompe con el concepto tradicional de mantener grandes existencias en los inventarios como paliativos ante la incertidumbre, el objetivo del justo a tiempo es recibir un artículo requerido en el momento exacto en que se necesita, con el objetivo de reducir inventarios al mínimo, o en algunos casos a cero.

Este método de ‘Justo a tiempo’ en su inicio fue implementado por los japoneses en la planta Toyota, de manera muy exitosa, y actualmente es una práctica en la mayoría de las empresas japonesas, sobre todo las armadoras de autos.

Por lo general, en la práctica la demanda o utilización de inventarios no se conoce con certeza, ya que casi siempre fluctúa durante un periodo determinado. Es muy común que la demanda de inventarios de productos terminados esté sujeta a la incertidumbre. En general, la utilización de inventarios de materia prima y del inventario en tránsito que dependen de la programación de la producción es más predecible.

Además de la demanda, el tiempo de espera necesario para recibir la entrega de inventarios una vez que se ha colocado un pedido está sujeto a ciertas variaciones, debido a estas fluctuaciones normalmente no es factible permitir que las existencias esperadas lleguen a cero antes de colocar un nuevo pedido. Por tanto, cuando al considerar la incertidumbre en la demanda de inventario, así como en el tiempo de espera, resulta pertinente contar con un inventario de seguridad.

Si la empresa tuviera un inventario de seguridad de 100 unidades y se espera que hubiera una demanda de 200 unidades cada 10 días, y un tiempo de espera de 5 días, en promedio, utilizamos la siguiente fórmula:

En otras palabras, el punto de pedir determina la cantidad de inventario de seguridad, y entre menos días menores unidades, y a menores unidades menores costos, ello nos lleva al justo a tiempo, para tener cero días de inventario.

Es esencial conocer los parámetros de nuestros clientes para preparar nuestra producción o existencias de productos terminados en función de los requerimientos de la demanda, y esto se convierte en un círculo porque lo mismo aplicaría para nuestros proveedores.

Cabe aclarar que las existencias de seguridad que se deben mantener dependen de varias cosas; mientras mayor sea la incertidumbre relacionada con la demanda pronosticada del inventario, mayor será la existencia de seguridad.

Los elementos necesarios para hacer funcionar un sistema de justo a tiempo, específicamente en la producción de automóviles y que permite optimizar nuestros inventarios de productos terminados, son los siguientes:

Concentración geográfica:

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