PEDAGOGIA DE LA PREGUNTA

POR UNA PEDAGOGIA DE LA PREGUNTA

INTRODUCCION

Paulo Freire y Antonio Faundez en su libro dialogado Por una pedagogía de la pregunta. Crítica a una educación basada en respuestas a preguntas inexistentes pueden darnos algunas pistas sobre el desarrollo de una pedagogía liberadora robusta que vaya más allá de la retórica vacía. En ese tratado en defensa de una práctica educativa basada en la pregunta y no en las respuestas prefabricadas, se plantean los retos de los procesos participativos y los malabares que implica una colaboración estrecha con el Estado que no dinamite el principio mismo de la libertad colectiva.

A su vez, el testimonio de Freire y Faundez apuesta por un compromiso insobornable con la realidad cotidiana sin la pretensión de que lo sabemos todo antes y, mucho menos, sin la falaz idea de que los maestros sabemos más y mejor. Una pedagogía de la pregunta comienza por un reconocimiento sencillo: la humanidad toda es, por sobre todas las cosas, curiosa y preguntona. Reflexionemos sobre cómo les vamos coartando su insaciable capacidad inquisitiva. Reconozcamos que en nuestra domesticación del porqué, de los primeros años de nuestra infancia, lo que se esconde es el miedo.

DESARROLLO

Todos y todas somos conscientes que la sociedad actual tiene la tendencia a no ponerse en riesgo ante ninguna situación, a no ponernos “en lugar y en juego”. Este conformismo social general crea una sociedad de cobardes, satisfechos, sumisos.

A pesar de que muchos hombres y mujeres piensan de esta manera y viven echando cualquier tipo de actitud el conformismo requiere la aniquilación de la consciencia ya que como decía Karl Marx, si “el hombre o mujer es esencialmente un ser de acción” y su realidad no viene determinada genéticamente si no que es conciencia de lo que él o ella ha hecho.

Paulo Freire como Antonio Faudez, con sus palabras y reflexiones a través de sus experiencias de vida y diálogo, experiencias y diálogos a través de los cuales todos y todas nos convertimos ciudadanos y ciudadanas participes de las necesidades de pensar y activar el presente, de la esencialidad de encontrar y rencontrar el DESEO el INTERES la NECESIDAD.

Hay una lógica predeterminada en la que el estudiante existe para aprender yel profesor para enseñar, individuo que tiene la verdad absoluta del aprendizaje, excluyendo al y la estudiante del mismo proceso educativo.

Si aplicamos la lógica del aprendizaje actual o la pedagogía de la respuesta, presente en la mayor parte de las instituciones educativas, podemos afirmar que la metodología predominante es la de dar respuestas a los educandos y educandas, por tanto, el acto de aprendizaje termina en sí misma.

Desde mi punto de vista las preguntas son un elemento pedagógico que dan una buena solidez al proceso de aprendizaje en sí, sobre todo al auto-aprendizaje, que no está limitado a un periodo o etapa de vida, si no que se produce a lo largo de la vida de cada una de las personas; que desarrollamos la capacidad para percibir de forma crítica nuestra existencia en el mundo las diferentes realidades en continua transformación.

El diálogo entre Freire y Faundez nos lleva a la pedagogía de la respuesta y la seguridad ideologizada, según la cual la y el estudiante existe para aprender y el profesor y la profesora para enseñar entienden que enseñando se aprende, afirmando que en la actualidad los y las profesoras difícilmente.

Un aprendizaje permanentemente no solo requiere una buena educación y formación sino una ACCION- REFLEXION-ACCION, es decir, asegurar y realzar todos los ámbitos que componen y comportan la vida de los hombre y las mujeres, relaciones y las prácticas en las que los y las niñas, los y las jóvenes y los y las adultas

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