La Practica Psicomotriz Y La Coherencia Pedagógica
Enviado por lorenabt • 11 de Septiembre de 2013 • 755 Palabras (4 Páginas) • 592 Visitas
TEMA 1. EDUCACION POR EL MOVIMIENTO
LECTURA: la practica psicomotriz y la coherencia pedagógica*
La práctica psicomotriz puede aportar una ayuda para el desarrollo armónico el niño, en un ámbito de coherencia pedagógico, porque las finalidades educativas son también finalidades de la práctica psicomotriz. El niño tiene una autentica necesidad de vivir su omnipotencia dentro de un marco y de que esta omnipotencia sea aceptada y reconocida. Es deseable que el niño pueda repetir su acción y el placer que la acompaña, hasta el agotamiento de su energía.
El educador ha de ayudar al niño a encontrar su manera de expresarse, a ponerla en escena, respetándola, comprendiéndola y responder a ella en un marco claro y flexible. En el ámbito educativo se debe tener confianza en la buena naturaleza del niño, cuando tiene un medio sociocultural afectivo y estimulante y no tiene dificultades especiales. A los que no tienen estas condiciones favorables para un desarrollo armónico en el marco familiar, será necesario ofrecerles un cuadro de estrategias y medios para poder superar carencias educativas de su entorno. La experiencia con niños que presentan problemas de comportamiento o de aprendizaje puede hacer dudar de la buena naturaleza y hacer creer que no se puede dar una ayuda. La ayuda no es limitación ni manipulación, sino la aceptación de cada niño como sujeto único y diferente de los demás. Un educador se va haciendo por medio del desarrollo constante de la capacidad de escuchar y de comprensión del comportamiento de cada niño, lo que garantiza una comprensión profunda, que debería sustituir la intolerancia y el totalitarismo.
La comunicación es una necesidad vital, como nutrirse y descansar, más aun, porque si la necesidad de nutrirse satisface con el objeto de una manera inmediata, atenuándose la tensión fisiológica, la necesidad de comunicarse no se satisface más que con la relación, con el lazo afectivo, entre el educador y el niño. Gracias a que el niño tiene buena comunicación en el aula, el niño sestara progresivamente más atento a los demás, será más capaz de dar y recibir, podrá compartir el placer de la creación y estará menos centrado en si mismo, porque se ha favorecido el distanciamiento de sus reacciones afectivas incontroladas y lentamente el peso de la afectividad se atenuara y se producirá un reconocimiento mutuo y el dialogo. La comunicación entre el adulto y el niño o el grupo de niños es un estado de bienestar en el que las tensiones desaparecen y las personas se escuchan y se comprenden, los gestos y las palabras, tanto del niño como del adulto, se cargan de sentimientos positivos de cada uno hacia todos. Un niño capaz de comunicar, no plantea problemas afectivos graves, se puede decir simplemente que se encuentra bien en su piel, no se plantea problemas en cuanto su identidad, ni en casa, ni en la escuela, existe y tiene un sitio.
El
...