CUALES SON LAS CAUSAS DEL INCUMPLIMIENTO DE LAS LEYES DE TRÁNSITO TERRESTRE

REPÚBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELA

MINISTERIO DEL PODER POPULAR PARA LA DEFENSA

UNIVERSIDAD NACIONAL EXPERIMENTAL POLITÉCNICA

DE LA FUERZA ARMADA NACIONAL

UNEFA –NÚCLEO ARAGUA

Incumplimiento de las leyes de Tránsito

Terrestre en Venezuela

CINU: INGENIERÍA EN SÍSTEMAS                                  BACHILLER:

SECCIÓN: SIN004                                                                    WINSTON BARRIOS

PROFESORA: EUGENIA MONTESINOS                                            C.I.:26166137

MARACAY-NOVIEMBRE

Incumplimiento de las leyes de tránsito terrestre en Venezuela

Cuando tomamos la decisión de manejar en Venezuela deberíamos pensarlo dos veces antes de hacerlo y aunque lo hagamos todos los días sin imaginarnos mínimamente un riesgo sabemos que muy pocas personas cumplen las leyes de tránsito terrestre. Esto significa que en cualquier lugar de estas carreteras puedes disgustarte, lesionarte o a alguien más y en el peor de los casos matar alguien o morir. Estamos consientes de que ninguna de estas personas cumple al pie de la letra dicha ley y no se justifica pues no debería ser así. Pero, alguno de ustedes se ha preguntado por qué sucede esto, cuál es la razón del venezolano para ignorar con tranquilidad y sin mayor preocupación todos los peligros que corre al salir a manejar sin previsión. Lo antes mencionado corresponde a muchas causas justamente originadas por conductores ignorantes,  no amonestar a los incumplidores de la misma, corruptos “matraqueros” de tránsito, entre otros. La responsabilidad también recae en la educación sobre la seguridad vial, que actualmente se deja a un lado, a pesar de lo importante que es, y da comienzo a una población futura con tal conducta que desatiende por completo la seguridad vial, ya sea porque los demás lo hagan, por causa de inseguridad, pereza, estrés u otros.

También se destaca no solo el incumplimiento, sino la agresión de estos quienes en su mayoría son hombres y algunas de las faltas que ejecutan son: gritar por todo a todos, pasarse los altos y no respetar los semáforos, hacer gestos con las manos y con la cara, tocar la bocina constantemente, hacer cambio de luces, rebasar por la derecha, aproximarse demasiado al vehículo que circula adelante, acelerar el motor apresurando a los demás. Todo esto aturde a los demás conductores los cuáles toman conductas similares y todo se vuelve un caos de tránsito. Principalmente, los afectados por estos conductores son los taxistas y transportistas públicos, aunque a veces ellos también son ejecutores de estas acciones, mujeres, conductores jóvenes y automóviles viejos. Algunos consejos para evitar convertirse en un conductor agresivo son: tratar de ser paciente y cortez, no manejar mientras está molesto, evitar las prisas, salir con tiempo ó anticipación, evite el tráfico pesado, escuchar música relajante; Este tipo de conductores que usan el tránsito terrestre como vía de escape a otros problemas humanos son los causantes de la mayoría de accidentes de tránsito. El vehículo no tranforma  al conductor, el tránsito no genera conductas agresivas sino que cada uno conduce según su personalidad.

En la mayoría de los estados centrales de Venezuela podemos notar la complejidad de manejar y el tráfico en gran volumen, coincidimos en que estos dos son nuestros grandes problemas además de agregar que por parte del estado no se le ha dado la debida importancia. La solución a este problema que se ha convertido en un verdadero caos, tendría que venir en mayor parte de los organismos competentes, que son los que manejan los recursos económicos y administrativos. Pero también es cierto que gran parte de este caos lo generamos nosotros mismos al incumplir la Ley de Tránsito Terrestre, el incumplimiento de la ley desde mi punto de vista puede ser por tres razones: 1. Desconocimiento de la misma. 2. Costumbre. 3. Irrespeto a los demás por egoísmo y “viveza criolla”. En esta ley no caben las escusas de que sea una ley autoritaria ni mucho menos inmoral que pueda ser utilizada para la desobediencia civil. Es una ley que nos favorece, que invita al respeto mutuo, a la tolerancia y en fin para que vivamos mejor en armonía. Muchos se quejan pues dicen que el gobierno tiene el país hecho pedazos asimismo dicen que mientras el gobierno no cambie no podemos hacer nada, pues sí hay una solución. Podemos comenzar por cumplir esta ley, no esperemos a que se mande a cumplir obligatoriamente con normas estrictas, debemos hacerlo porque queremos un país mejor, un país desarrollado. 

Cuando alguien pisa por la calle a otra persona sin querer, seguramente esta acepta sus disculpas sin mayores problemas. Ahora planteando de esta forma un ejemplo, ¿qué sucede si una persona al frente de un automóvil, realiza sin darse cuenta (al igual que cuando fue pisada la otra persona en el ejemplo anterior) una maniobra que obliga a que usted frene su vehículo?, Seguramente sentirá que esa persona lo agredió intencionalmente, y que esa cuestión no puede quedar así, por lo que responderá en igual forma. Son variadas las versiones acerca del motivo por el cual algunos conductores, habitualmente correctos, se comportan agresivamente al volante o se ven implicados en conductas peligrosas. En algunos casos trata del estrés y emociones al volante también depende del estado de ánimo “La peligrosidad del conductor se debe a que en estos momentos, la ciudad tiene un alto porcentaje de gente con stress o con neurosis. Siendo esto algo que ha pasado a formar parte de nuestro estilo de vida.” (Dra. Hilde Riera). Conducir es una actividad exigente y cambiante, por ende, potencialmente estresante. Conducir es un trabajo duro que nos exige mucho más de lo que parece. Involucra al conductor psicológica y físicamente. Requiere de concentración y un estado de alerta y atención permanentes. Por ello, el logro de un desempeño correcto depende, no sólo de las habilidades adquiridas por el conductor para dominar su vehículo en todo tiempo y circunstancia, y del adecuado estado físico para poder percibir adecuadamente las situaciones del camino, sino que también depende de la experiencia, de la clara conciencia de los riesgos de moverse en el sistema del tránsito, y de la madurez y equilibrio emocionales, que harán posible el desarrollo de actitudes y comportamientos seguros. Un conductor estresado no está en las mejores condiciones para conducir con seguridad ya que las exigencias del tránsito lo sobrepasarán fácilmente, amentando significativamente la tensión y el malestar interior.

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