El Conductismo vs. constructivismo

Introducción

Para estudiar el comportamiento que se observa en un individuo, es decir, su conducta se creó a mitad del siglo XX por Watson, una corriente psicológica que basa su teoría en que al aplicar une estímulo le sigue una respuesta que corresponde a la interacción del organismo estimulado y el medio ambiente, a esta se le conoce como conductismo.

Existe de otra forma, inspirada en la psicología constructivista, el constructivismo que señala que para que exista aprendizaje, el conocimiento debe de ser construido o reconstruido por el propio sujeto que aprende a través de la acción, donde cada estudiante reconstruye su propia experiencia interna. Los artífices de este pensamiento educativo son Ausubel, Piaget y Vigotsky.  (Y basados en conocimientos aplicados por Pavlov)

Dentro de las diversas teorías del conocimiento que han sido desarrolladas a través de la historia y que hoy los seres interesados en esta línea educativa tenemos la oportunidad de otear, deslumbrar desde diferentes ópticas nos encontramos hoy con dos ramas de un mismo árbol pero en dirección contraria, una que por sus aportaciones en la década de los cincuenta en el siglo anterior tuvo repercusiones a nivel mundial y muchos países tomaron como bandera las aportaciones científicas de los soviéticos. Es muy común revisar las gráficas de los textos conductistas en encontrarnos la imagen de un perro atado del cuello a una cadena y al encender una luz o escuchar el sonido de un recipiente, este comenzaba a estimular su proceso digestivo provocando salivación o baba. Después de este fenómeno de la conducta del ruso Iván Pavlov que afirmaba que los actos de la vida no eran más que reflejos, siguieron otros investigadores como Edward Lee Thorndike, estadounidense que aporto su teoría del conexionismo, en la que argumentaba que el aprendizaje se componía de una serie de conexiones entre un estímulo y una respuesta y que se fortalecían en el sujeto cuando generaban en este un estado de satisfacción. Las aportaciones de Thorndike llevaron a otro investigador, a Skinner a crear en el conductismo su teoría de condicionamiento operante, que afirma que la psicología debe de estudiar el comportamiento observable de los individuos en interacción con el medio que los rodea.

Dentro de esta línea en los años 60, Bandura propone el aprendizaje imitativo que estudia bajo qué condiciones se adquieren o desaparecen los comportamientos mediante el proceso de imitación marcando con esto un eslabón entre la metodología conductista y los procesos psicológicos subjetivos. Los conductistas actuales investigan estímulos, respuestas observables, el grado medible del aprendizaje, además de revisar el funcionamiento psicológico consistente en la interacción que se produce, de manera continua entre la conducta personal del alumno, y el determinismo del medio ambiente. Muchos compañeros de mi generación podrán pensar que las corrientes conductistas son obsoletas, hipótesis caducas que deben sepultarse y dar paso a las teorías constructivistas que hoy, en inicios del  siglo XXI están de moda y son el paradigma  a seguir (aunque sea en teoría y en discurso).

Para el constructivismo clásico hay tres figuras relevantes, iconos de la transformación educativa (hasta que aparezca esta teoría que la desplace) en la que los teóricos de la educación han destinado un nicho en los cielos de la educación: Jean Piaget, Lev Vigotsky y  David Ausubel, que afirmaron que los alumnos construyen conocimientos por sí mismos.

Lo mismo que el resultado de la torre de babel, aunque constructivistas los tres, tienen puntos de vista que difieren entre sí, Piaget por ejemplo con su boina, su pipa y su colección botánica y de fósiles asegura que el sujeto interactúa con el objeto del conocimiento; Lev, en un ruso difícil de entender  que el conocimiento se produce si  lo interactúa con  otros iguales a través de su teoría sociocultural del aprendizaje; y David, por su parte considera que el conocimiento se crea solo si es significativo para el sujeto en su teoría del aprendizaje significativo.

Bien, entonces los constructistas refieren que la teoría del aprendizaje tiene como objetivo generar el aprendizaje por medio de la construcción de conocimientos en base a las experiencias del alumno, por medio de la realización de actividades que son de utilidad en el mundo real.

También se busca que los alumnos sean los responsables de su propio aprendizaje mediante la construcción de significados, es decir, que el aprendizaje sea el resultado de su experiencia.

Hagamos entonces una tabla comparativa,  en este ring educativo donde los rudos como Skinner, Watson y Pavlov se enfrentan a los técnicos comandados por Piaget, acompañado de Ausubel y Vigotsky:

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