EL PAPEL DEL DISCURSO EN LOS PROCESOS DE ENSEÑANZA

EL PAPEL DEL DISCURSO EN LOS PROCESOS DE ENSEÑANZA

Desde el momento en que los individuos empezaron a agruparse y formar comunidades el aprender nuevas cosas a través de la enseñanza y la transmisión de conocimientos se convirtió en uno de los pilares fundamentales para el establecimiento de comunidades, desde las individualidades cada persona podía ser parte de ese proceso constructivista, un proceso que con el paso del tiempo tomaría la forma educativa que conocemos hoy en día, no desconocemos la importancia que ha tenido el conocimiento para el desarrollo social, pero ¿en qué medida la escuela ha sido importante para ese proceso educativo?, ¿es realmente necesaria su identificación?¿Qué papel ha ocupado el discurso epistemológico en el proceso de enseñanza?

La base de una sociedad es la cooperación, la integración de individuos que aún teniendo intereses particulares, atienden al llamado de crear una realidad social colectiva, en este proceso de construcción el conocimiento ha tomado un papel fundamental para el desarrollo, desde la Antigüedad ya era posible ver como los espacios de debate público y las diferentes escuelas de pensamiento eran trascendentales y tenían una posición bastante elevada, no por nada grandes pensadores se convirtieron en figuras representativas para una cultura en una época determinada, pensadores que aún hoy en día siguen vigentes y sus bases teóricas son fácilmente adaptables a nuestras sociedades, dónde el discurso cumple una función esencial, solo a través de él es posible una difusión del conocimiento abierto e inclusivo, no obstante ese proceso de construir a partir del conocimiento ha cambiado considerablemente a través del tiempo, como también ha cambiado la forma en que se enseña; nuestras sociedades actuales se han configurado como un conjunto de instituciones sociales, las mismas que se encargan de mantener una cohesión entre todos los individuos, la misma experiencia nos ha demostrado que una sociedad no puede sostenerse en el tiempo sin la creación de instituciones que le proporcionen un sentido de supervivencia, aunque sea meramente simbólico o imaginario, las sociedades viven por sus huellas, sus memorias históricas y en ese trasegar de una enseñanza libre a una institucional se han empezado a crear barreras, se construyen murallas que reducen el conocimiento a una construcción social solo posible en dichos espacios.

De este modo las instituciones se convierten en la materia prima humana, en las cuales unas sobresalen en mayor medida que otras, siendo la educación una de las más representativas pues prepara al individuo con unos conocimientos y una memoria cultural que permitirá que la sociedad perdure.

La escuela es una institución que ha resultado del parcelamiento del terreno social, producto de un tiempo histórico ha recogido diferentes funciones, al tiempo que se ha creado todo un sistema educativo a su alrededor que la sostenga, con el paso del tiempo estas que se habían desarrollado en espacios abiertos dando libertad a cada uno de los participantes empezaron a focalizarse y delimitar los espacios, hasta las estructuras físicas que conocemos hoy por aula de clases. Es necesario precisar que el término educación tuvo su origen en la modernidad, antes esa función la cumplía la familia y se complementaba con unos espacios de aprendizaje que tenían las características de ser públicos, mediados notablemente por el discurso epistemológico; al emerger como un recorte social tiene la función de trasmitir experiencias y conocimientos, con un carácter inherente e invariante a toda cultura. Todas las sociedades y grupos de personas han encontrado la manera de mantener vivas sus memorias, conocimientos, costumbres y rituales, en la modernidad la educación es la que cumple ese papel.

La cultura institucional social y especialmente la educativa como mundo simbólico, es productora de prácticas, estilos y funcionamientos; la escuela es una producción institucional determinada por una época y como vimos anteriormente actualizada hasta nuestros días, como toda organización social remite a una relación entre los individuos y la escuela como figura visible, construida en base a relatos y experiencias previas adapta un modelo escolar que reúne individuos con una edad similar, los ubica en un espacio y hora determinados y comparte los conocimientos culturales de una generación a otra, para ello se definen ciertos roles para ejecutar funciones que están definidas dentro del marco social, para el caso especifico la formación queda a cargo del maestro.

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