Cómo utilizar los aprendizajes esperados en la evaluación formativa.

Curso Básico de Formación Continua para Maestros en Servicio 2012

“Transformación de la práctica docente”

Agosto 2012.

PRODUCTO 4.2 (texto): Cómo utilizar los aprendizajes esperados en la evaluación formativa.

A partir de la actividad anterior elaboren un texto escrito a manera de reportaje que atienda al tema:

Usos de los aprendizajes esperados en la evaluación formativa.

APRENDIZAJES ESPERADOS: REFERENTES OBLIGADOS PARA LA EVALUACIÓN.^[1]

Por: “Los Cantantes”.

Es innegable que en la actualidad nuestro Sistema Educativo está pasando por un proceso crítico y que la forma en que evolucione será trascendental para nuestra sociedad mexicana. Se habla de la Reforma Integral de Educación Básica (RIEB), la cual culminó su fase de generalización el ciclo escolar 2011-2012 con la introducción de la misma en 3° y 4° grados de primaria.

Un elemento fundamental para la implementación de la RIEB en las aulas lo conforman los denominados aprendizajes esperados que se constituyen como directrices de la labor docente y del desempeño de los alumnos, principales actores de esta reforma.

Por otra parte, los medios de comunicación hacen diversos señalamientos acerca de las evaluaciones estandarizadas en el Sistema Educativo Nacional, generalmente con connotaciones negativas. La finalidad de este texto no es definir si tienen o no razón, ni tampoco discutir sobre esas evaluaciones estandarizadas, sino exponer, aunque de manera  somera, qué son los aprendizajes esperados y qué relación tienen con la evaluación que se realiza cotidianamente en las escuelas.

Para ello, tenemos que partir de conocer cómo se organiza la Educación Básica en el marco de la RIEB. Curricularmente se divide en cuatro periodos: 1) los tres grados de preescolar; 2) 1° a 3° grados de primaria; 3) 4° a 6° grados de primaria; y 4) los tres grados de secundaria.

Para cada periodo se establecen los llamados estándares curriculares, los cuales son “descriptores de logro y definen aquello que los alumnos demostrarán al concluir un periodo escolar…” ^[2].

Sin embargo, para el trabajo diario y cotidiano del docente, se requiere de referentes a menor plazo que no sustituyen a los estándares curriculares sino que abonan a la consecución de los mismos. Tales referentes son los aprendizajes esperados.

“Los aprendizajes esperados son indicadores de logro que en términos de la temporalidad establecida en los programas de estudio, definen lo que se espera de cada alumno en términos de saber, saber hacer y saber ser…” ^[3].

Entonces, los aprendizajes esperados son pequeñas metas a corto plazo que cada alumno debe lograr y que, en conjunto, conllevarán necesariamente al cumplimiento de los estándares curriculares ya antes mencionados.

Tanto los aprendizajes esperados como los estándares curriculares están definidos bajo el enfoque formativo y funcional de la RIEB que busca el desarrollo de competencias para la vida en el alumno. En este marco se entiende a la competencia como “la capacidad de responder a diferentes situaciones, e implica un saber hacer (habilidades) con saber (conocimiento), así como la valoración de las consecuencias de ese hacer (valores y actitudes).” ^[4]

Por lo tanto, los aprendizajes esperados se erigen como el referente obligado para el docente desde el momento de la planeación, ya que orientarán la elección, el diseño y/o la implementación de estrategias y actividades didácticas para que todos los esfuerzos se focalicen a lograr los mismos. Así mismo, orientan el diseño, la elección y/o implementación de estrategias e instrumentos de evaluación, ya que determinan con precisión que es lo que el alumno debe aprender y, por lo tanto, lo que se debe evaluar; y ya que se trata de una evaluación formativa, no sólo en lo referente al propio alumno, sino también del actuar del docente y del proceso enseñanza-aprendizaje.

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