La Higiene (personal, Casa Y Escuela)
Enviado por 9765 • 4 de Octubre de 2013 • 2.871 Palabras (12 Páginas) • 3.848 Visitas
Introducción
Este presente ensayo tiene la finalidad de conocer y abordar de manera general los tipos de higiene que debemos practicar en nuestra vida diaria, con el objetivo de prevenir muchas enfermedades, saber en qué consiste cada una de ellas, y cuáles son las causas que lo originan.
Por lo tanto, considero que desde el preescolar se debe fomentar en los niños y niñas la higiene, no solo para la imagen personal, sino también para el cuidado de la salud, siendo un hábito que debe adquirir desde pequeño y a través de la práctica diaria y la imitación de los mayores, lo cual fortalecerá el desarrollo de estas actividades por sí mismo.
Es muy común pensar que en la escuela se trasmiten únicamente saberes académicos, siendo esta idea una concepción muy alejada de la realidad, ya que los educandos, en sus actividades diarias, practican actividades como: lavarse las manos antes de comer y después de la comida, limpiarse los dientes tras el desayuno, y al término de realizar sus actividades escolares.
La higiene no sería posible si las capacidades motrices no empiezan a estar desarrolladas, por eso, desde la escuela, debemos promover en los alumnos la coordinación de movimientos, los cuáles le ayuden a realizar acciones como frotarse las manos, enjugárselas, secárselas, etc. Estas habilidades serán la base de su aprendizaje en la práctica de estos hábitos de higiene, dentro de los diferentes contextos en que se desenvuelve el alumno. A continuación menciono los tipos de higiene que deben practicar los alumnos:
Higiene personal: Se realiza con el objetivo de conservar la limpieza de cualquier agente externo, es elemental para poder prevenir y conservar la salud, incluso mejora la calidad de vida.
Higiene escolar: Tiene como objetivo transmitir la importancia de la higiene en los alumnos, está orientada a mantener limpio sus lugares de trabajo y en donde se desenvuelven.
Higiene en casa: Es la forma más sencilla de cuidar nuestro hogar y de toda la familia, incluye el cuidado, la limpieza en las tareas rutinarias como hábitos diarios. Para mantener aseado los espacios de nuestro hogar.
La higiene (personal, casa y escuela)
La higiene personal comprende todo lo que hacemos con el fin de estar limpios y estar sanos. El cuidado personal va más allá de ducharnos y lavarnos las manos: también consiste en cuidarnos el cabello, los dientes, en llevar las uñas bien cortadas y limpias, en no olvidarnos de utilizar el desodorante y vestirnos con ropa limpia.
Así pues son muchos los aspectos que debemos tener en cuenta, pero, sin duda alguna, éstos son básicos para dar una buena imagen de nosotros mismos como docentes y poner el ejemplo para nuestros alumnos sin nos preocupamos por la higiene, tendremos un aspecto agradable, oleremos bien y también nos sentiremos bien con uno mismo. Todo ello significa qué nuestra presencia resultara agradable a los demás.
Las personas que no se preocupan por la higiene tienen un aspecto sucio e incluso pueden oler mal. En la escuela, los niños no querrán ser amigo de alguien así. En el trabajo, un empresario no va querer contratar a alguien que no tenga en cuenta la higiene, y a los empleados no les va hacer ninguna gracia tener que trabajar con alguien que no vaya limpio. Otra razón importante para tener en cuenta la higiene personal es la salud, ya que la higiene es un habitó que a su vez sirve para prevenir posibles enfermedades.
La higiene en la escuela
Para nuestra labor diaria, como maestros debemos preparar con anterioridad los materiales a utilizar con los alumnos con respecto al aseo en nuestro día, por ello la planificación de las actividades incluyendo la higiene y cuidado del espacio educativo, deberán hacerse previamente al llegar a nuestra escuela con nuestros alumnos.
Materiales para el ase en el aula
Jabón o jabón líquido: Con este elemento trabajaremos los hábitos de higiene en nuestras manos en momentos de utilizarlas de diversos materiales de plástico y también antes los momentos de salir al recreo.
Tollas o trapos: para que los niños y las niñas sequen sus manos tras lavárselas o tras limpiarse los dientes, favorecemos así su uso frente a las costumbres infantiles de secarse las manos en la ropa, fuente también de múltiples infecciones.
Cepillos de dientes y vaso para enjuagarse: Cada niño cuando iniciamos el ciclo escolar le indique que todos los niños deberían traer un cepillo de diente y un vaso, ya que en la escuela los niños (as) después de su almuerzo deberían lavarse los dientes, debemos promover desdés los 3 años que los niños y niñas tengan una buena higiene sabiendo que debemos ayudarles a terminar esta difícil tarea.
¿Por qué educar en hábitos de higiene?
En estas edades es muy frecuente que los niños y las niñas se enfermen debido a agentes infecciosas, por lo tanto, debemos conocer que estas enferman edades que podemos catalogar como fuente de trasmitirlas y la falta de limpieza es un factor muy impórtate para nuestro bienestar de nuestros alumnos si todo realizamos el papel de cada uno que nos tocada llevaríamos una buena higiene con los alumnos y con la sociedad misma y en la institución.
Los hábitos se trabajen diarios y en cada uno de los aspectos que rodean en la vida en la escuela. Sin embargo, hay que destacar que conseguir que los niños (as) alcancen los objetivos propuestos, debemos de armarnos de paciencia, ya que los resultados no se verán de inmediato, sino que aparecerá a largo plazo como el pensamiento de los niños(as) están en un desarrollo, debemos tener en cuenta que los hábitos que pretendemos lograr sean los más simples posibles, avanzando en dificultad progresivamente en el tiempo. Importancia del ambiente Que mis alumnos deben contar con un ambiente que está plenamente a su disposición ya que en el tiempo de permanencia en la escuela será muy amplio y las necesidades de movimiento y de autonomía ira creciendo en el paso de los años. Por ese motivo, los artículos de aseo estarán a su alcance, es decir, si queremos que nuestros alumnos se laven las manos necesitamos que el jabón y la toalla estén a su altura. Con la práctica, el niño sabrá donde están los objetos de higiene, añadiéndolo progresivamente su esquema de conocimiento e interesándolo como un hábito del día al día.
Los hábitos no son un castigo
Cuando proponemos a nuestro alumnado que se aseen tras la vuelta del recreo o tras ver realizado la ingesta de alimentos, debemos tener presente que la adquisición de hábitos no es un hecho obligatorio y que su no realización supondría un castigo inmediato, hemos de verla como una acción positiva que al realizarla proporcione placer a las personas es así cuando entran al
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