Proceso Enseñanza-Aprendizaje

Proceso Enseñanza-Aprendizaje

“La primera e ineludible tarea de la educación es enseñar un conocimiento capaz de criticar el propio conocimiento”. Históricamente el proceso de enseñanza se ha caracterizado de modo utópico; que va desde una identificación de los procesos de enseñanza, con una marcada relevancia central de los docentes como transmisores de conocimientos; hasta las definiciones más contemporáneas en la que se concibe el proceso de enseñanza-aprendizaje como un todo integrado que pone de relieve el papel protagónico del educando. Es por eso que el Proceso Enseñanza-Aprendizaje es el conjunto de actos que realiza el docente con el propósito de plantear situaciones que proporcionan a los alumnos la posibilidad de aprender.

Si bien es cierto, el docente es un sujeto de suma importancia en el proceso de enseñanza-aprendizaje, también es cierto que no es el único ni, por asomo siquiera, el más importante, aquí los más importantes son los alumnos. Y es por eso que el docente debe seleccionar y organizar las actividades de aprendizaje con los procedimientos y recursos adecuados con el fin de conducir a los alumnos, al logro de los objetivos propuesto: el proceso docente supone conciencia de intencionalidad en la enseñanza- aprendizaje.

El quehacer docente es una actividad que requiere preparación constante, carácter, actitud, tenacidad, creatividad, vocación y mucha paciencia para sobrellevar adecuadamente la misión asignada. Todo docente que se precie de serlo sabe perfectamente esto: “educar no es tarea fácil”. El docente puede propiciar que el proceso de enseñanza-aprendizaje se realice más fácilmente

Por otro lado el discente debe contar con la voluntad para aprender y buscar las mejores formas de lograr captar el conocimiento proporcionado por el docente logrando formar sus propios juicios y razonamientos de diversos temas de realidad.

A lo largo de la historia de la pedagogía, se ha postulado la enseñanza, como el problema fundamental de la pedagogía. Y en consecuencia con esta posición, los esfuerzos se han centrado en preparar y formar a los profesores en las técnicas de enseñanza en el supuesto de que automáticamente luego de la enseñanza el alumno captaría el aprendizaje sin mayor esfuerzo. Esta posición asume que la enseñanza es la causa del aprendizaje, la cual no necesariamente se encuentran vinculadas en una relación casual, sino que en el proceso educativo el alumno debe desplegar muchos esfuerzos para aprender; en esta ardua tarea el alumno no debe ser abandonado por el profesor. Es por ello que surge la idea que el aprendizaje debe ser activo en donde el alumno debe actuar permanentemente en el proceso educativo que parte del propio sujeto, relacionando sus propias experiencias, su pasado histórico, su contexto sociocultural, emociones; es decir no es posible aceptar que el aprendizaje es un fenómeno externo, sino sobre todo un proceso interno donde el mismo alumno de modo activo y a partir de sus interacciones facilita su autoconstrucción de aprendizajes significativos en busca de su desarrollo personal y profesional.

La enseñanza es el proceso por el cual se transmitirá información mediante la comunicación directa o soportada en medios auxiliares, que presentan un mayor o menor grado de complejidad y costo. Como resultado de su acción, debe quedar una huella en el individuo, un reflejo de la realidad objetiva, del mundo circundante que, en forma de conocimiento, habilidades y capacidades, le permitan enfrentarse a situaciones nuevas con una actitud creadora, adaptativa y de apropiación, es por tanto, un proceso progresivo, dinámico y transformador. El docente debe tener la capacidad de conocer la realmente la situación académica en la cual se encuentra el discente, ya que el hecho de que el alumno se encuentre en un aula donde la mayoría tiene un promedio elevado no quiere decir que todos respondan con la misma facilidad o que tengan tales conocimientos que los demás.

Pues ahora el docente tiene el mayor reto de decidir:

Qué enseñar: Lo cual se va a establecer a partir de la consideración y problematización de la realidad social, su complejidad, heterogeneidad y conflictos internos; donde se debe comprender los objetivos o competencias que fomenten el desarrollo de los alumnos y los contenidos expresados como conceptos, principios, habilidades, valores, normas; las cuales se pueden expresar como competencias básicas a ser logradas por los alumnos así como, las capacidades y actitudes que orientaran la tarea del docente.

Cuándo enseñar: El docente se guiará a través de la secuencia lógica y psicológica de los contenidos en una situación real de aprendizaje; el docente debe saber delimitar el tiempo en el cual se llevara la ejecución curricular y la organización de los contenidos según

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